Varona

No.59   Julio-Diciembre, 2014.    ISSN: 1992-82

Contribución del pensamiento de Fidel Castro como herramienta indispensable para el trabajo político e ideológico de los docentes

Contribution of Fidel's Castro Thought Like Indispensable Tool for the Political and Ideological Work of the Educational Ones

Lic. Orestes González Pérez. Asistente. Universidad de Camagüey “Ignacio Agramonte y Loynaz”. Camagüey, Cuba.

Dr. C. Miguel Ángel Pérez Hernández. Profesor Titular. Universidad de Camagüey “Ignacio Agramonte y Loynaz”. Camagüey, Cuba.

MSc. María Isabel Basulto Tamarit. Asistente. Universidad de Camagüey “Ignacio Agramonte y Loynaz”. Camagüey, Cuba.

Recibido mayo de 2014   Aceptado septiembre de 2014


RESUMEN.

El artículo muestra por medio de varias ideas expuestas por el líder de la Revolución Cubana en sus discursos, en diferentes momentos trascendentales del proceso revolucionario, los aspectos esenciales del pensamiento político de Fidel, que constituyen una plataforma programática para el trabajo político e ideológico de los docentes en su labor diaria. Los fragmentos de los discursos presentados, mantienen un orden cronológico en el tiempo y revelan la esencia humanista y pedagógica del máximo líder; ello constituye una fortaleza para el trabajo de los docentes al contener el día, el año, el lugar, el motivo del discurso y una breve valoración, así como la fuente bibliográfica de consulta.

PALABRAS CLAVE: Fidel, pensamiento político, labor del docente.

ABSTRACT.

The article shows by means of several ideas exposed by the leader of the Cuban Revolution in its speeches, in different momentous moments of the revolutionary process, the essential aspects of Fidel's political thought that constitute a programmatic platform for the political and ideological work of the educational ones in its daily work. The fragments of the presented speeches, maintain a chronological order in the time and they reveal the maximum leader's humanist and pedagogic essence; it constitutes it a strength for the work from the educational ones when containing the day, the year, the place, the reason of the speech and a brief valuation, as well as the bibliographical source of consultation.

KEYWORDS: Fidel, political thought, work of the educational one.


Introducción

La humanidad transita por un momento histórico en que la función de la ciencia ha adquirido dimensiones como nunca antes, esto implica que la ciencia se vea como un sistema de conocimientos en desarrollo, en correspondencia con la realidad; por tanto, se manifiesta como un proceso permanente e inagotable de transformación.

Ante la connotación del desarrollo general del saber científico, un lugar importante ocupan las ciencias de la educación, y en este contexto la formación del personal pedagógico es esencial, por su compleja labor, de potenciar la intervención en el mundo de un hombre creador, transformador, capaz de resolver problemas, un individuo que acepte los retos de la sociedad moderna y que a su vez, con su ingenio, destreza y sabiduría tire de este desarrollo propiciando nuevas metas, que conducen el replanteamiento de situaciones problémicas, o a la solución de nuevos problemas.

Ello genera desarrollo en la sociedad e impone a la educación un perfeccionamiento continuo, para que pueda dar respuesta adecuada a las exigencias sociales de cada momento, y con una profunda competencia humanística y científica lograr la formación del ciudadano que responda con eficacia a las exigencias sociales.

Cuba como parte del mundo contemporáneo no es ajena a este proceso de desarrollo. El reto es superior por ser un país del Tercer Mundo que enfrenta una guerra genocida durante más de 50 años, contra la potencia imperialista de los Estados Unidos, que en la actualidad, continúa con el intento de lograr sus aspiraciones históricas de dominio total sobre la Isla, recrudeciendo su política agresiva por diferentes vías, como campañas difamatorias a nivel mundial, o aumento del bloqueo económico. Para los cubanos la necesidad de crecer, para llevar a cabo el proyecto socialista que propugnan es algo vital.

Todo lo antes expuesto, implica una preparación política e ideológica cada vez mayor del personal docente, y para ello es necesario explotar todos los recursos posibles. El pensamiento político del líder histórico es una herramienta que pocas veces se explota al no tener el pleno conocimiento de su obra, que es gigantesca, y de cómo llevarla al trabajo político e ideológico en el aula.

