Revista Científico-Metodológica, No.81 septiembre-diciembre, 2024. ISSN: 1992-8238
MSc. Marisley Tenreiro Moreno. Centro Politécnico de Mecánica Industrial Amistad Cubano-Soviética
Correo Electrónico: marisleytenreiro@gmail.com
Orcid: https://orcid.org/0009-0001-6091-5056
RESUMEN El artículo es el resultado de la investigación científica doctoral y la práctica profesional aplicada en el Centro Politécnico Amistad Cubano-Soviética de Playa, en torno al estudio de las personalidades históricasen el proceso de enseñanza-aprendizaje de la Historia de Cuba. El objetivo es fundamentar desde los referentes que brindan la ciencia y la tecnología, el estudio de las personalidades históricas para la educación en valores. Se contribuye mediante el estudio de figuras históricas con un carácter positivo y la influencia que su ejemplo y decisiones puedan ejercer sobre los jóvenes, como la vía más segura para educar en valores en el tercer perfeccionamiento educacional. Como parte del proceso se utilizaron métodos teóricos y empíricos desde la concepción dialéctico materialista para estudiar y esclarecer el estado del arte, que evidenciaron insuficiencias. El trabajo enfatiza en el vínculo que, para el aprendizaje tienen, los procesos afectivos y cognitivos. Muestra, además, que todo proceso cognitivo posee una génesis social, así como una interrelación entre aprendizaje y desarrollo desde el estudio de las personalidades históricas, siendo una posible solución para este problema, constituye una condición esencial la preparación de los profesores que rectoran la docencia y la educación en valores. Palabras clave: personalidad, historias de vida, valores |
ABSTRACT The article is the result of doctoral scientific research and professional practice applied at the Cuban-Soviet Friendship Polytechnic Center at Playa municipality, around the study of historical personalities in the teaching-learning process of the History of Cuba. The objective is to base, from the references provided by science and technology, the study of historical personalities for education in values. It contributes through the study of historical figures with a positive character and the influence that their example and decisions can exert on young people, as the safest way to educate in values in the third educational improvement. As part of the process, theoretical and empirical methods from the dialectical materialist conception were used to study and clarify the state of the art, which revealed insufficiencies. The work emphasizes the link that affective and cognitive processes have for learning. It also shows that every cognitive process has a social genesis, as well as an interrelation between learning and development from the study of historical personalities, being a possible solution to this problem, the preparation of teachers who direct teaching constitutes an essential condition. and education in values. Keywords: personality, histories of life, values |
La educación es un proceso de socialización y endoculturación de las personas a través del cual se desarrollan capacidades físicas e intelectuales, habilidades, destrezas, técnicas de estudio y formas de comportamiento. Esta no solo se produce mediante la palabra: está presente en todas las acciones, sentimientos y actitudes.
Con la educación las nuevas generaciones asimilan y aprenden los conocimientos, normas de conducta, modos de ser y formas de ver el mundo de generaciones anteriores, creando además otros nuevos.
La dimensión sociopolítica está muy identificada con la actuación profesional para la formación de sus estudiantes, implicados con su participación en las actividades de la Federación Estudiantil de la Enseñanza Media (FEEM), sindicales y políticas que contribuya a la formación de valores, identificándolos como jóvenes revolucionarios, con una cultura general integral que le permita estar actualizado en temas nacionales e internacionales, en el conocimiento y utilización de la Historia como un requerimiento para la formación de valores, ya que como expresara Martí (1991a) “(…) la Historia (…) tiene como verdadero objetivo el hacernos comprender el estado social del hombre y el de instruirnos acerca de todos los cambios que la naturaleza de las cosas puede aportar a la naturaleza de la sociedad” (p. 110)
La educación se comparte entre las personas por medio de ideas, cultura, conocimientos, respetando a los demás. Esta no siempre se da en el aula.
Existen tres tipos de educación: la formal, la no formal y la informal. La educación formal hace referencia a los ámbitos de las escuelas, es la educación escolarizada, mientras que la no formal se refiere a los cursos, academias y la educación informal es aquella que abarca la formal y no formal, pues es la educación que se adquiere a lo largo de la vida.
