El pensamiento ético de José Martí. Su importancia en la educación ambiental de los futuros profesionales de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y Ciencias Naturales

José Martí ethical through. His importance for an atmosphere education of the Marxism-History and a Natural Science future teaching profession

Dr. C. Norma Luisa Pie McLean . Profesora Auxiliar. Facultad de Educación en Ciencias Sociales y Humanísticas de la Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”, La Habana, Cuba.
Correo: normaluisapm@ucpejv.edu.cu
ORCID:http://orcid.org/0000-0002-2734-3340

M. Sc. Lucas Rodríguez Miranda. . Profesor Asistente. Facultad de Educación en Ciencias Naturales y Exactas de la Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”, La Habana, Cuba.
Correo:lucasrm@ucpejv.edu.cu
ORCID:http://orcid.org/0000-0001-7902-8724


Recibido: octubre de 2021              Aprobado: marzo de 2022


Resumen

El estudio de la vida, obra y el pensamiento de José Martí en sus diferentes dimensiones y de manera particular su pensamiento ético constituye en los momentos actuales un importante referente teórico para la educación ambiental de los futuros profesionales de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y de las Ciencias Naturales durante la etapa de la formación de pregrado, porque estos jóvenes una vez insertados en los centros educativos, tendrán la responsabilidad mediante la dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje de educar a sus estudiantes en las mejores tradiciones, los sentimientos, los principios y los valores de la sociedad En este sentido el estudio del pensamiento ético martiano dirigido a emancipar a los hombres de América en la defensa de la soberanía y de la identidad nacional de sus pueblos, tiene mucha vigencia en las nuevas generaciones de educadores, puesto que sus ideas sirven de ejemplo para la educación que deben recibir estos sobre el cuidado, el respeto y la preservación del medio ambiente. De ahí que el objetivo del presente artículo es: Argumentar la importancia del pensamiento ético de José Martí, para la educación ambiental de los futuros profesionales de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y Ciencias Naturales

Palabras claves: Pensamiento ético de José Martí, educación ambiental, profesionales de la educación.

Abstract

José Martí life, work and through study in different dimension, particular way an ethical through constitute at present an important a theoretical reference for an atmosphere education of Marxism-History and a Natural Science speciality future teaching profession during initial formation because this young one time insert in educational centre they have the responsibility through the educative, apprenticeships process directions, educate student in better tradition, the feeling, the beginning and society values. A deeply felt José Martí an ethical through for emancipate America men in the defence of their sovereignty and national identity of the people have a lot of validity in a new teacher generation because his ideas contribute the example to receive about environment care, respect and preservation. The objective of the present article is: Argue the importance José Martí an ethical through to an atmosphere education of Marxism-History and a Natural Science speciality future teaching profession.

Keywords: José Martí ethical through, atmosphere education, teaching profession


Introducción

El mundo actual requiere con más fuerza que en períodos anteriores la formación de un profesional de la educación preparado para asumir en el futuro, los retos que deberá afrontar en la dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje con sus estudiantes, así como dar respuesta en el orden científico-técnico y socioeconómico a los nuevos desafíos, que se deriven a su vez de las demandas que en las diversas esferas de su actuación le plantea la sociedad.

En este sentido, en la sociedad cubana actual la formación profesional pedagógica en la etapa de pregrado se desarrolla justamente en un contexto internacional caracterizada por la existencia de la Globalización Neoliberal que como parte la permanencia de un sistema de dominación imperialista, lejos de favorecer el desarrollo armónico y favorable para todos los habitantes del planeta, continua siendo una amenaza para los pueblos que reclaman un futuro diferente, pues agudizan las contradicciones de los problemas contemporáneos.

En este sentido, la educación cubana actual, en particular, el trabajo de las universidades, debe estar caracterizada por la formación de futuros profesionales de la educación, con cualidades, que estén en correspondencia con las exigencias y las transformaciones que tienen lugar en la sociedad. Se trata en el caso particular de los profesores de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y de las Ciencias Naturales de una formación que se distingue por una sólida preparación política e ideológica basado en los principios de la ideología de la Revolución Cubana, donde tiene gran importancia el pensamiento ético de José Martí, como herramienta para dar respuesta a las necesidades de preparación de los adolescentes y jóvenes.