El objetivo del trabajo es contribuir a la formación política e ideológica de los docentes cubanos, mediante la obra política de Fidel, una vez que sus discursos constituyen clases de Historia de Cuba, revelando lo más genuino del pensamiento político cubano de avanzada que, sin duda, constituye una plataforma programática de obligada consulta para los docentes en la actualidad, siempre que se quiera desarrollar valores y trabajo político e ideológico.

Desarrollo

Las batallas libradas por los pueblos, en aras de una causa justa, aunque a veces se hayan perdido transitoriamente, nunca han sido inútiles. Tampoco se podrá borrar de la memoria del pueblo las ideas y el ejemplo de aquellas personalidades que han encarnado los grandes anhelos y necesidades de una nación o de una época.

Esos hombres mueren físicamente, pero su legado pasa a enriquecer el acervo de las generaciones sucesivas, y nuevas personalidades se hacen portadoras de esa herencia histórica, vinculándolas a las ideas más avanzadas de los nuevos tiempos. Solo con ese constante relevo puede explicarse el curso siempre ascendente del progreso social.

Alguien dijo una vez, Varela enseñó a pensar a todos los cubanos, pero uno de los que aprendió lo que él decía, fue Fidel. Para el trabajo político de los docentes, el conocer la obra política de Fidel, le ayudaría a preparar los matutinos, los temas políticos que tienen que vincular con las clases, aportaría en los turnos de reflexión y debate en la fundamentación histórica de la historia de la patria, mediante los diferentes momentos y etapas desde 1950 hasta la actualidad.

La compilación que se propone a los docentes, resultará una herramienta significativa en la preparación metodológica de los claustros de profesores en el componente Político e ideológico, pues mediante el recorrido de los diferentes discursos trascendentales del líder histórico, se revela lo más significativo de la historia de Cuba y la correspondencia entre una generación (iniciadora del proceso revolucionaria) y la otra (continuadora de ese legado).

La obra política de Fidel -aunque ya había hecho uso de la palabra en varios discursos en su vida de estudiante universitario- llega con el juicio por los sucesos del Moncada y, en particular, La historia me absolverá.

En el juicio, los moncadistas responden al tribunal con impresionante valentía: “Sí, vinimos a combatir por la libertad de Cuba, y no nos arrepentimos de haberlo hecho”.(1) Y Fidel augura con acierto: “El haber concurrido a aquella cita el 26 de Julio, constituirá en no lejanos días el mayor timbre de gloria de un cubano”.(2)

En cada línea de La historia me absolverá se respira un aliento martiano. Allí se tropieza continuamente con Céspedes, Agramonte, Martí, Maceo y Gómez; con Yara y Baire, con recuerdos trascendentes de la epopeya independentista.

En la obra, el docente puede encontrar los elementos que le ilustren de una forma elocuente las arbitrariedades, atropellos, injusticias y crímenes de la tiranía; así fundamentó Castro F las medidas que se proponía llevar a cabo la Revolución si lograba la victoria.

Tras el triunfo revolucionario, el 28 de enero de 1960 Castro F realizó un discurso en la histórica entrega del Cuartel Moncada al Ministerio de Educación, en Santiago de Cuba y preguntó: “¿Quiénes fueron los primeros que lucharon para convertir las fortalezas en escuelas? Los mambises, Céspedes, Agramonte, Gómez, Maceo…”.(3) Que sutil, escogió el aniversario 107 del natalito de Martí para tan grande proeza. Más adelante refirió: “Hoy Santiago está feliz; hoy toda Cuba está feliz; hoy los niños están felices; hoy que se conmemora el 107 natalicio del Apóstol se inaugura este Centro Escolar que se llama ´26 de Julio´; hoy el Apóstol está contento; hoy nuestros muertos están contentos; hoy es un día feliz de la patria”.(4)

El 13 de marzo de 1962 realizó un discurso en el acto homenaje a los mártires del Asalto al Palacio Presidencial y preguntó: “¿Qué ideas influyeron en Martí, Gómez y Maceo? Qué ideas serían sino las de aquel tiempo. (…) Todo el acervo del progreso humano, debemos recogerlos en la historia de la humanidad”.(5)

