Varona

No.59   Julio-Diciembre, 2014.    ISSN: 1992-82

Antecedentes históricos de las prácticas de campo de la asignatura Botánica I en la especialidad Biología

Historical Antecedents of the Practices of Field of the Botanical Subject I in the Specialty Biology

MSc. Nilda Guzmán Collazo. Asistente. Jubilada Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”. La Habana, Cuba.

Recibido junio de 2014   Aceptado agosto de 2014


RESUMEN

En el trabajo se hace un recuento histórico del desarrollo de las prácticas de campo desde la etapa colonial hasta finales del siglo XX, como una necesidad de comprobar, en las condiciones naturales, los contenidos impartidos teóricamente, de manera que contribuya a elevar el nivel del proceso docente-educativo.

Palabras clave: excursión, práctica de campo, biología, botánica.

ABSTRACT

In the work a historical recount of the development of the field practices is made from the colonial stage until final of the XX century, like a necessity to check, under the natural conditions, the contents imparted theoretically, so that it contributes to elevate the level of the educational-educational process.

KEY WORDS: trip, field practice, biology, botany.


Introducción

En la Enseñanza Superior, especialmente en la Biología, el profesor debe constantemente buscar nuevas vías que permitan elevar la calidad del proceso docente-educativo, desde los puntos de vista teórico y práctico, de manera que facilite un mejor aprendizaje.

En la Enseñanza Superior se denomina a la excursión a la naturaleza como práctica de campo, debido a que tiene una mayor complejidad, aumenta el tiempo en contacto con el medio ambiente, una mayor exigencia intelectual, así como contribuye a elevar la independencia cognoscitiva de los estudiantes.

Entre las formas organizativas del proceso docente-educativo, requiere especial atención, la práctica de campo, por lo que es importante la indagación de su desarrollo histórico en la enseñanza de la Biología.

Desarrollo

Se pueden mencionar, como antecedentes de la Enseñanza Superior, la fundación, en el siglo XVIII, del Seminario de San Basilio el Magno, en Santiago de Cuba, la Real y Pontificia Universidad de San Jerónimo de La Habana y el Seminario de San Carlos y San Ambrosio, en La Habana. Aunque se hicieron intentos por crear escuelas para formar maestros, no fue hasta 1857 en que se estableció, en Guanabacoa, una Escuela Normal para Maestros, dirigida por los Padres Escolapios.

En este período, en el Nuevo Manual de las Escuelas Primarias, Medianas y Normales, en el capítulo dedicado a la historia natural, se plantea, en la parte relacionada con el estudio de la Botánica, la realización de excursiones, en las que se contemplara la colección de objetos naturales. En 1890 se crearon las Escuelas Normales en La Habana: una para maestros y otra para maestras. En ambas escuelas no se tenían en cuenta las excursiones docentes.

En esta época se destacó Felipe Poey Aloy (1799-1891), el cual incursionó en el estudio de la flora, la fauna y la constitución geológica del país; salió del recinto universitario con sus estudiantes hacia los campos, basándose en la concepción de que solo a partir de la observación personal del alumno comienza el verdadero aprendizaje.

Igualmente, Martí J (1853-1895) planteó la importancia del conocimiento de la naturaleza para los hombres, al expresar: "Siéntese maestro como mano a mano con el discípulo, y el hombre mano a mano con su semejante, y aprenda en los paseos por la campiña el alma de la botánica, que no difiere de la universal…”.(1)

Varona E J (1849-1933) caracterizó la enseñanza de la época colonial, al plantear que “Nuestra educación e instrucción no han estado en armonía con lo que naturalmente ofrece nuestro suelo a la actividad individual como más provechoso y útil”.(2)

Durante el período de la República Neocolonial se promulgó un plan de reforma universitaria, creándose la Escuela de Pedagogía, adscripta a la Facultad de Ciencias y Letras de la Universidad de La Habana. Esta reforma fue formulada por Enrique José Varona Pera, con el propósito de formar profesionales para suplir las necesidades del país y transformar la enseñanza tradicionalista en la práctica experimental.

Como parte de la formación emergente de maestros, se enviaron 1 256 de ellos en ejercicio y aspirantes, a una escuela de verano en la Universidad de Harvard en 1900, que incluía, en su plan de actividades, excursiones geográficas e industriales.

A principios del siglo XX se publicó, por Bielsa M, el libro de Metodología para exámenes de maestros, que le atribuía gran importancia a la excursión, en el capítulo dedicado a las Ciencias Naturales. José Silvestre Sauget (Hermano León) (1871-1955), perteneciente al Colegio de La Salle, fue un abanderado en la realización de las excursiones, acompañando a los alumnos en diversas excursiones al campo.

