Varona

No.72 Enero-Junio, 2021.    ISSN: 1992-82

Memorias


Dr. C. Ramón Rodríguez Hermida, fundador y primer Rector del Varona

Dr. C. Ramón Rodríguez Hermida, founder and first Rector of the Varona Higher Pedagogical Institute

Dr. C. Ramón Cuétara López. Profesor Titular. Historiador de Ciudad Escolar Libertad. Universidad de Ciencias Pedagógicas Enrique José Varona,
Correo electrónico: ramoncl@ucpejv.rimed.cu
Orcid: http://orcid.org/0000-0001-8532-3674

Recibido: septiembre 2020      Aceptado: diciembre 2020


RESUMEN

En este artículo se aborda la personalidad y la obra de Ramón Rodríguez Hermida, fundador y primer Rector del Instituto Superior Pedagógico Enrique José Varona. Una vida dedicada a la formación de maestros que han escrito páginas importantes en el desarrollo de la pedagogía cubana.
Sirva como homenaje a este valioso compañero trabajador abnegado, fiel a su profesión al Partido y a la Revolución.

Palabras clave: personalidad, educador, Rector Ramón Rodríguez Hermida.

ABSTRACT

In this article is approached the personality of and life of Ramón Rodríguez Hermida, founder and first Rector of the Pedagogical Higher Institute Enrique José Varona. A life dedicated to the formation of teachers that have wrote important pages in the development of the Cuban pedagogy.
Also as an homage to this companion, strong worker, faithful to this profession, his Party and the Revolution.

Keywords: personality, educator, Rector Ramón Rodríguez Hermida.


Introducción

Aunque en un artículo de este corte, la sensatez indica que se debe ser breve, es oportuno exponer algunas facetas de la vida de Ramón Rodríguez Hermida, sobre todo, para los más jóvenes, quienes no lo conocieron personalmente:

Los días cuatro, cinco y seis de enero de 1964, se reunió en La Habana un grupo de alumnos procedentes de todas las provincias del país, para formarse como profesores de Secundaria Básica, en respuesta a un llamado hecho por la Revolución. De inmediato, matricularon en la Universidad de La Habana y comenzaron las actividades docentes en el Edificio Varona, en la Colina. En ese grupo de alumnos fundadores, se encontraba el compañero Ramón Rodríguez, quien matriculó en la especialidad de Geografía e Historia, en la Sección Secundaria Básica del Varona y, una vez graduado, se quedó trabajando en esta Institución en la especialidad de Historia; y matriculó en la Sección Secundaria Superior, donde obtuvo el  título, que luego se equiparó al de Licenciado en Educación.  Hizo su Doctorado en la antigua Unión Soviética, por indicación expresa del entonces Ministro de Educación José Ramón Fernández Álvarez.

La historia de este compañero, es la de muchos jóvenes que, luego del triunfo de la Revolución, tuvieron la oportunidad de cambiar un destino lleno de incertidumbres a causa de su humilde procedencia. El haber nacido en el seno de una familia humilde de la  enigmática Villa de Guanabacoa, le ofrecía no muy buenos augurios.  Su entrada al Varona significó un cambio radical en su vida.

Desde el inicio mismo, se incorporó a múltiples actividades, dentro de la vida en becas, la UJC y el Partido; entre las que se pueden menciona:

En la Sección Secundaria Básica, todos los estudiantes eran becarios, aun cuando vivieran en la Capital. La vida interna de los becarios se organizaba y controlaba por un Consejo de Residencia; este Consejo, rendía cuenta ante un Consejo de Zona (integrado por los propios estudiantes), que velaba por la vida interna de las residencias estudiantiles. El Consejo de Zona, desde que comenzó a funcionar, estuvo dirigido por Ramón Rodríguez, junto a otros cuatro compañeros.

Por su parte, la UJC se constituyó en dos Comité de Base: uno, el de los varones, en el antiguo edificio Someillán, en 17 y O, en el Vedado, y el otro en el edificio de las compañeras, en Tercera y F. Ramón, quedó como miembro de la dirección de aquel primer Comité de Base.

A partir de septiembre de 1964, ya en Ciudad Libertad, se unificaron los dos Comités de Base y se  fundó el Comité de Base “Camilo Cienfuegos”, integrado por más de 400 militantes. Este Comité de Base, tenía categoría de Comité Regional, con una dirección integrada por siete militantes, uno de ellos, Ramón Rodríguez, en representación del Consejo de Zona.