Ideas que en esencia se mantienen en las adaptaciones curriculares emitidas en el año 2020 en las que se precisa el logro del desarrollo y la formación integral de la personalidad del educando con una base cultural en correspondencia con los ideales patrióticos, cívicos y humanistas de la sociedad socialista cubana en su desarrollo próspero y sostenible.
Ideales expresados, además, en las formas de sentir, pensar y actuar, de acuerdo con sus particularidades e intereses individuales, en correlación con las necesidades sociales, que les permita asumir una concepción científica del mundo y prepararse para la vida.
El filósofo francés René Descartes (1981), escribiría: “Pienso y dudo, luego existo”. Es el pensamiento lo que hace al ser humano superior a los animales. El pensamiento puede llegar a ser tan poderoso hasta el punto de afectar al cuerpo.
La vida de un hombre es el resultado de las decisiones que toma como ser pensante, pensamiento que es influenciado, en mayor o menor medida, por la familia, la escuela y la sociedad, ya que, para conocer a una persona, es necesario conocer su contexto histórico, pero ¿qué sucede cuando el individuo yace bajo la influencia de figuras negativas y no positivas, en tiempos tan difíciles, que tienden a confundir?
La contemporaneidad es una época que se caracteriza por los grandes contrastes. Entre el asombroso e ininterrumpido desarrollo de la ciencia y la técnica frente a la ignorancia de los analfabetos totales y funcionales que aún hay en el mundo. Entre la riqueza que han acumulado unos pocos y la extrema pobreza de la mayoría de la población mundial, entre las guerras por la hegemonía del planeta y las luchas por la paz, y la existencia de un mundo más justo. Son tiempos en los que se presenta en su mayor expresión la globalización.
Aparece la globalización neoliberal y frente a ella la globalización de la solidaridad. Se anuncia la sociedad del conocimiento. Se difunde por el mundo una filosofía decadente que pretende el fin de la historia, la duda hacia el progreso, la incertidumbre, la desideologización, y también una creciente certidumbre en la necesidad de proteger el medio ambiente, de formar valores, de mejorar la vida y la educación, de trabajar por el mejoramiento humano, como es el caso de Cuba, donde hay una Revolución en la que se trabaja arduamente por la formación de un hombre nuevo, alejado de las mezquindades y el egoísmo.
He ahí la necesidad social de que los individuos, específicamente los adolescentes y jóvenes que están en formación, sean influenciados por figuras positivas, las grandes personalidades históricas, que son consideradas grandes por haber marcado la diferencia haciendo el bien y no como otras que han traído consecuencias nefastas para la humanidad.
Al hablar de personalidad es necesario conocer las definiciones de los conceptos de personalidad y personalidad histórica.
Partiendo entonces de la definición de personalidad, se debe trabajar la definición de personalidad histórica, teniendo en cuenta la definición de personalidad histórica dada por Lenin (1958a): “Los méritos históricos de las personalidades históricas no se juzgan por lo que no hayan hecho en relación con las exigencias de la actualidad sino por lo que dieron de nuevo en relación con sus antecesores” (p. 554).
Acerca de la personalidad histórica, la pedagoga, Rita Marina Álvarez de Zayas plantea: “Es precisamente la actividad desplegada lo que permite distinguir entre un hombre común y una personalidad destacada” (p. 98).
También se debe tener en cuenta la definición de personalidad desde el punto de vista de la psicología, específicamente la del psicólogo González 1995) que expresa;
La personalidad es la organización sistémica, viva y relativamente estable de las distintas formaciones psicológicas, sistema de estas e integraciones funcionales de su contenido, que participan activamente en las funciones reguladoras del comportamiento, siendo el sujeto quien ejerce estas funciones. (p. 19)
El materialismo histórico, al abordar el papel de las personalidades en la historia, se nutrió de los trabajos de los historiadores franceses de la época de la Restauración, quienes comenzaron a tener en cuenta la acción de las masas en las transformaciones sociales. Carlos Marx y Federico Engels, al descubrir que la fuerza determinante del desarrollo social es el modo de producción de bienes materiales, permitió esclarecer el papel de las masas populares en la historia y en el desarrollo de la sociedad.