En 1915 se crearon las Escuelas Normales en Cuba, dos en La Habana y una en cada capital de provincia. En la asignatura Agricultura, se planteaba la utilización de los campos de cultivo de las granjas, y escuelas agrícolas u otras instituciones.

El plan de estudio de las Escuelas Normales para Maestros, en 1940, incluía entre las enseñanzas, Agricultura y Prácticas agrícolas. En conversación directa con Calcines O (1924-2009), experimentada pedagoga y ex-alumna de esta institución, se constató que no se realizaban excursiones como parte de la enseñanza; sin embargo, en la asignatura Didáctica, al preparar las clases, podían seleccionar una, referida a la excursión, la cual después se exponía ante un auditorio.

En comunicación personal con Suyí M (1915-2001), ex-alumna de la Escuela de Pedagogía, expresó que, al cursar la asignatura Antropología, se realizaba una excursión a Pinar del Río, la cual era orientada con la finalidad de cumplir con los objetivos propuestos.

En 1946, Aguayo A M (1866-1948) expuso la necesidad de que el profesor utilizara, para la enseñanza, todos los medios que se hallaban a su alcance, como la realización de excursiones escolares, que incluía visitas a museos, parques zoológicos y jardines botánicos; además, planteó, en la guía didáctica de la escuela, la realización de las excursiones docentes desde pre-primario hasta tercer grado. En sexto grado orientaba ir a una mina, al campo y a los mercados cubanos, para estudiar los frutos y los vegetales de Cuba.(3)

Fernández H N y Hernández J L) plantearon que José Francisco Wegener González (1910-1967) consideraba que, entre las formas de organización de la enseñanza, las excursiones ocupaban un lugar relevante, cuya importancia pedagógica radicaba en su preparación, que incluía una guía o cuestionario que, con cierta flexibilidad, orientaba la búsqueda de la información que se requería, así como la realización de esquemas de los organismos colectados.(4)

En la obra de Angulo M de J, Didáctica de los estudios de la naturaleza en la Escuela Primaria, este autor señalaba la importancia de las excursiones, al permitir el contacto íntimo entre el medio ambiente y el niño, así como orientaba al profesor cómo desarrollar esta actividad.(5)

Después del Triunfo de la Revolución, en 1959, en el curso escolar 1963-1964, se organizó, dentro de la Facultad de Humanidades de la Universidad de La Habana, la Carrera Profesoral, antecedente directo del Instituto Pedagógico “Enrique José Varona”.

En 1964 se crearon los Institutos Pedagógicos que, en un inicio, tenían dos planes de estudio: uno para la Carrera Profesoral de Secundaria Básica y otro para la Carrera Profesoral de Secundaria Superior (Preuniversitario). En la Carrera Profesoral de Secundaria Básica, en la especialidad de Biología y Prácticas Agropecuarias, además de desarrollar las actividades prácticas en el huerto, realizaban excursiones a centros agropecuarios, para lo cual el profesor les entregaba una guía sobre los aspectos a observar. En la Carrera Profesoral de Secundaria Superior, Acevedo M, basado en la experiencia de la práctica de campo en la Educación Superior de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, introdujo en la Carrera de Geografía y de Biología, específicamente en la asignatura de Geología, la orientación de los aspectos a observar. En Zoología se realizaba una excursión a la playa, para lo cual se le entregaba a los estudiantes una guía en la que se orientaba la colecta de los ejemplares, sin llegar a conservarlos; en Botánica, según Bertha M. de la Cruz Capote, en el año 1997, experimentada profesora de Botánica, no se hacían excursiones, sino que se realizaban actividades prácticas en el Jardín Botánico de la Universidad de La Habana, donde se comprobaba la teoría impartida en clases y se colectaban plantas de diferentes familias, para lo cual se entregaba a los estudiantes un sumario con los aspectos a observar.

Al inicio de la década de los años 1970, como consecuencia del aumento de la matrícula de la Enseñanza Media, se creó el Destacamento Pedagógico Universitario “Manuel Ascunce Domenech”, cuyo Plan de Formación de Profesores de Educación General Media (PFPEGM) comprendía un primer ciclo con dos cursos de Biología General. En el primer curso se incluía, en la Unidad II, titulada Aspectos generales de Ecología, un trabajo de campo, en el que se orientaba a los estudiantes colectar organismos de diferentes especies, conservarlos debidamente y anotar sus características, como punto de partida para establecer los conceptos de clasificación. Además, se les indicaba levantar un croquis de la zona de estudio y representar la distribución de las especies. En la asignatura Didáctica de las Ciencias Biológicas, que se impartía en el cuarto año, se trataban las excursiones como otra forma de organización del proceso docente-educativo. En el quinto año, al estudiar el Reino Animalia, se realizaba un trabajo de campo, con el objetivo de colectar especies de distintas clases del Phylum Arthropoda. En la asignatura Biología VII-VIII, en la Unidad VII Hongos, se llevaba a acabo un trabajo de campo que incluía un recorrido por los alrededores del centro de estudio para observar y colectar diferentes tipos de hongos, para luego estudiarlos en el laboratorio.