Ocho años más tarde en la velada conmemorativa de los cien años de lucha, en la Demajagua, el 10 de octubre de 1968 realizó un discurso en el que fundamentó ese hecho, no solo como el nacimiento de la nacionalidad cubana, sino de la historia de la patria. Y refirió, “Hoy nuestro pueblo conmemora aquella fecha al cumplirse 100 años. Y este primer centenario del inicio de la lucha revolucionaria en nuestra patria es para nosotros la más grande conmemoración que ha tenido lugar en la historia de nuestro país.”(6) Más adelante preguntó: “¿Qué significa para nuestro pueblo el 10 de Octubre de 1868? Significa sencillamente el comienzo de 100 años de lucha, el comienzo de la revolución en Cuba, porque en Cuba sólo ha habido una revolución: la que comenzó Carlos Manuel de Céspedes el 10 de octubre de 1868 y que nuestro pueblo lleva adelante en estos instantes”.(7)

El 19 de abril de 1971 asistió al décimo aniversario de la Victoria de Playa Girón, y en su discurso demostró la continuidad del carácter antimperialista y antianexionista del pueblo de Cuba al decir: “Corresponde a nuestro país una gran responsabilidad, corresponde a las generaciones venideras seguir el camino trazado en nuestras luchas de independencia, seguir el camino trazado por Martí en Dos Ríos, sería el camino a seguir por los combatientes y héroes de Girón, seguir el camino que nos trazan las realidades del mundo en que vivimos, lo cual sería seguir el camino que nos trazan las leyes de la historia”.(8)

Pocos días después, el 25 de abril de 1971, es invitado a la clausura del Primer Congreso Nacional de Educación y al hacer uso de la palabra resaltó el pensamiento de Marx y Martí en el proceso de construcción del socialismo en Cuba, lo que demuestra una continuidad de pensamiento, al decir: “…la inauguración de las Secundarias Básicas en el campo reúnen dos ideas que son fundamentales, dos ideas que son similares, y las dos emanadas de dos grandes pensadores: de Marx y de Martí. Ambos concibieron la escuela vinculada al trabajo, es decir, concibieron la escuela como el centro donde se forma el joven para la vida”.(9)

El primero de mayo de 1973, con motivo del Día Internacional de los Trabajadores en su discurso reveló la proeza sin igual que realizó el pueblo para librarse del yugo, primero español y, posteriormente norteamericano al decir: “Hay un punto, un momento de la historia en que ese proceso de explotación absoluta comienza a cambiar. Y ese punto de la historia, ese momento de la historia, fue el Primero de Enero de 1959”.(10)

Días después, el 11 de mayo de 1973, participó en la velada solemne en el cementerio por la caída en combate del Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz en la ciudad de Camagüey. El líder histórico resaltó el papel decisivo protagonizado por las tropas mambisas al mando de Agramonte, su espíritu de lucha, su entereza y amor a la patria, a la vida y sobre todo, su fe inquebrantable en la victoria definitiva de la patria, destacando “…el precedente más honroso y más legítimo de la lucha por la independencia de Cuba, es sin duda Ignacio Agramonte”.(11)

Dos meses después, el 26 de Julio de 1973, participó en el acto por el XX Aniversario del ataque al Cuartel Moncada, habla de la labor que en la sociedad después del triunfo ha tenido el sistema educacional cubano, mediante sus docentes, los cuales han desarrollado un trabajo ideológico en las nuevas generaciones para fomentar la historia patria y contribuir con su rol decisivo a la formación del hombre nuevo al que aspira nuestra sociedad; en correspondencia expresó “…nunca podrá existir 26 de Julio sin una vanguardia preparada, presta a defender e inculcar la prédica luminosa de José Martí, el ejemplo vigoroso y la obra inmortal de Céspedes, Agramonte, Gómez, Maceo y tantos hombres de las luchas pasadas en las nuevas generaciones, esa vanguardia son los miles de maestros y profesores formados por la Revolución”.(12)