En 1969, se creó la UJC de Trabajadores de la Sección Secundaria Básica. Se organizó un Comité de Base y su dirección quedó integrada por Ramón Rodríguez como Secretario General. Pero al fundarse la UJC de Trabajadores de la Universidad de la Habana, Ramón pasó a dirigirla como Secretario General. 

En este propio año 1969, se constituyó el Partido Comunista de Cuba en el Varona y Ramón Rodríguez integró su Comité y, posteriormente, fue elegido Secretario General.

En este nuevo cargo, le correspondió apoyar la organización de tres grandes y decisivas tareas: el inicio los Cursos para Trabajadores, los de Superación de Maestros Primarios y el Destacamento Pedagógico Universitario Manuel Ascunce Domenech.

Bajo la guía del Partido, el Varona desarrolló tres tareas estratégicas,  a  partir del curso 1971-72.  Ellas son:

El surgimiento de los Estudios Dirigidos y los Cursos Vespertino-Nocturnos, donde los profesores de la enseñanza media podían obtener su título idóneo, sin abandonar el puesto de trabajo.

En el curso 1972-73,  se abrieron los Cursos para Maestros Primarios quienes, en cinco años, podían alcanzar un título equivalente al de los egresados de la Sección Secundaria Básica.

La tercera tarea de choque que enfrentó el Varona, con el Partido al frente, en el curso escolar 1972-73, fue organizar, desarrollar y dirigir el Destacamento Pedagógico Manuel Ascunce, donde se formaron, aplicando la modalidad de estudio-trabajo, en cinco contingentes, la respetable cifra de 14 374 egresados, que ya estaban incorporados al Sistema Nacional de Educación en el Nivel Medio y, posteriormente, se incorporaron a un Curso de Ampliación, para alcanzar el título de Licenciados en Educación.

El Plan del Destacamento Pedagógico, ha sido considerado por los expertos, como uno de los mejores planes de formación de profesores para la enseñanza media en Cuba.

Esta fue la época de las Filiales Pedagógicas, de las que la mayor parte del claustro del Varona formó parte, pues nuestra Institución atendió directamente 13 filiales, en la Región Occidental, incluyendo la Carlos Manuel de Céspedes de Isla de la Juventud.

En las filiales se trabajaba de lunes a lunes, y se cumplían todas las tareas propias de un profesor universitario, incluyendo las reuniones del Sindicato, la UJC y el Partido, en días que hoy sería difícil de creer: sábados o domingos, después de cumplir una jornada de trabajo voluntario, sin transporte de regreso para La Habana.

El 31 de enero de 1977, el Varona se convirtió en un Centro de Educación Superior y Ramón Rodríguez fue designado como su primer Rector y ocupó ese cargo durante 16 años, y bajo su tutela se estructuró lo que en realidad convirtió al Varona en una institución de nivel superior. Con austeridad extrema, dedicación al trabajo, ejemplo personal y exigencia máxima, es aun recordado porque, quien llegara al Varona antes de las siete de la mañana, allí lo encontraba y, si estaba de guardia, lo veía salir, en muchas ocasiones, pasadas  las 11 de la noche.

En 1992, por una infeliz decisión ministerial, fue nombrado Director Provincial de Educación en Ciudad de La Habana. En honor a la historia, hay que señalar que a los escasos seis meses de Ramón estar ocupando ese cargo, se realizó una reunión con todos los directores de escuelas de la ciudad, y allí algunos plantearon que nunca habían recibido la vista de un Director Provincias en su Escuela, y que Ramón Rodríguez ya los había visitado a todos y los identificaba por nombres y apellidos.

Después también trabajó en el Departamento de Estudio de Política Internacional sobre Estados Unidos, de la Universidad de La Habana y también ocuparía el cargo de Vicerrector administrativo en la Universidad de las Artes, pero los que lo conocieron de cerca, saben que nunca fue igual a la pasión con que dirigió “a su Varona”.

Los nuevos planes de estudio A, B y C, tuvieron al  Varona como   su Centro Rector. Sus especialistas presidieron las Comisiones Nacionales para su elaboración, las oponencias y su aprobación final. En este trabajo el Partido del Varona jugó un papel decisivo, pues esa tarea asignada por el Ministerio de Educación, se cumplió milimétricamente.