Para este propósito el conocimiento de la obra martiana constituye un componente educativo vital, pues en su quehacer intelectual, se evidencia una unidad dialéctica, de lo ético y lo humanista, manifestados en su anhelo de conquistar la justicia social e identificarse con la causa de las clases más pobres y oprimidas en armonía con la naturaleza, de ahí que sus ideas sean fundamentales para la formación científica, política-ideológica y ética de los estudiantes de estas especialidades, de acuerdo al modelo de profesional de la educación que aspira la sociedad cubana actual.

Desarrollo

Como parte de la formación integral que reciben los estudiantes de las diferentes carreras pedagógicas se encuentra la educación ambiental, en ella para una mejor comprensión de su papel educativo, es necesario primero tener en cuenta que en el contexto particular de Cuba, se considera al medio ambiente de manera integral, teniendo como centro de atención y protección, a su principal integrante, el hombre y en segundo lugar para realizar una mayor profundización de su estudio es importante hacer referencia al concepto de medio ambiente, que especialistas del tema han elaborado como por ejemplo el autor Víctor Sánchez, el cual lo califica como:

Todo aquello que rodea al ser humano y que comprende: elementos naturales, tanto físicos como biológicos; elementos artificiales (las tecno estructuras); elementos sociales, y las interacciones de todos estos elementos entre sí. La suma total de todas las condiciones externas, circunstancias o condiciones físicas y químicas que rodean a un organismo vivo o grupo de éstos, y que influyen en el desarrollo y actividades fisiológicas o psico- fisiológicas de los mismos. (Sánchez, 1989.p. 63).

Por otra parte en relación a la educación ambiental, esta tiene sus antecedentes en el ámbito internacional a través de cumbres y conferencias mundiales, efectuadas como consecuencia del desarrollo de una economía de mercado que concentra la riqueza en un número cada vez menor de personas, eterniza las crisis económica, agranda la distancia entre los países desarrollados y los subdesarrollados, influye en la proliferación de males sociales o llamados problemas globales como: la xenofobia, el racismo, los elevados índices de desempleo y la violencia, estimula la emigración del sur hacia el norte, así como la devastación de los recursos naturales.

Estas reuniones contribuyeron a la toma de conciencia desde la política de los Estados, de una cultura hacia el cuidado del medio ambiente, entre ellas se destacaron en la década del 70 del pasado siglo XX, cuando se hizo evidente y objetiva la agudización de las afectaciones ecológicas se inició la promoción de la educación ambiental, como un proceso integrador con nuevos enfoques, objetivos, métodos y contenidos, que difería del tradicional cuidado de la naturaleza, de sus plantas y animales:

En este sentido es importante destacar que desde el triunfo de la Revolución el primero de enero de 1959, el Gobierno Revolucionario, se propuso como uno de sus objetivos, el cuidado del medio ambiente, unido a la educación ambiental de la población cubana en general. Luego con el desarrollo de un Sistema Nacional de Educación en Cuba, se determinó la elaboración de programas, orientaciones metodológicas y libros de textos para todas las escuelas y los diferentes niveles de enseñanza, así como de las actividades docentes y extradocentes relacionadas con la educación ambiental, las cuales se han desarrollado de manera sistemática por varias generaciones de niños, adolescentes y jóvenes en los diferentes períodos de construcción de la sociedad socialista.

En la actualidad la importancia de la educación ambiental, sobre todo para los jóvenes que cursan la etapa de pregrado de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y de las áreas de las Ciencias Naturales radica en que esta contribuye a lograr que estos adquieran una conciencia ambiental que les permita comprender el riesgo que los modelos actuales de consumo de la sociedad capitalista implican para la preservación de la especie humana, mediante una actitud cotidiana de estos, promoviendo la preservación del medio ambiente en las escuelas las comunidades donde desarrollarán sus prácticas profesionales pedagógicas.

En este sentido es importante que desde su formación de pregrado estos estudiantes aprendan que las adecuadas actitudes de los educandos, que influyen en la preservación del equilibrio ecológico, depende de diversos factores y la manifestación de dichas actitudes no se materializa como un proceso lineal, a partir de los datos obtenidos de la observación de los fenómenos ambientales negativos de la práctica, sino también de la reflexión conjunta de maestros y estudiantes, en un corto período de tiempo.