En 1975, el 20 de julio, con motivo de la inauguración del Campamento de Pioneros “José Martí” en Tarará, el líder histórico reconoció la importancia de que el nombre que debería tener el campamento tendría que guardar relación con lo más genuino de la historia, que identificara la labor del maestro, que es la de formar las nuevas generaciones en los principios del Marxismo-Leninismo y las ideas de los próceres de la Patria. Después de un intercambio con los presentes expresó: “…creo que esta tarde feliz de hoy ha sido un dignísimo homenaje a José Martí. Y cuando decimos José Martí, a su nombre están unidos todos los que lucharon en las distintas épocas por la libertad, por el bienestar y la felicidad de nuestro pueblo”.(13)

En la medida que avanzaba la Revolución fue necesario hacer un grupo de transformaciones para perfeccionar la labor de los docentes y ampliar el acceso a las carreras pedagógicas, con ese fin se constituyó el primer Destacamento Pedagógico “Manuel Ascunce Domenech”.

En el acto de graduación del 1er contingente el 20 de julio de 1977, Fidel resaltó la función que le tocaría desempeñar a la enseñanza media ya que la aspiración por alcanzar el sexto grado estaba casi culminada, y que a partir de ahí le corresponderían nuevos retos a los docentes de secundaria básica y al sistema educativo en general y que en la medida en que se preparaba a la sociedad, tenían que preparase los docentes, entonces planteó: “…pienso que en un futuro no lejano, quien tenga solo un sexto grado podrá considerarse una especie de analfabeto relativo. ¿Qué serán seis grados para los conocimientos de una sociedad que avanza dinámicamente, que progresa por día, que cambia, en un mundo que cambia también por día? ¿Qué serán seis grados para enfrentar esas realidades?”.(14)

Después de años de estabilidad económica y comercial con la URSS, el país había exhibido índices en educación, salud, deporte y bienestar social comparable solo con países desarrollados. Pero a partir de los acontecimientos ocurridos en Europa del Este con los países que integraban el bloque socialista y la propia URSS, comenzó a cambiar la realidad cubana y con ella la forma de proyectar y de hacer las cosas.

Al cumplirse el XXX Aniversario del triunfo de la Revolución, en el acto central el 4 de enero de 1989, Fidel resaltó la función de la educación y sus docentes y los convocó a que en ese momento, más que nunca, había que salvar la historia de la patria y combinarla con las clases y otras actividades que desarrolla la escuela y el docente, porque estaba a las puertas el colapso del campo socialista; por ello, reconoció el papel que le correspondería desarrollar a la educación cubana mediante sus docentes, y expresó: “…nuestra Revolución ha sido creadora, y yo diría que alguna de las cosas que hemos hecho, las hemos hechos nosotros, solos, no las han hecho otros países; y si tenemos que dar mérito, ese sería para nuestro glorioso sistema educacional cubano, que ha forjado una patria nueva, la patria de Martí, del Che, de Camilo, de veras, realmente, nos enorgullecemos de eso”.(15)

En 1990, al clausurar el Congreso de Pedagogía, el 9 de febrero en Ciudad de La Habana, manifestó que la educación tenía que atemperarse a la época, los docentes también; que vendrían momentos muy difíciles en que los profesores tendrían que apelar a la historia, pero con creatividad, para poder con argumentos mantener la confianza en el proceso revolucionario iniciado en 1868 por Céspedes y Agramonte y así mantener la calidad del sistema educativo cubano. En correspondencia con ello alertó: “…la unidad, la confianza y el apego a la historia es lo que determinará si nos salvamos o no, en eso ustedes los educadores serán los principales protagonistas”.(16)

En carta dirigida a los educadores con motivo de su día, el 22 de diciembre de 1994, resaltó la labor de los docentes y su función decisiva en la formación del hombre nuevo y de la sociedad socialista a partir del trabajo político que habían realizado, en ese sentido reflejaba la misiva: “…cuando también se han hecho más difíciles las condiciones de trabajo, tanto de carácter general como profesional, vemos en ustedes los fieles seguidores del más grande de los educadores cubanos, José Martí”.(17)