En 1978, a solo un año de su constitución como Centro de Educación Superior,  el Varona enfrentó, con éxito, la tarea de la organización y control del Contingente del Destacamento Pedagógico Internacionalista Che Guevara. En Güines, se reunieron los aspirantes a integrar el primer contingente y recibieron la preparación necesaria para cumplir esa tarea. De las aulas del Varona, se incorporaron 686 estudiantes a los cinco contingentes que se organizaron; y 157 profesores de su claustro, cumplieron misión internacionalista en Angola, Nicaragua, Etiopía, Mozambique, Argelia, Guyana, Afganistán, India y Granada, en la época en que estas misiones solo representaban el peligro de vivir en un país en guerra, o contraer enfermedades desconocidas en Cuba, y sin ninguna remuneración económica adicional.

El 25 de Marzo de 1985, cayó combatiendo contra las fuerzas de la UNITA, el profesor Héctor Pineda Zaldívar, quien perdió la vida en desigual combate, en la batalla de Sumbre, capital de la provincia de Kwanza Sur. Con el arrojo y la valentía de los profesores cubanos, los miembros de la Corporación de la Construcción de la UNECA y otros colaboradores, hicieron una resistencia tal al enemigo, que no pudieron lograr su objetivo de tomar el edificio de los cubanos; después, con el apoyo de la aviación cubana, los fantoches de la UNITA tuvieron que abandonar el campo de batalla.

En esa gesta heroica se distinguieron los profesores del Varona Georgina Veloz, Salvador Mateo y Miguel Llivina, quienes fueron condecorados por el Consejo de Estado de la República de Cuba con la Orden al Valor, que se otorga por hechos extraordinarios en la defensa de la Patria;  y como Combatiente Internacionalista.

También el Instituto Superior Pedagógico Enrique José Varona, tuvo su presencia en el Contingente Pedagógico Augusto César Sandino de Maestros Primarios, en Nicaragua, con 22 docentes, en condición de asesores, metodólogos e inspectores, quienes con su eficiente trabajo contribuyeron al éxito de la Cruzada de Educación, que inició el Frente Sandinista de Liberación Nacional,  desde su llegada al poder, el 19 de julio de 1979. El Rector Ramón Rodríguez Hermida, jugó un destacado papel en la organización, ejecución y control de estas complejas tareas.

Quienes lo conocieron pueden afirmar aquí, con pleno conocimiento de causa, que para Ramón Rodríguez, el Varona fue su gran obra, que la pasión, la dedicación, el entusiasmo, el saber científico y pedagógico, que puso en ella no fue en vano, pues hizo un gran aporte al desarrollo educacional del país, ya que el Varona se ha considerado como “El Alma Máter de la Pedagogía Cubana”, por sus aportaciones  a la formación y superación del personal docente en el país.

En su labor pedagógica, con virtudes y defectos, como toda obra humana, influyó siempre un carácter incorruptible, audaz y nada conformista, con un hacer especialmente “blindado” contra todo lo que no fuera cumplir con el mandato supremo de la Revolución y, especialmente, con lo orientado por el Comandante en Jefe, a quien respondió siempre incondicionalmente.

En resumen, una apretada síntesis recogería varias aristas en la trayectoria de Ramón Rodríguez, aunque los más significativo son varios hitos que marcaron su proceder, donde se apreciarían necesariamente, debates muy llamativos para una persona de su edad; por ejemplo, como inicio estaría la faceta de alumnos fundador del Varona, a partir del 5 de enero de 1964, alternando a la vez como Miembro del Comité de Dirección de la UJC en el centro; su responsabilidad al frente del Consejo de Zona, órgano dirigente de las residencias estudiantiles; Secretario de la UJC de Trabajadores del Varona y, después, Secretario de la UJC de Trabajadores de la Universidad de La Habana; hasta llegar a ser el Secretario del Comité del Partido en el Varona y su posterior designación como Rector, el 31 de enero de 1977, cuando se fundó el Varona como un Centro de Educación Superior.

Ese es el Profesor que hoy recordamos, porque su ejemplo y legado nos sigue señalando el camino en las transformaciones de la Educación, para poder construir un Socialismo próspero y sostenible. Cada vez que tengamos un problema que resolver en el Varona, acordémonos de Ramón Rodríguez, y allí tendremos una fuente inagotable de aliento para enfrentarlo. A los más jóvenes profesores y estudiantes del Varona, a los que no lo conocieron, los exhortamos a que profundicen en su vida y obra. Ese será el mejor homenaje que podamos tributarle a nuestro querido e inolvidable compañero, quien se caracterizó a lo largo de toda su existencia por una lealtad sin límites al Varona, a la Revolución, al Partido y, muy especialmente,  a Fidel Castro.