Por ello la educación ambiental a desarrollar con los estudiantes de las especialidades de Marxismo-leninismo e Historia y de las Ciencias Naturales, deben tener en cuenta los requerimientos metodológicos para un adecuado desarrollo de la educación ambiental en los futuros profesionales de la educación, de estas especialidades, en función de lograr la transformación, en el comportamiento de las nuevas generaciones de adolescentes y jóvenes hacia el cuidado y respeto por el medio ambiente, tales como:

También en la etapa de formación de pregrado de estos estudiantes deben transmitirles que los profesores para el logro efectivo de la educación ambiental en el proceso de enseñanza-aprendizaje con los estudiantes, deben trabajar guiado por los principios rectores formulados internacionalmente, que constituyen las direcciones para realizar el trabajo con este tipo de actividad formativa relacionados con:

De ahí que, en la etapa de pregrado de estos estudiantes, los profesores responsables con su formación profesional pedagógica deben tener en cuenta la asimilación, la incorporación de los conocimientos, para el desarrollo de los comportamientos y las habilidades prácticas relacionadas con la educación ambiental mediante la participación responsable y eficaz de estos en acciones relacionados con la prevención y la solución de los problemas ambientales.

Dicho proceso educativo es importante porque permite la formación de convicciones y valores éticos, y estéticos, que constituyen la base de una autodisciplina hacia el medio ambiente, lo que se evidencia en las conductas adecuadas, en las actividades que garanticen su protección. De ahí su relación con las legislaciones, puesto que las medidas de control, las políticas y hasta las decisiones que los Estados adopten con respecto al medio ambiente, aunque puedan tener una decisión jurídica, deben tener un carácter educativo.

En este proceso, también se pone de manifiesto el papel de la educación moral, la que influye en la manifestación en la práctica hacia la protección del medio ambiente. Por ello es importante el fortalecimiento de la conciencia y de los valores éticos-humanistas consustanciales a la ideología socialista, lo que defiende el papel esencial de la moral profesional en la sociedad cubana como garantía del crecimiento espiritual y humano del individuo, así como del contenido de una ideología de compromiso con la realidad social.

Estos valores posibilitan que los futuros profesionales de la educación de estas especialidades estén en mejores condiciones para desarrollar una efectiva educación ambiental en este siglo XXI, la que no exenta de las dos tendencias principales que caracterizan la Educación Superior en la actualidad, ante el cumplimiento de su pertinencia social que es esencialmente la formación de profesionales útiles a la sociedad, primero se reconoce la tendencia humanista donde se promueve la educación en valores, la misma aboga por un desarrollo sostenible de la economía y el ser humano en armonía con la naturaleza, haciendo compatible el desarrollo científico- tecnológico con el medio ambiente así como los intereses y derechos humanos y por otra parte la tendencia economicista de la educación , que no tiene en cuenta al ser humano, sus intereses y necesidades auténticas.

Todo ello resultado del aumento de la degradación moral y espiritual de los individuos, como efecto de la crisis de valores cuya causa esencial es la existencia de un desarrollo desigual, donde según el destacado teólogo brasileño Betto, F (2016)

La razón instrumental de la modernidad fracasó porque cedió al pragmatismo del mercado y se distanció de valores como la ética. En el capitalismo, todo sistema axiológico constituye un estorbo. La ética solo existe como discurso para engañar a los ingenuos, como los “sellos verdes” que enmarcan la propaganda de las grandes empresas que devastan el medio ambiente. (p.1)

De ahí que ante esta situación es imprescindible el rescate humano de una ética social que oriente la tendencia progresista de la búsqueda de las vías que propicien un desarrollo sostenible de racionalidad, equidad y entendimientos humanos en el planeta.

En este sentido cobra total vigencia las palabras expresadas por el Comandante Fidel Castro Ruz en la Conferencia de la Organización de la Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, celebrada en Río de Janeiro, 12 de junio de 1992, cuando planteó:

Una importante especie biológica está en riesgo de desaparecer por la rápida y progresiva liquidación de sus condiciones naturales de vida: el hombre. Hágase más racional la vida humana. Aplíquese un orden económico internacional justo. Utilícese toda la ciencia necesaria para un desarrollo sostenido sin contaminación. Páguese la deuda ecológica y no la deuda externa. Desaparezca el hambre y no el hombre. (Castro, 2007.p. 13-15).

En ambos pensadores de profundas ideas éticas hay presencia de las ideas martianas y su posición ética hacia aspectos importantes como el cuidado y respeto por el ser humano en equilibrio con el medio social y natural, la defensa de la justicia social, la igualdad entre las naciones independientemente de su origen histórico, étnico, geográfico y la honestidad.