Plejanov, en su trabajo “El papel del individuo en la historia”, expresó que el individuo podía ser una gran fuerza social; y en varios escritos V. I. Lenin profundiza sobre el tema, “Hace ya mucho tiempo que la historia puso de relieve que los grandes hombres se destacan en el curso de la lucha de las grandes revoluciones, surgiendo talentos cuyo desarrollo se consideraba imposible” (1958b, p. 172)
En los propios textos de materialismo histórico se reconoce la importancia de las grandes personalidades en el desarrollo de la sociedad, cuando tales individuos interpretan las necesidades y tendencias del desarrollo social y se vinculan a las fuerzas sociales más progresistas, aceleran esos procesos y facilitan a las masas populares la solución de los problemas históricos. Castro (2003) es categórico cuando afirma: “Nadie crea que los individuos hacen la historia. Los factores subjetivos influyen, aceleran con sus aciertos o retrasan con sus insuficiencias y errores los procesos históricos, pero no determinan el resultado final” (p. 17)
Para el estudio de las personalidades históricas en Historia de Cuba este trabajo asume la siguiente guía temática, inspirada en la elaborada por el Dr. C. Rolando Buenavilla Recio (2012)
Guía Temática:
Elementos de los que se dispone para el estudio de una personalidad histórica:
Los valores existen en la realidad social y han de convertirse en formaciones internas del sujeto, a las que se llega por un proceso que se desarrolla en un sistema dado, por lo tanto, la formación y apropiación de los valores es un proceso esencialmente ideológico, en indisoluble correspondencia con las exigencias del sistema social.
Por su parte, García (2003) en su artículo “¿Por qué la formación de valores es también un problema pedagógico?”, expresa que:
Los valores constituyen una guía general de conducta, que se derivan de la experiencia y le dan un sentido a la vida, propicia su calidad, de tal manera que están en relación con la realización de la persona y fomentan el bien de la comunidad y la sociedad en su conjunto. (p. 199)
Se evidencia una contradicción entre la realidad donde se ve la casi total ausencia de una formación de valores desde personalidades históricas cubanas y el deseo de desarrollar una formación de valores desde la personalidad revolucionaria de Rubén Martínez Villena en la historia y la literatura cubana.
Esta situación es la que permite plantearse desde las ciencias: ¿Cómo contribuir a la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico de Mecánica Industrial “Amistad Cubano-Soviética?
La personalidad de Rubén y el trabajo para la formación de valores en los educandos han sido tratada por diversos autores como Ana Núñez Machín con el libro Rubén Martínez Villena en 1970; a Josefina Mesa Paz, cuando aborda a Rubén en su antología del pensamiento político en 1976; a Raúl Roa con el análisis de La Pupila Insomne a través de un bosquejo biográfico en 1982; a Nancy Chacón Arteaga, con la dimensión ética de la educación cubana en 2002; a Jennifer Delgado Suárez, con el tema ¿A qué nos referimos cuando hablamos de valores?: una aproximación desde la personalidad en el 2006 y a Lissette Mendoza Portales con las Prácticas cubanas para educar en valores y la convivencia ciudadana, en el 2009, constituyéndose todas, en su justificación científica.
En los procesos formativos de los más diversos niveles educativos, las humanidades desempeñan un importante papel en la formación de valores de la identidad de los estudiantes, valores que se forman en las clases de dichas disciplinas, que Rubén representa en la historia por ser el líder de la revolución de los años treinta y en la literatura por su poesía, que evoluciona a la par de su labor como revolucionario y son las humanidades y su didáctica quienes dan vida a esta maestría.
El problema social que investiga este trabajo es la necesidad del estudio de las personalidades históricas para la educación en valores de los estudiantes. El cual es un problema social de la ciencia y la tecnología, que se aspira a resolver con la investigación de las personalidades.
El estudio de las personalidades históricas y la influencia que su ejemplo y decisiones pueda ejercer sobre los jóvenes, es la vía más segura para educar en valores y lograr que sean hombres de bien, con un pensamiento propio, sobre todo en el nivel educativo de la Enseñanza Técnica y Profesional.
El artículo tiene como objetivo fundamentar desde los referentes que brindan la ciencia y la tecnología, el estudio de las personalidades históricas para la educación en valores como base de una propuesta interventiva.
Esta investigación es cualitativa, ya que caracteriza el fenómeno de forma general, lo analiza e interpreta, para buscar una solución efectiva a la problemática planteada. El sistema educativo cubano trabaja en función de la formación de valores en los educandos, sin embargo, en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico Amistad Cuba-Soviética se detecta que, existe un insuficiente trabajo en la formación de valores a través del ejemplo de personalidades históricas en los estudiantes, siendo una de estas personalidades la de Rubén Martínez Villena, la que ha sido elegida para este trabajo.