En 1976 se transformaron los Institutos Pedagógicos en Institutos Superiores Pedagógicos. En el curso escolar 1977-1978 se inició el Plan de Estudio A; por primera vez, se incluyó un programa de práctica de campo en la Especialidad de Biología, en la asignatura Ecología, con veinte horas/clase.

En 1981 se hizo una práctica de campo en la Loma del Taburete en la Sierra del Rosario, en Pinar del Río, con estudiantes de segundo, tercero y cuarto años. A partir de esta experiencia, se realizó, como tarea del Departamento de Zoología, la primera investigación científica asociada con la práctica de campo, para estudiar las características de la fauna y la introducción de la práctica de campo en el plan de estudio.

En el curso escolar 1982-1983 se inició el Plan de Estudio B, elaborado por la Comisión Nacional de Perfeccionamiento del Ministerio de Educación. En este plan de estudio, la práctica de campo adquirió una gran relevancia, teniendo sus antecedentes, según Arredondo C, en el año 1997, profesor de Zoología, en una práctica de campo de Zoología realizada de forma experimental con un grupo de alumnos internacionalistas, en el año 1980, en Canasí, Matanzas.

En 1982 se realizó la primera práctica de campo de Ecología en la Sierra del Rosario, con estudiantes de cuarto año del Plan de Estudio A, a los que se les entregó una guía con los objetivos y las actividades a realizar.

Después de este año se incorporó la primera práctica de campo en la asignatura Fundamentos de Agropecuaria, que incluía el ordeño manual, el vivero y la rotulación de tierras.

Posteriormente, se incluyeron, en la práctica de campo, las asignaturas de Zoología y Botánica (Estructural y Sistemática), junto con Ecología. Estas prácticas se realizaron en: El Taburete, Sierra del Rosario, Playa Amarilla, Peñas Blancas y El Narigón, con una estancia entre siete y diez días.

Para hacer la práctica de campo de Zoología se utilizaba una guía que orientaba las actividades que se desarrollarían. En este mismo sentido, según la profesora Valentín M del C, en el año 1998, en las asignaturas de Botánica Sistemática I y Botánica Sistemática II, las actividades de campo se realizaban mediante una guía que incluía los objetivos y las actividades. Cabe señalar que estas guías en la asignatura Botánica Estructural adolecían de los fundamentos teóricos que permitieran a los estudiantes realizar con éxito dicha actividad, a la vez que carecían de orientaciones en las que se detallaran las operaciones que les facilitaran colectar, identificar y conservar los distintos órganos vegetales.

A partir de 1988 se elaboró una guía de práctica de campo de Botánica Estructural, por la autora de este artículo, en la cual se brindaba a los estudiantes los fundamentos teóricos para la identificación de los órganos vegetales y las orientaciones para el trabajo de campo.

En el Plan de Estudio B, constituye un aspecto positivo el aumento del tiempo para el desarrollo de la práctica de campo. El trabajo de validación de la efectividad de este plan permitió determinar la falta de equilibrio entre las formaciones académica, laboral e investigativa de los estudiantes, lo cual no garantizaba un adecuado desarrollo de las habilidades profesionales del egresado. En 1987, se hicieron modificaciones, como: disminución de la carga docente por semestre, eliminación y/o fusión de asignaturas, incremento del tiempo disponible para el desarrollo de habilidades prácticas y lograr una mayor relación interdisciplinaria.

En el curso escolar 1990-1991 comenzó el Plan de Estudio C de Licenciatura en Educación. En este plan de estudio, la práctica de campo formaba parte de las disciplinas Botánica, Zoología General y Genética Ecológica, contando con 40 horas/clase de las asignaturas que las integraban.

En la disciplina de Zoología General se orientaba realizar dos prácticas de campo: una, en la que se estudiaba la fauna de los invertebrados, y otra, en que se trataba lo relacionado con los vertebrados.