De ahí que el estudio de la vida, obra y pensamiento del Apóstol, en particular su pensamiento ético, es fundamental para la educación ambiental de los futuros profesionales de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y de las Ciencias Naturales, ya que primero contribuye a elevar el nivel cultural de los estudiantes, al acercarse estos a través del análisis y estudio de sus textos a José Martí por Martí, a la vez, posibilita que estos puedan profundizar y valorar al patriota, el revolucionario, y el hombre admirador también de la naturaleza.

Por lo tanto, para comprender el pensamiento ético martiano es necesario tener en cuenta, el contexto histórico-social de su surgimiento y desarrollo, así como sus criterios sobre la naturaleza, su cuidado, desde una actitud ética, lo cual sirve de referente en la formación de las nuevas generaciones de profesores.

El estudio del pensamiento ético martiano constituye una necesidad ante los retos que enfrentan la familia, la escuela, los educadores y la sociedad cubana actual, como fuente ideológica para garantizar la continuidad de la obra de la Revolución cubana.

Dentro de los factores socioeconómicos, políticos, históricos que influyeron en el desarrollo de su pensamiento ético, necesarios a tener en cuenta en la educación ambiental de los futuros profesores, está el contexto donde nació y transcurrió su adolescencia y temprana juventud, de la Cuba colonial de la segunda mitad del siglo XIX, donde las aspiraciones de independencia, de justicia e igualdad social y la abolición de la esclavitud, poco a poco, constituyeron no solo aspiraciones políticas sino manifestaciones de la identidad nacional.

Posteriormente su estancia en países de Europa como España (1871-1874) y de América Latina, como por ejemplo México (1875-1876), Guatemala (1877-1878), y Venezuela (1881), en los cuales pudo apreciar, la historia, la sociedad, la vida del indio, las vivencias germinales para su concepción sobre la política, el arte, la ciencia, la educación, el periodismo, la economía, y la naturaleza exuberante, aunque sufrió las devastadoras consecuencias para la región de la conquista y colonización europea, que justamente en el medio ambiente, dejó claro su política de destrucción de los recursos naturales.

Así por ejemplo en su hermosa revista, La Edad de Oro, escrito entre julio y octubre (1889), dedicado a los niños y las niñas de América, en su artículo “Las ruinas indias”, expresó:

De toda aquella grandeza apenas quedan en el museo unos cuantos vasos de oro, unas piedras como yugo, de obsidiana pulida, y uno que otro anillo labrado. Tenochtitlán no existe. No existe Texcoco, el pueblo de los palacios. Los indios de ahora, al pasar por delante de las ruinas, bajan la cabeza, mueven los labios como si dijesen algo, y mientras las ruinas no les quedan atrás, no se ponen el sombrero. (Martí, 1889.p. 121).

En los Estados Unidos (1880-1895), país que proclamaba ser defensor de las libertades democráticas, y de los derechos de los hombres, pudo el Apóstol conocer tanto las bondades como los horrores del proceso de la expansión del capitalismo norteamericano, hacia una potencia en su fase imperialista, al contactar con una realidad muy diferente a la de los pueblos que él denominó de “Nuestra América”, de ahí que mediante la prosa, en sus crónicas sobre esta nación, que él mismo llamó Escenas Norteamericanas, mostró con gran madurez sus trabajos periodísticos, considerados obras de arte por su agudeza, profundidad, el ímpetu y la sensibilidad al tratar los disímiles temas expuestos.

Es justamente en estos escritos donde aparecen no solo los incidentes de la vida política, sino, los económicos, religiosos, los problemas sociales y los impactos de los fenómenos naturales en la vida de los habitantes de ese país.

La aproximación a estas diferentes realidades históricas le permitieron analizar el problema de Cuba, desde una mirada de lo universal en lo particular, que se materializa en la idea de fundar, un partido, para organizar la Guerra Necesaria, porque necesaria era la separación inmediata y definitiva del colonialismo español y porque necesario era enfrentar libres las nuevas amenazas del gigante de las siete leguas.

Por lo tanto, el pensamiento ético martiano se concreta en su concepción de la revolución para la construcción de una república de nuevo tipo: democrática, y la importancia que le dio a la unidad entre lo político y lo social, en la atención a la problemática humana, a partir del rescate de la dignidad humana, por lo que la lucha emancipadora es también en contra de todo tipo de discriminación e injusticias sociales.