En 1997 participó en la clausura del encuentro 20 años después de la creación del Destacamento Pedagógico “Manuel Ascunce Domenech” el 30 de mayo en Ciudad de La Habana y resaltó la función de la Patria, que no podía haber patria sin fomento de valores, sin trabajo político sistemático; y que esa labor la habían desarrollado con éxito los docentes, pero que el camino que faltaba por recorrer era, quizás, mucho más difícil que el recorrido hasta entonces, en ese sentido abundó: “La revolución suma ya todo esos valores, si usted suma todo esos valores creados por los educadores y los multiplica, los potencia, tiene una ideología mucho más completa, mucho más acabada”.(18) Las intervenciones realizadas por el líder histórico Castro F en diferentes momentos de la historia revolucionaria, muestra una sostenida contribución y en consecuencia un enriquecimiento del pensamiento pedagógico y de la historia nacional y local, que constituye una herramienta indispensable en el trabajo político e ideológico de los docentes. De forma sistemática en su pensamiento político han estado presentes los postulados siguientes:

- El carácter democrático y popular que le concede a la educación, la cual se concreta en que todos los que deseen estudiar tienen el derecho y la misma posibilidad.

- El ejercicio de la crítica, la iniciativa y la creatividad que le impregnó a la educación en el país.

- La evidente coincidencia con el pensamiento pedagógico que le antecedió, en cuanto a la importancia de la educación aún en las condiciones más difíciles y como una vía de resolver los problemas sociales. - Ve a la educación como la vida misma, como una obra ejemplar, pero adaptable en su contexto, sin perder de vista todo el acervo histórico que la hizo posible y la enriquece.

De esta forma, el pensamiento político de Castro F, que resume las ideas más avanzadas puestas en práctica no solo en Cuba, sino en más de 60 países en el mundo, revela los conceptos de solidaridad, hermandad, colectivismo, internacionalismo, sacrificio, patriotismo, desinterés y altruismo, entre otros, que han servido de paradigma no solo a los educadores del país, sino a los educadores de otras latitudes que ven en las ideas y la historia de la formación de la nacionalidad y del proceso revolucionario, la plataforma ideológica para el trabajo como docentes.

Las ideas expuestas en sus discursos, constituyen un sistema ético que trasciende todos los tiempos, y en la actualidad cubana posee una extraordinaria significación educativa que debe ser aprovechada por los docentes en su labor diaria, cuyo objetivo es esencialmente humanista, que es el de formar a las nuevas generaciones.

Otro basamento del pensamiento político de Castro F, se encuentra en el código de ética profesional del educador cubano, que refleja el modo de actuación del docente, para el cual debe constituir el punto de partida del carácter, la actitud y la consagración al trabajo que debe caracterizar al educador cubano, estás son:

"• Fidelidad a la causa de la patria socialista de la Revolución Cubana y al internacionalismo en la labor pedagógica.

'Educar es depositar en cada hombre toda la obra humana que le ha antecedido: es hacer a cada hombre resumen del mundo viviente, hasta el día en que vive: es ponerlo al nivel de su tiempo, para que flote sobre él, y no dejarlo debajo de su tiempo, con lo que no podrá salir a flote; es preparar al hombre para la vida…'

"• Actitud consciente y responsable ante el trabajo pedagógico.

'…la primera libertad, base de todas, es la de la mente: el profesor no ha de ser un molde donde los alumnos echan la inteligencia y el carácter, para salir con sus lobanillos y jorobas, sino un guía honrado, que enseña de buena fe lo que hay que ver, y explica su pro lo mismo que el de sus enemigos, para que se le fortalezca el carácter de hombre al alumno, que es la flor que no se ha de secar en el armario de las universidades…´ "• Colectivismo pedagógico (correlación entre lo individual y lo social en el trabajo del maestro).

'Al venir a la tierra, todo hombre tiene derecho a que se le eduque, y después, en pago, el deber de contribuir a la educación de los demás…'

"• Humanismo pedagógico, principio rector de la labor pedagógica, penetra e integra los restantes principios. 'La enseñanza, ¿quién no lo sabe?, es ante todo una obra de infinito amor."(19)

En correspondencia a lo anterior, la ministra de Educación, Gobiella E E, en una audiencia televisiva en la mesa redonda con motivo del inicio del curso escolar explicó, “…el educador deberá seguir la concepción que fundamenta su desempeño; es el máximo responsable del proceso educativo y del proceso de enseñanza-aprendizaje, así como de la dirección de las actividades que oriente dentro o fuera de la escuela (…) el docente debe ser preceptor y orientador de sus alumnos y tener presente, que el modelo de escuela que se quiere, es aquel en que el alumno pasa a ser el centro del proceso educativo”.(20)