En el caso de la práctica de campo relacionada con los invertebrados y los vertebrados, los estudiantes disponían de una guía, en la que se orientaba el cuidado del medio ambiente, la necesidad de los conocimientos y las habilidades formados y el traslado de los materiales necesarios al campo. Además, incluía la distribución de los estudiantes por equipos, el horario de trabajo en el campo, la necesidad de hacer anotaciones personales en la libreta de notas acerca de lo observado para elaborar el informe final, aspectos que se tendrían en cuenta al realizar la descripción morfológica y ecológica del ejemplar observado, forma en que deben trabajar los equipos en el campo, lugares donde hacer la colecta, de forma general. También, por cada grupo de animales, se detallan la zona de colecta y la forma de realizarla, los aspectos que se observarían, así como la necesidad de la utilización de claves dicotómicas para identificar los ejemplares.

En la disciplina Genética Ecológica el profesor orientaba, mediante una guía, las actividades que se realizarían, así como la bibliografía correspondiente y, al finalizar esta actividad, el estudiante entregaba y defendía el informe de la práctica de campo.

Las prácticas de campo de las disciplinas Botánica y Zoología se han desarrollado de forma compartida, al estar planificadas su realización en la misma etapa dentro del semestre. En la disciplina Botánica, se hacen dos prácticas: una, correspondiente a la asignatura Botánica I, donde se estudian los órganos vegetales, y otra, en la asignatura Botánica II, relacionada con la flora y la vegetación.

En la práctica de campo de la asignatura Botánica ll, según la profesora Valentín M de C, en el año 1998, se entregó a los estudiantes una guía en la cual se exponían los objetivos, orientaba las actividades a realizar e incluía la utilización de algunas claves dicotómicas. Al finalizar esta, ellos entregaban y defendían un informe, al que se anexaba un herbario.

En la asignatura Botánica I se utilizó la guía de práctica de campo de Botánica Estructural, escrita por la autora de este artículo, en 1988, hasta el curso escolar 1995-1996, en el que se reelaboró, estando integrada por la orientación a los estudiantes, número y cuidado de los ejemplares colectados para su herborización, pasos para la herborización de los ejemplares, conservación de los frutos y los fundamentos teóricos que incluyen la clasificación de los órganos vegetales mediante claves dicotómicas y figuras, así como un glosario que complementaba la comprensión de las clasificaciones y la bibliografía.

Una vez concluida la práctica de campo, los estudiantes entregaban el herbario y los frutos conservados con su identificación. También defendían el informe final que se orientaba en el manual ante un tribunal.

Conclusiones

Durante el desarrollo de la enseñanza de la Biología, destacados pedagogos han considerado muy importante, en la formación científica de los estudiantes, su interacción con el medio ambiente, lo cual se mantiene vigente en el desarrollo de las excursiones y las prácticas de campo.

En la formación de profesores en los institutos superiores pedagógicos, hoy universidades, la realización de las prácticas de campo adquiere un gran desarrollo en el Plan de Estudio C, formando parte de las disciplinas Zoología, Botánica y Genética Ecológica.

En la asignatura Botánica I sepropone un manual que orienta a los estudiantes las actividades a realizar durante el desarrollo de la etapa preparatoria, la ejecutoria y de conclusiones de la práctica de campo, al ofrecer la información necesaria para colectar, identificar y conservar los órgano vegetales, así como la elaboración de un informe.

 

Referencias

(1)MARTÍ J. Obras completas. T. 13. La Habana, Cuba: Editorial Nacional de Cuba; 1964. p.188.

(2)Varona E J. Trabajos sobre educación y enseñanza. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1992. p.116.

(3)AGUAYO A M. La práctica de educación de la Universidad de La Habana. La Habana, Cuba: Asociación Pedagógica Universitaria; 1923.

(4)FERNÁNDEZ H N, HERNÁNDEZ J L. Cuatro vidas dedicadas a la enseñanza de la Biología en Cuba. José Francisco Wegener González. La Habana, Cuba: Rev Educación 1988, No. 68, ene-mar.

(5)ANGULO M DE J. Didáctica de los estudios de la naturaleza en escuela primaria. Santa Clara, Cuba, 1953.

 

Bibliografía

AGUAYO A M, ECHEGOYEN A. Guía didáctica de la escuela nueva. La Habana, Cuba: Cultural, S.A.; 1938.

GUZMÁN N. Manual de práctica de Botánica Estructural. Material mimeografiado. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona”; 1995.

MINISTERIO DE EDUCACIÓN SUPERIOR. Biología General. Programa Guía l-ll. Carrera Profesoral de Ciencias Biológicas l-ll. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1973.

MINISTERIO DE EDUCACIÓN SUPERIOR. Biología. Programa Guía. 5to. Año. Carrera Profesoral de Biología Vll-Vlll. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1976.

MINISTERIO DE EDUCACIÓN SUPERIOR. Plan de Estudio B adecuado. Especialidad Biología. Curso Regular Diurno. Licenciatura en Educación, curso 1989-1990. La Habana, Cuba: Autor; 1990.

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