Influencia de la Enfermería Basada en la Evidencia en estudiantes

It influences of the Based Infirmary in the Evidence in students

MSc. Zuzca García Véliz. Máster en Ciencias de Enfermería. Profesora Asistente de la Facultad de Ciencias Médicas 10 de octubre del  Departamento Docente Metodológico, La Habana, Cuba. 
Correo: zuzca@infomed.sld.cu
ORCID: http://orcid.org/0000-0003-2525-8609

MSc. Susel Rivero Villamarzo. Máster en Medicina Bioenergética. Profesora Asistente de la Facultad de Ciencias Médicas 10 de octubre del Departamento Enfermería, La Habana, Cuba. 
Correo: suselrv@infomed.sld.cu
ORCID: http://orcid.org/0009-0001-1913-4151 

MSc. Deynis de los Ángeles Regueiro Suárez. Máster en Atención Integral a la Mujer, Especialista en Enfermería Comunitaria. Profesora Auxiliar de la Facultad de Ciencias Médicas 10 de octubre, La Habana, Cuba.
Correo: angelesrs@infomed.sld.cu
ORCID: http://orcid.org/0000-0002-2264-7636

Recibido: 21 de noviembre de 2024              Aprobado: 24 de enero de 2025


Resumen

Los estudiantes que aplican la Enfermería Basada en la Evidencia están más incentivados  a investigar   y  resolver problemas prácticos, asociados al cuidado de enfermería. El objetivo, de este artículo, es destacar la importancia de la Enfermería Basada en la Evidencia y su influencia en los estudiantes. Se realizó una revisión bibliográfica acerca del tema de investigación. Se utilizó el método histórico – lógico, análisis documental, que incluyó artículos originales y de revisión. Se establece que la formación profesional, a través de la Enfermería Basada en la Evidencia, motiva el análisis de la lectura científica, el manejo de la información en la búsqueda de contenido adecuado y el trabajo en equipo. Permite obtener mejor preparación académica que permita a los egresados prestar el mejor cuidado hacia el paciente en el actuar profesional.

Palabras claves: Enfermería Basada en la Evidencia, estudiantes, cuidado

Abstract

Students applying Evidence-Based Nursing are more likely to investigate and solve practical problems associated with nursing care. The objective of this article is to highlight the importance of the Based Infirmary in the Evidence and its influence in the students. He/she was carried out a bibliographical revision about the investigation topic. The historical method was used - logical, documental analysis that included original articles and of revision. It is established that vocational training, through evidence-based nursing, motivates the analysis of scientific reading, the management of information in the search for appropriate content and teamwork. It allows to obtain better academic preparation that enables the graduates to give the best care towards the patient in the professional acting.

Keywords: Based infirmary in the Evidence, students, care


Introducción

La Enfermería Basada en la Evidencia (EBE) se ha incorporado con fuerza en las ciencias de enfermería, su aplicación se basa en la necesidad de dar un cuidado más seguro y de calidad, que se hace necesario en esta sociedad del conocimiento, donde se deben poseer competencias, organización, interpretación, evaluación crítica, validación de información, aplicación de la evidencia en la práctica, evaluación de la efectividad, eficiencia en la toma de decisiones, así como aptitudes para la propia gestión del cuidado y aprendizaje continuo (Caballero y Hernández, 2012).

Según Sackett et al, (1996) define la EBE, como la búsqueda sistemática de una respuesta basada en la investigación, útil y pertinente para la práctica. Considera un enfoque reflexivo e interpretativo que es el que permite hacer uso de los hallazgos de la investigación en la realidad particular de la enfermería (Gálvez et al, 2003).

La enfermería no puede dedicarse a la técnica exclusivamente, se debe obtener respuestas a través de la investigación y poner en práctica todo el conocimiento adquirido. Es necesario transmitir el precepto y la razón de su uso a las nuevas generaciones para lograr un cuidado de excelencia que es el objetivo principal de la profesión.

Uno de los propósitos en la formación de los estudiantes de enfermería en el pregrado es instituir y desarrollar prácticas generadoras de cuidado a las personas o comunidades en el contexto de salud o enfermedad. La EBE apunta a lograr que desarrollen precisamente las competencias necesarias para que como profesionales amplíen prácticas de cuidado integral de mayor calidad, y  conozcan los principios y métodos básicos de la investigación. El enfoque no debe ser para generar un nuevo conocimiento, sino para dar respuestas a interrogantes clínicas que les permita identificar y evaluar las mejores prácticas del cuidado (Morán, 2011).