Para la solución del problema científico se formuló el siguiente objetivo de la investigación: elaborar un sistema de actividades para la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico de Mecánica Industrial “Amistad Cubano-Soviética.
Con el propósito de alcanzar el objetivo propuesto se formularon preguntas científicas y sus correspondientes tareas de investigación, orientadas en un primer momento a los referentes teóricos y metodológicos que sustentan la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena. Sus resultados posibilitaron caracterizar el estado actual de los valores de Rubén Martínez Villena en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico de Mecánica Industrial “Amistad Cubano-Soviética. En ese sentido se promovió el acercamiento necesario a los requisitos a tener en cuenta para contribuir a la solución de la problemática y el contexto específico con sus particularidades, así como valorar los posibles resultados que se obtendría al aplicar el sistema de actividades en la práctica
La investigación asume el enfoque dialéctico materialista como método general de la ciencia que permite analizar objetos y fenómenos de la realidad objetiva en toda su complejidad, relaciones y transformaciones, revela sus elementos contradictorios y permite resolver la contradicción. Se asumen en consecuencia, métodos de nivel teórico, empírico y estadísticos en su interrelación.
Dentro de los métodos teóricos se emplearon; el Histórico-lógico: en la revisión de fuentes para el marco teórico, en el diseño de las actividades que sigue un orden cronológico y un modo histórico de razonar a partir de las manifestaciones esenciales de cada época. El Analítico-sintético: que se aplicó al resumir y analizar, en el proceso investigativo, los criterios más acertados que fundamentaron teórica y metodológicamente el estudio. Es imprescindible en el procesamiento de la información a partir de fuentes diversas, en el diagnóstico y análisis de los resultados, así como en la concepción de las actividades propuestas y el arribo a conclusiones. El Inductivo-deductivo: Este método permitió inferir, a partir de los análisis de diferentes autores, la confirmación de los criterios teóricos acerca de la validez del estudio, así como deducir nuevas conclusiones, partiendo del análisis biográfico y de los resultados de la aplicación de los instrumentos.
Como parte de los métodos empíricos utilizados: El análisis documental: para analizar y determinar el tratamiento dado a los presupuestos teóricos que sustentan la formación de valores, el pensamiento, la labor y las obras de Rubén Martínez Villena, en documentos relacionados con el proceso de enseñanza-aprendizaje de la Historia de Cuba, las Resoluciones Ministeriales del MINED, los programas, las orientaciones metodológicas, además en libros de texto, los Cuadernos Martianos, Seminarios Nacionales a dirigentes, metodólogos e inspectores.
La observación directa, abierta, no participante y externa: permitió determinar el problema existente y para apreciar los modos de comportarse los estudiantes ante el empleo de las actividades propuestas. La entrevistade forma individual y estandarizada para conocer en los docentes sus opiniones y nivel de conocimientos sobre el tema objeto de la investigación. La encuesta de forma directa y estandarizada: Se realizó con cinco preguntas a estudiantes de primer año del Centro Politécnico “Amistad Cuba-Soviética” del municipio Playa. Abordó la destacada participación de Rubén Martínez Villena en la Protesta de los Trece, hecho que fuera su bautizo político.
Para procesar los datos cuantitativos obtenidos se empleó el método estadístico con visión descriptiva, con el apoyo del cálculo porcentual.
La población en esta investigación coincidió con la muestra, siendo la totalidad de los estudiantes de primer año del Centro Politécnico “Amistad Cuba-Soviética” (28). La misma es intencional y parte del criterio de que son los grupos docentes de la autora.
Desde la sistematización de los estudios se comprenden y extraen ideas esenciales:
Los valores sociales reflejan los procesos en los cuales se han educado y formado de ahí que refieren un pasado, un presente y un futuro.
En la dirección de su asimilación por parte de los estudiantes, los educadores deben tener presente que mueven e interesan a las personas, forman y, sobre todo, requieren de ellas, demandas, y también respuestas diferentes. En los vinculados con la patria, el patriotismo, se debe mostrar que no todo está hecho, sin dejar de reconocer todo lo anterior, pero sí tener conciencia que las circunstancias actuales exigen de la joven generación lo extraordinario, cotidianamente, como vía de garantizar lo que hicieron nuestros antecesores.