Además en la educación de valores universales como la honradez, manifestado en una actitud y conducta limpia, sin afanes y ambiciones personales, el rechazo al egoísmo, a la vanidad, en contraposición a la honestidad puesto de manifiesto, ante el culto a la verdad a pesar de ser en ocasiones cruel y perjudiciales para otros, así como el respeto no solo entre los hombres, sino entre las naciones y la diferentes culturas, José Martí también fue un respetuoso del medio natural, es decir de la naturaleza y de ella planteó ideas valiosas, siempre desde una posición de servirla, cuidarla y reconocer su aporte para la vida del hombre en el planeta, a través de reconocer que debe existir una verdadera comunión entre el hombre y la naturaleza, por ello en su artículo de Filosofía en (1889) expresó la siguiente idea: “(…) acerquémonos a la gran Madre, abramos el gran libro, cuyas páginas han escrito los siglos, cuyos actos y hechos son océanos, cuyo conocimiento augusto se prende en lo intangible e invisible (…)” (Martí. J, 1889, p. 364).

El reconoció que solo conociendo todos los atributos y valores que posee la naturaleza, era capaz el hombre de admirar su fuerza, su existencia independientemente de las voluntad de los seres humanos, y por consiguiente, posibilitaba que la actitud hacia ella no fuese de imposición, destrucción, despilfarro y profanación, sino todo lo contrario, en la ética martiana hacia la naturaleza la utilidad de la virtud, es constante hacia el amor, el respeto, el conocimiento, el cuidado, la defensa, la preservación y la armonía y no desequilibrio entre otros aspectos naturales de la que el hombre también forma parte activa.

Puesto que el Apóstol se acercó desde la cultura a la naturaleza, con una visión humanista, distante de lo que la llamada racionalidad moderna instauró, al concebirla sagrada, consoladora y una, al comprender que la misma inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre y que este se no se halla completo, ni se revela a sí mismo, en su íntima relación con la naturaleza.

Por lo que comprendió que la felicidad de los hombres y de los pueblos está en el conocimiento de la naturaleza, supo que esta cuando es perseguida se vuelve hacia el hombre, lo que constituye una lección, en la actualidad, cuando se habla de la educación ambiental, desde las clases que reciben los estudiantes de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y de las áreas de las Ciencias Naturales, a partir de los análisis que en ella se hacen de los nefastos resultados que a través de la historia de la humanidad han traído el irracional tratamiento al medio ambiente, de ahí que la única salida de la humanidad, a concientizar en las nuevas generaciones es asumir una actuación responsable en defensa del planeta. De ahí que su concepción de la naturaleza, favorece una adecuada educación ambiental en los jóvenes actuales, puesto sobre ella definió en 1889:

(…) ¿Qué es la Naturaleza? El pino agreste, el viejo roble, el bravo mar, los ríos, que van al mar como a la Eternidad vamos los hombres: la Naturaleza es el rayo de luz que penetra las nubes y se hace arco iris…Naturaleza es todo lo que existe, en toda forma, espíritu y cuerpos: corrientes esclavas en su cauce: raíces esclavas en la tierra, pies esclavos como las raíces. El misterioso mundo íntimo, el maravilloso mundo externo, cuanto es, deforme o luminoso u oscuro, cercano o lejano, vasto o raquítico… medido todo menos el cielo y el alma de los hombres es Naturaleza (…) (Martí. J, 1889, p. 369).

También desde la labor como maestro o profesor, que desarrolló en países como España, Guatemala, Venezuela y por último los Estados Unidos, en este último no solo fundó La Liga, espacio de la emigración en 1890 y 1891, en Tampa y Nueva York, respectivamente, a partir de la cual por su labor, fue acogido con verdadero beneplácito por sus miembros y familiares de los mismos, cuando era lunes, y la escuela de adultos se convertía en un sitio de encuentro, de reunión, de conocimiento y de amistad, allí fue reconocido como “El Maestro”, el amigo, y el hombre al cual podía preguntársele sobre variadísimos temas, y en forma amena como una conversación familiar, de amigos sentados en semicírculo alrededor de la mesa, dejaba ver sus ideas, sino desde su dimensión periodística, criticó la educación y la escuela que conoció allí, y en los países de América Latina.

Una de los temas más importantes en relación al tipo de educación, de enseñanza y la escuela que requería los nuevos tiempos, fue la necesidad de la educación científica, pero en José Martí, estuvo siempre presente regulando su pensamiento, su expresión y su acción, por ello reclamó la defensa de la educación científica en apego a la naturaleza, como expresión de fomentar la libertad de pensamiento, estimulando el espíritu investigativo en los estudiantes desde la educación elemental hasta la Universidad. Por ello, la importancia en la actualidad, de la ética martiana en relación a la educación ambiental puesto que consideró también su preocupación por que esta fuera útil, en correspondencia con las demandas de las realidades de los estudiantes.