Por lo anterior, el objetivo, del artículo, es destacar la importancia de la Enfermería Basada en la Evidencia y su influencia en preparación académica de los estudiantes.

Desarrollo

La EBE es un movimiento que tiene su origen en la Medicina Basada en la Evidencia, la utilización consciente, explícita y juiciosa de la mejor evidencia clínica disponible para tomar decisiones sobre el cuidado de cada paciente; son cuatro sus bases conceptuales: la investigación, la experiencia del profesional, la preferencia y valores de los pacientes y los recursos disponibles (Gálvez et al, 2003); (Caballero y Hernández, 2012).

Las autoras coinciden con  Sackett; et al (1996) en cuanto a su definición de la enfermería basada en la evidencia; la mejor manera de practicar cuidados de enfermería es la respuesta de los resultados de cada paciente en cada uno de los cuidados brindados, esto parte fundamentalmente de la experiencia y de la actitud del paciente para recuperar su salud.

Lo que prima en la actualidad es un abordaje conceptual que pone énfasis en la incorporación de la investigación, en la atención a la salud, de ahí que se hable de una Enfermería Basada en la Evidencia (Caballero y Hernández, 2012).

Según Gálvez, et al (2003); Caballero, E y Hernández, A (2012) la EBE está constituida por 5 etapas:

1. Formulación de preguntas clínicas: esta pregunta surge en el día a día del profesional y tiene una naturaleza práctica. Pone en duda lo que se hace y cómo se hace.

2. Localización de la información: mediante un procedimiento sistemático y estructurado de búsqueda de información científica, se trata de localizar las mejores recomendaciones basadas en la investigación para dar respuesta a la pregunta clínica.

3. Contextualización: lectura crítica. Es importante no aceptar como válido todo lo que se lee porque no siempre es así. Mediante la lectura crítica se consigue seleccionar la información válida. Se trata de un proceso en el que se evalúa el diseño y la metodología de un estudio, la calidad de los datos y se analizan e interpretan los resultados. Para ello disponemos de instrumentos, las guías de lectura crítica, que facilitan esta tarea. Además, la lectura crítica permite hacer un análisis del contexto en el que se pretenden implementar las evidencias localizadas en la fase anterior.

4. Implementación: una vez que se dispone de la información necesaria que responda a la interrogante clínica, es el momento de llevar a cabo esa nueva intervención o cambio de procedimiento.

5. Evaluación: paralelamente a la fase anterior, trataremos de comprobar si ese cambio que hemos introducido en la práctica es efectivo y proporciona mejores resultados que la intervención que realizábamos previamente (Gálvez et al, 2003); (Caballero y Hernández, 2012).

El objetivo de la EBE es disminuir el nivel de incertidumbre que pacientes y profesionales experimentan en los sistemas de salud y con ello proveer cuidados de calidad. La literatura sustenta que los pacientes que reciben intervenciones provenientes de la mejor evidencia experimentan mejores resultados (Caballero y Hernández, 2012); (Barajan y Ochoa, 2020); (Rivera, Ceballos y Sáenz, 2023).

Para los estudiantes y profesionales, la EBE resulta ser una herramienta fundamental, pues permite una mejoría en la calidad de atención, basada en evidencias científicas fundamentadas en investigaciones precedentes y mejora la gestión del cuidado, se promueven cuidados oportunos y eficaces y disminuye las posibilidades de cometer errores o iatrogenias asociados a la práctica (Donoso, Gómez y Rodríguez, 2020); (Rivera, Ceballos y Sáenz, 2023).

Trabajar con pocas evidencias se transcribe en prestar cuidados erróneos, con falta de criterio y alta probabilidad de equivocación, es por ello que se debe incentivar la práctica de cuidado con evidencias que sustenten el trabajo, para evitar que estos sucesos ocurran, y sea el paciente quien sufra las consecuencias. La investigación es quien hace la diferencia entre hacer y saber y es por ello que se debe incentivar la práctica de enfermería con evidencias y demostrar su utilidad dentro de la profesión (Gálvez et al, 2003); (Rodríguez, Barceló, Cruces, Blanco y Pérez, 2019).

La formación profesional a través de la EBE, motiva a la evaluación permanente con la lectura, el manejo de la información en la búsqueda de bases de datos y el trabajo en equipo; para tener mayor preparación teórica y científica que permita a las nuevas generaciones enfrentarse con una mejor preparación académica (Barajan y Ochoa, 2020); (Rivera, Ceballos y Sáenz, 2023).