Formar patriotas, es una condición indispensable para salvaguardar y mantener la nacionalidad, pero es imposible hacerlo cuando los conocimientos les resultan lejanos, fríos y abstractos. Se requiere aproximar y humanizar cada figura y hecho histórico a la cotidianidad del estudiante, para ello es fundamental que amen y se sientan identificados con el medio que les rodea, para que más adelante puedan extender esos sentimientos a los valores históricos de un carácter más abarcador y general.
El educar en valores requiere además penetrar en el mundo interior del sujeto que se educa, trabajar y desarrollar sentimientos de identidad y pertenencia con el medio que les rodeas, aprender a defender lo que es suyo y les pertenece.
Educar en valores desde las figuras históricas implica reconocerles como personalidades que se destacan, se distinguen, en determinada actividad: por ese rasgo alcanzan autoridad y representación en un determinado contexto, usualmente sirve de ejemplo o modelo cuando se hace referencia a esa actividad. De estas figuras se estudia su vida y obra, es decir, se estudia la estrecha relación entre la existencia de una persona y su producción en cualquier campo del entendimiento humano.
El concepto obra no ha de limitarse a la producción: creación en ciencias, letras o artes, sino también a realizaciones de carácter social, político, cultural, que tengan relevancia.
En la actualidad se abren paso nuevas formas de hacer historia, y esta intenta hacer la historia de los individuos que han sobresalido dentro de un sector o un grupo por presentar un conjunto de características comunes, forma de vida similar y situación social que lo hacen de algún modo representativo de ese mundo.
En este enfoque se pretende ver a la personalidad como ejemplo, a través de él, presentar, entre otras cosas, el contexto histórico en el que se desenvuelve, recreando las circunstancias sociales que han determinado su vida. Esta historia no está reducida solo a las figuras ilustres, los destacados políticos o los patriotas, el orden de prioridad lo tiene ahora el hombre común, el hombre de pueblo, con el objetivo de descubrir rasgos, características económicas, políticas y sociales de la mentalidad de una época.
La historia describe un contexto histórico específico que define a una personalidad. El conocimiento del contexto histórico es un paso metodológico esencial en cualquier estudio sobre figuras históricas.
La utilización del término contexto está referido a la relación espacio tiempo. No se trata de una nueva denominación para un viejo fenómeno sino de la necesidad de expresar con una visión más abarcadora la relación entre esas dos categorías.
Es necesario ubicarse primero en el contexto nacional o local, en un periodo que abarca los años en que vivió la personalidad, conocer los acontecimientos económicos, políticos y sociales más importantes y luego penetrar en el campo de las ideas filosóficas, pedagógicas, psicológicas, prevalecientes en el país, en ese momento, y en la época.
De la aplicación de los instrumentos se obtuvieron en lo cuantitativo los siguientes resultados:
Entrevista al profesorado de Humanidades sobre el conocimiento acerca de la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico de Mecánica Industrial “Amistad Cubano-Soviética consideró aspectos como: la experiencia en la docencia, las vías por las que realizan la preparación de las clases que imparten al abordar la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena, el dominio de los conocimientos necesarios de la asignatura Historia con relación al tratamiento a la personalidad, los valores y sus componentes, significado, apreciación del tratamiento desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en las clases de Historia de Cuba y del nivel de asimilación de estos por parte de los estudiantes en su centro, ejemplos de su práctica y el impacto en los estudiantes. .
Encuesta al estudiantado sobre el conocimiento acerca de la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico de Mecánica Industrial “Amistad Cubano-Soviética
Encuesta 1
Análisis de los resultados:
28 alumnos de primer año de mecánica industrial del Instituto Politécnico Amistad Cubano-Soviética.