Educación que en el contexto contemporáneo debe ser transformadora, no solo receptora de la información acerca de temas relacionados con el cambio climático, el efecto invernadero entre otros, sino, una educación ambiental práctica, útil, culta y formadora de valores, sentimientos y actitudes responsables ante el cuidado y preservación de nuestra casa común el medio ambiente, por ello reclamó en su artículo Educación Científica publicado en 1883:

[…] Que se truque de escolástico en científico el espíritu de la educación […] Divorciar el hombre de la tierra, es atentado monstruoso. Y eso es meramente escolástico: es divorcio. — A las aves, alas, a los peces, aletas, a los hombres que viven en la Naturaleza, el conocimiento de la Naturaleza: ésas son sus alas. (Martí. J, 1889, p. 381).

De esta forma se puede destacar que el contenido ético del pensamiento martiano, como elemento conductor de su quehacer político-revolucionario educativo, fue resultado de su entrega e identificación con los problemas de la humanidad, de la cual los problemas de la naturaleza conocida por él no le resultaron ajenos, de ahí la vigencia que tiene en la actualidad, profundizar en el sistema de valores que acompañó su actuación en la actual educación ambiental, que desde la enseñanza de las historias y las asignatura del ciclo del Marxismo-Leninismo y de las áreas de las Ciencias Naturales, los estudiantes de estas especialidades, deben conocer, en aras de apropiarse de herramientas científicas, y metodológicas para enfrentar uno de los problemas de la profesión, que es la dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje desde un enfoque interdisciplinario.

Conclusiones

La educación ambiental debe ser concebida como un proceso permanente durante toda la vida, cuyo comienzo no sea en la escuela, sino en el hogar, desde el nacimiento del niño, en que la familia establezca las nociones elementales sobre la protección del medio ambiente, para el ulterior desarrollo en los centros docentes y en otras actividades sociales.

En la etapa de pregrado de los estudiantes de las especialidades de Marxismo-Leninismo e Historia y del área de las Ciencias Naturales, la educación ambiental constituye una herramienta útil para su formación pedagógica, en tanto contribuye a que estos puedan dirigir de manera efectiva y culta esta actividad educativa con sus futuros estudiantes en los diferentes niveles de enseñanza donde desarrollarán su labor profesional.

El pensamiento ético martiano, contribuye a la educación ambiental, en tanto presenta una propuesta de sistema de valores, vitales para el logro efectivo de actividades y estrategias educativas dirigidas al cuidado del medio natural , de la cual el hombre es parte esencial de ahí, su sentido de la responsabilidad, respeto, de la intransigencia ante el maltrato, presentes en su proyecto político, que aportó los principios para la construcción de una nueva sociedad, donde debía primar el culto a la dignidad de los hombres y el respeto por la naturaleza.

Referencias Bibliográficas

Betto, F. (2016). El papel de la ética en las políticas de desarrollo. Ciudad de la Habana, Cuba. Oficina del Programa Martiano.

Castro, F. (2007). El diálogo de civilizaciones. La Habana, Cuba: Oficina de publicaciones del Consejo de Estado

Martí, J. (2008). La Edad de Oro. Ciudad de la Habana, Cuba: Editorial Gente Nueva.

Martí, J. (1975). Obras Completas. Tomo 8 Ciudad de la Habana, Cuba: Editorial Ciencias Sociales.

Martí, J. (1975). Obras Completas. Tomo 19 Ciudad de la Habana, Cuba: Editorial Ciencias Sociales.

Sánchez, V. (1989). Glosario de términos sobre medio ambiente. Santiago de Chile, Chile: Oficina Regional de Educación de la UNESCO.

Declaración de conflicto de interés y conflictos éticos

Los autores declaramos que este manuscrito es original, no contiene elementos clasificados ni restringidos para su divulgación ni para la institución en la que se realizó y no han sido publicados con anterioridad, ni están siendo sometidos a la valoración de otra editorial.

Los autores somos responsables del contenido recogido en el artículo y en él no existen plagios, conflictos de interés ni éticos.

Contribuciones del autor

Norma Luisa Pie McLean: redacción del artículo, fundamentos teóricos, diseño de la metodología. diseño del artículo, fundamentos teóricos metodológicos, revisión de todo el contenido.

Lucas Rodríguez Miranda: tratamiento estadístico e informático, revisión de todo el contenido