Para trabajar con evidencias científicas se debe incentivar la investigación en estudiantes de enfermería en la práctica, con la finalidad de estimular la resolución de problemas asociados al cuidado de enfermería, de tal manera que los futuros profesionales sean capaces de prestar el mejor cuidado profesional hacia el paciente, en los distintos niveles de atención del país.

Se sugiere, a estudiantes y profesionales, realizar una revisión sistemática de investigaciones realizadas que se han llevado a la práctica; como por ejemplo: cuidador familiar del anciano al final de la vida como sujeto del cuidado de enfermería de los autores (Oria et al, 2019, p.1) quienes concluyen; que la visión de la EBE en su estudio, revela el desarrollo histórico de esta categoría.

La formación en enfermería y el conocimiento se adquiere principalmente de libros de texto, conferencias, práctica en los servicios, abordándose la investigación, como un conjunto de cursos (enfoque fragmentario) y no como una capacidad transversal (enfoque competencial)(Vera, 2022).

Los autores Cannon y Boswell, (2012) introducen la formación de enfermería basada en la evidencia como un sistema general y dinámico, que proporciona principios educativos válidos, con evidencia para apoyar, mantener y promover un nuevo nivel de conocimiento al estudiante de enfermería en diferentes entornos. Por tanto, es indiscutible que si el estudiante aplica la EBE, en su formación de manera adecuada, una vez egresado podrá mejorar la calidad de los servicios de enfermería en cualquier nivel de atención. Las Facultades de Ciencias Médicas y de enfermería deberían incluir, aún más, estrategias de enseñanza-aprendizaje que fomenten la EBE, ya sea en la forma de artículos de investigación, revisiones sistemáticas, monografías o trabajos de diploma (Vera, 2022).

La EBE puede incidir para estimular en los estudiantes la investigación y a mostrar soluciones para el conocimiento disciplinar y la práctica, lo que sería provechoso para mejorar la autonomía del futuro profesional la cual se encuentra en un nivel bajo precisamente porque los enfermeros se ven más como usuarios del conocimiento que como productores del mismo. Esa perspectiva incidirá favorablemente para que la gestión del cuidado transite, a través del conocimiento científico, del saber hacer al conocer de ese hacer (García, Ruíz, Bayle y Sánchez, 2024); (Fernández et al, 2021).

El objetivo de cada investigación que se realiza es proporcionar una porción contributaria para explicar o describir científicamente los fenómenos en torno al cuidado de la salud, la evidencia del conjunto de los resultados posee el potencial para modificar los procedimientos técnicos de la práctica, las formas de prevención de enfermedades y riesgos, proponer técnicas innovadoras para determinado grupo de pacientes con una enfermedad en particular entre otros (Donoso, Gómez y Rodríguez, 2020); (Oria et al, 2019).

Los profesores de las carreras de enfermería así como los tutores, son pieza clave para generar una cultura que apoye la EBE, y para ayudar al estudiante desde el pregrado a reconocer que como profesionales, utilizarán los hallazgos basados en evidencia para proveer y evaluar el cuidado de enfermería. Se  reconoce que la EBE requiere  de un estilo de organización y gestión de los servicios de salud que posibiliten que esta sea una realidad (Morán, 2011).

Las competencias de los estudiantes del pregrado, al utilizar la EBE, permitirán obtener mejores resultados en el paciente; reconocer los problemas que pueden surgir; conducir búsquedas avanzadas de literatura; analizar los componentes de artículos de investigación; evaluar la fuerza de los hallazgos; sintetizar la evidencia para determinar las mejores prácticas; generar un plan de implementación de cambio de prácticas; difundir información a través de presentaciones; apreciar como esa cooperación contribuye a la comunidad; y al desarrollo de habilidades (Morán, 2011).

Las competencias anteriormente señaladas adquieren relevancia en la medida que desarrollan pensamientos reflexivos en los estudiantes, que en lugar de adherirse a rutinas institucionales de atención son capaces de poner en juego habilidades cognitivas y cualidades para desarrollar un accionar reflexivo (Morán, 2011).

La utilización de la EBE mejora el conocimiento, las actitudes y habilidades de los estudiantes de enfermería. En la práctica, EBE significa la integración del conocimiento profesional con la mejor evidencia empírica disponible en la toma de decisiones sobre buenas prácticas para realizar algún procedimiento. La evidencia confirma que los resultados de pacientes mejoran significativamente cuando los cuidados de enfermería se realizan basados en la evidencia. La EBE ha demostrado incrementar la seguridad de los pacientes, mejorar las expectativas y aumentar la satisfacción de los que reciben el cuidado (Vera, 2022).