Preguntas |
Respuestas |
No saben |
% B |
% R |
% M |
% No saben |
||
B |
R |
M |
||||||
1 |
0 |
8 |
5 |
15 |
0 |
28,5 |
17,8 |
53.5 |
2 |
9 |
1 |
2 |
16 |
32,1 |
3,5 |
7.1 |
57,1 |
3 |
1 |
3 |
2 |
22 |
3,5 |
10,7 |
7.1 |
78,5 |
4 |
23 |
0 |
0 |
5 |
82,1 |
0 |
0 |
17,8 |
5 |
2 |
0 |
3 |
23 |
7.1 |
0 |
10,7 |
82,1 |
Promedio |
7 |
2,4 |
2,4 |
16,2 |
24,9 |
8,54 |
8,54 |
57,8 |
% M + % no saben = 66,34
Nota: El 66,34 % de los alumnos contestan mal o desconocen totalmente la personalidad de Rubén.
Encuesta al estudiantado sobre el conocimiento acerca de la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en los estudiantes de primer año del Centro Politécnico de Mecánica Industrial “Amistad Cubano-Soviética
Encuesta 2
Análisis de los resultados:
28 alumnos de primer año de mecánica industrial del Instituto Politécnico Amistad Cubano-Soviética.
Preguntas |
Respuestas |
No saben |
% B |
% R |
% M |
% No saben |
||
B |
R |
M |
||||||
1 |
20 |
6 |
0 |
2 |
71,4 |
21,4 |
0 |
7,1 |
2 |
15 |
0 |
1 |
12 |
53,5 |
0 |
3,5 |
42,8 |
3 |
9 |
1 |
6 |
12 |
32,1 |
3,5 |
21,4 |
42,8 |
4 |
15 |
0 |
1 |
12 |
53,5 |
0 |
3,5 |
42,8 |
5 |
10 |
1 |
1 |
16 |
35,7 |
3,5 |
3,5 |
57,1 |
Promedio |
13,8 |
1,6 |
1,8 |
10,8 |
49,24 |
5,68 |
6,38 |
38,5 |
% M + % no saben = 44,8
Nota: El 44,8 % de los alumnos contestan mal o tienen desconocimiento sobre la personalidad de Rubén.
Los resultados de la encuesta mostraron que un 33,66% de los estudiantes poseía algún conocimiento sobre Villena y su labor revolucionaria, pero el 66,34% de los estudiantes tenía un desconocimiento total. Asimismo, se reconoce que los profesores no aprovechan suficientemente los recursos a su alcance desde el tratamiento a las personalidades históricas. De igual modo destacaron que constituye un problema social a resolver con el concurso de las ciencias.
Tales resultados coinciden con estudios revientes que señalan al profesor como agente gestor y núcleo que irradia a su entorno. Entonces se trata de que el profesional que las imparte, independientemente de su formación, sea un activista que trasmita valores propios de la sociedad que se diseña y trabaje en correspondencia con las exigencias sociales y de los requerimientos actuales de la enseñanza técnica-profesional.
En ese sentido, se orientan los estudios de la Dr. Cs. Chacón, N., la cátedra y el proyecto de investigación que dirige. Centran su atención en la formación ciudadana en las carreras pedagógicas, sus retos y experiencias desde la sociedad cubana (2022) y la Educación moral, en valores y ciudadana desde los aportes de Martí y Fidel (2022). Chacón, N. et.al (2019) al revelar la necesidad de una concepción de la educación para la vida ciudadana en la formación docente, bases que sustentan los estudios acerca del tema en pre y posgrado, a la vez que orientan este particular en todos los niveles educativos, de los que la enseñanza técnica-profesional.
En ese accionar, desde los fundamentos que asume el estudio, toda propuesta que se conciba ha de coincidir, sin lugar a dudas con la posición de Martínez (2021) al considerar que la formación del ciudadano constituye un desafío histórico de la educación. Es así que se revela la Ley del Condicionamiento Social a la Educación, en una de sus directrices esenciales a la asignar las demandas formativas a ese sector de profesionales comprometidos con un hombre nuevo que se ha de insertar de manera coherente en la sociedad que exige un comportamiento ciudadano con identidad propia y colectiva.
Proyección, igualmente coherente con las apreciaciones del Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI en París, redactado por Delors et al (1996), La Educación encierra un tesoro, que revela las bases esenciales de los aprendizajes para la vida: a ser, hacer, aprender y convivir, con un emprender implícito. Criterios que se refuerzan en la perspectiva más actualizada de ese organismo internacional acerca de los aprendizajes de los estudiantes de América Latina y el Caribe desde los estudios regionales comparativos y explicativos (UNESCO, 2020) y el papel de los docentes en esos aprendizajes transformadores (UNESCO, 2022), perdurables y permanentes que promueve la Agenda 2030.