Conclusiones

La EBE responde a un cuidado más seguro y de calidad, a la búsqueda sistemática de una respuesta basada en la investigación que pone en práctica todo el conocimiento adquirido. Con la implementación EBE se consigue incentivar la investigación en los estudiantes hacia la búsqueda de un nuevo conocimiento, desarrollar pensamientos reflexivos,  mejorar la autonomía y proporcionar principios educativos válidos.   Para estimular la resolución de problemas en la práctica asociados al cuidado de enfermería, de tal manera que los futuros profesionales sean capaces de prestar el mejor cuidado profesional hacia el paciente, en los distintos escenarios donde desarrollen la profesión.

Referencias Bibliográficas

Barajan, A y Ochoa, F. (2020). Práctica Enfermera, Investigación y Compromiso Social. Ciencia Huasteca, Boletín Científico de la Escuela Superior de Huejutla, 8(15), 9-12

Caballero, E y Hernández, A. (2012). Cómo utilizar la enfermería basada en la evidencia. Enfermería Montev, 1 (2), 113-119

Cannon, Sh y Boswell, C. 2012). Evidence-Based Teaching in Nursing. Jones & Bartlett

Learning. CNA-Chile (2014). Criterios de Evaluación para la Acreditación de Carreras de Enfermería. Disponible en: https://www.cnachile.cl/Criterios%20de%20carreras/enfermeria.pdf

Donoso, R, Gómez, N y Rodríguez, A. (2020). El futuro de la Enfermería Basada en la Evidencia y su impacto en el cuidado del paciente. Revista Universidad y Sociedad, 12(5), 225

Fernández, S, Ramos, A.J, Leal, A, García, J, Hernández, S y Ruzafa, M. (2021). Competencia en la práctica basada en la evidencia y factores asociados en los enfermeros de atención primaria. Elsevier, 53(7)

Gálvez, A, Román, M, Ruiz, MJ, Hederle, C, Morales, JM, Gonzalo, E y Romero, MN. (2003). Enfermería Basada en Evidencias: aportaciones y propuestas. Index de Enfermería, 40-41: 47-50

García, M, Ruíz, I.A, Bayle, A y Sánchez, M. (2024). Implementación de Enfermería basada en evidencia en atención primaria. Enferm. Global, 23(73). Disponible en: http://dx.doi.org/10.6018/eglobal.579041

Morán, L. (2011). La práctica basada en evidencia, algunos desafíos para su integración en el curriculum del pregrado de enfermería. Enfermería Universitaria ENEO-UNAM, 8(4), 4-6

Oria, M, Elers, J y Aguirre, D.M. (2019). Cuidador Familiar de Anciano al final de la Vida como sujeto del Cuidado de Enfermería. Revista Cubana de Enfermería, 36(1), 1-17

Rivera, F, Ceballos, P y Sáenz, L. (2023). Enfermería basada en la evidencia un desafío pendiente. Index de Enfermería, Epub, 32(1). Disponible en: http://dx.doi.org/10.58807/indexenferm20233764

Rodríguez, M.A, Barceló, E, Cruces, M, Blanco, I y Pérez. M.A. (2019). Efectividad de un protocolo basado en la evidencia para el control de la hipoglicemia por estrés en cuidados intensivos. Enferm Intensivista, 30(1), 4-12

Sacket, DL, Rosenberg, WMC, Muir, JA, Haynes, RB y Richardson, WS. (1996). Evidence Based Medicine: What it is and what it isn´t. BMJ. 3(12), 71-72.

Vera, F. (2022). Enfermería basada en la evidencia en docente universitarios chilenos. Revista Electrónica Transformar, 3(5), 42-45

Declaración de conflicto de interés y conflictos éticos

Los autores declaramos que este manuscrito es original, no contiene elementos clasificados ni restringidos para su divulgación ni para la institución en la que se realizó y no han sido publicados con anterioridad, ni están siendo sometidos a la valoración de otra editorial.

Los autores somos responsables del contenido recogido en el artículo y en él no existen plagios, conflictos de interés ni éticos.

Contribuciones de los autores

Autor 1. MSc. Zuzca García Véliz: redacción del artículo, fundamentos teóricos, diseño de la metodología, revisión de la aplicación de la norma bibliográfica.

Autor 2. MSc. Susel Rivero Villamarzo: diseño del artículo, fundamentos teóricos metodológicos, revisión de todo el contenido.

Autor 3. MSc. Deynis de los Ángeles Regueiro Suárez: confección y aplicación de instrumentos, traducción de términos.