En ello las raíces históricas se ponderan como parte de esa formación integral.
Se concuerda en que, si bien la formación docente en Cuba se enfoca hacia habilidades profesionales pedagógicas en los modelos de los profesionales de la educación, es innegable que hoy se habla de un enfoque de competencias profesionales en el nivel medio superior, para nada ajeno a la integralidad en torno a los valores y a las bases históricas (Rodríguez y Díaz, 2020).
Rossato et al., (2020), por su parte, destacan el rol protagónico de los estudiantes en esos aprendizajes revelando las mediaciones que dan entre los sujetos en la realidad cubana, al tiempo que se coincide con las inferencias reflexivas de Torres et al (2020), acerca de la práctica docente y sus retos, que se complejizan con la llamada generación Cero o X.
En ello se ha de poner de manifiesto que el estudio de las personalidades históricas no solo es necesario para la evolución del pensamiento sino también para la formación de valores. Del desarrollo del pensamiento de un individuo, depende mucho los valores que se formen en este.
Hoy en día la sociedad a nivel mundial se encuentra afectada por la pérdida de valores, y su causa principalmente por el deseo de obtener siempre lo que se quiere, los conflictos sociales, esos últimos son también una consecuencia y la diferenciación de las personas hacia otros individuos. Cuba no está exenta a esta pérdida de valores. Los valores son los principios que guían al hombre en su conducta, sentimientos y sentido de lo correcto, influye en las decisiones a tomar, y aunque no deciden por si permiten elegir qué es lo mejor a la hora de hacer, por muy arriesgado que sea.
Algunos jóvenes ante las dificultades económicas escogen otros caminos que consideran muchos más fáciles, pero que son equivocados. Es entonces donde la labor de la familia y el profesor es imprescindible para evitar esto, a veces se logra, tristemente, no siempre, pues hay familias indiferentes, profesores que se limitan a instruir y lo peor alumnos que no quieren ser ayudados. Es de vital importancia la comunicación para impedir que el factor económico menoscabe a los valores.
La enseñanza de la Historia es un elemento de consolidación y rectificación de la gama de valores que contribuyen a formar al ser humano portador de los rasgos de la sociedad que construimos y es el profesor el que asume la responsabilidad de lograrlo como un activo comunicador y promotor de ello en la escuela, es entonces necesario además del dominio del sistema de conocimientos históricos de la ciencia, el empleo de su enfoque clasista que le permita aplicar las leyes, regularidades y categorías filosóficas convincentemente, al diseñar didácticamente esos conocimientos sin perder de vista las necesidades de los adolescentes con los cuales trabaja.
En ese sentido, se reafirma que: El conocimiento de la historia es arma al servicio de la cultura, al servicio de enseñar a pensar y a defender ideas, procesos imprescindibles en la preparación de las nuevas generaciones. Solo la cultura nos permitirá la comprensión de los complejos problemas y grandes retos del mundo actual.
Para asumir esos retos con una actitud transformadora se necesita conocimientos, tanto los históricos como los de las diversas disciplinas que se estudian en la escuela. Por eso, el maestro, que es un forjador de los que encararán ese futuro, tiene que ser un incansable estudioso.
Tales apreciaciones refuerzan la significación de este estudio que consiste en la elaboración de un sistema de actividades para el tratamiento de la formación de valores desde la personalidad de Rubén Martínez Villena en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las humanidades, tema de actualidad porque aporta a la formación de valores en las escuelas cubanas desde las disciplinas humanísticas, tiene en cuenta la actualización y profundización del contenido, así como los objetivos priorizados de la superación que responden a lo establecido en el Lineamiento 117 de la política económica y social del Partido y la Revolución. Documento del 8vo Congreso del PCC.
Se ha dicho que la personalidad de Rubén Martínez Villena ha sido tratada por distintos autores al igual que la formación de valores, pero, el diseño de un sistema de actividades para la formación de valores de la personalidad de Rubén Martínez Villena, en los estudiantes del Centro Politécnico “Amistad Cuba-Soviética”, desde el proceso de enseñanza-aprendizaje de las humanidades, se propone por primera vez, constituyendo esto una novedad científica.
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