Al atender el trabajo político e ideológico como prioridad primordial destacó, “…los docentes deberán utilizar metodologías que propicien el diálogo, la reflexión y que promuevan el ejercicio del pensar, enseñen a sus alumnos a ´aprender a aprender´ y que vinculen la historia y los acontecimientos más importantes del proceso revolucionario con su labor, donde el estudio y valoración de personalidades históricas, sin dudas le ayudaría a completar su labor en ese sentido”.(21)

Como precisa Gobiella E E, es evidente la necesidad de potenciar el trabajo político e ideológico de los docentes a partir de la aprehensión de ideas y conceptos de figuras emblemáticas del proceso revolucionario cubano, en el que el pensamiento político del líder histórico, ocupa un lugar cimero, y sin dudas aportaría al desarrollo de la labor del docente, así como a su proyección humanista y, además, favorecerá a alentar comportamientos éticos y promover la reflexión y el debate sobre temas de gran trascendencia en las páginas gloriosas de la historia patria.

Conclusiones

- Las principales ideas que sustentan el pensamiento político del líder histórico de la Revolución se encuentran inmersas en sus discursos. - Su pensamiento político constituye un aporte a la tradición pedagógica cubana e introduce como novedad La historia me absolverá documento de trascendencia jurídica.

- La autenticidad de su pensamiento político se refieren a su: Concepto de educación: asumiendo la educación como proceso de integración y no de adaptación del ser humano a su contexto y el papel transformador de la educación en la sociedad. Su preocupación por la realidad del docente: asumiendo que toda preparación y conocimiento sobre la historia de la patria es lo que les permitirá ser mejores y formar a las futuras generaciones mediante una conciencia política e ideológica excelsa.

Referencias

(1)CASTRO F. La historia me absolverá. La Habana, Cuba: Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado; 1993. p.32.

(2)ROJAS M. La Generación del Centenario en el juicio del Moncada. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1979. p.52.

(3)CASTRO F. En julio como en enero. La Habana, Cuba: Editado por el Departamento de Relaciones Públicas del Ministerio de Educación; 1960. pp.19,21,22,30,32.

(4)CASTRO F. En julio como en enero. La Habana, Cuba: Editado por el Departamento de Relaciones Públicas del Ministerio de Educación; 1960. pp.19,21,22,30,32.

(5)CASTRO F. Obra Revolucionaria No. 9. La Habana, Cuba: Imprenta Nacional de Cuba; 1962. pp.10-11.

(6)CASTRO F. Discurso pronunciado en la velada conmemorativa de los 100 años de lucha, 10 de Octubre de 1868. T.I. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1975. pp.60-96.

(7)CASTRO F. Discurso pronunciado en la velada conmemorativa de los 100 años de lucha, 10 de Octubre de 1868. T.I. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1975. pp.60-96.

(8)CASTRO F. Ediciones COR No. 1. La Habana, Cuba: Instituto Cubano del Libro; 1971. pp.7-8, 26-27.

(9)CASTRO F. Ediciones COR No. 2. La Habana, Cuba: Instituto Cubano del Libro; 1971. pp.32-33.

(10)CASTRO F. Discurso pronunciado el 1ro. de mayo. Periódico Granma, 2 de mayo, 1973.

(11)CASTRO F. Ediciones COR No. 5. La Habana, Cuba: Instituto Cubano del Libro; 1973, pp.16,20,21.

(12)CASTRO F. Discursos. Santiago de Cuba. XX y XXV Aniversario del Asalto al Cuartel Moncada, 1973-1978. La Habana, Cuba: Editora Política; 1978. pp.11-12-30,31.

(13)CASTRO F. Ediciones COR, jul-sep. La Habana, Cuba: Departamento de Orientación Revolucionaria del CC del PCC; 1975. pp.24-25.

(14)CASTRO F. Ediciones COR, jul-sep. La Habana, Cuba: Departamento de Orientación Revolucionaria del CC del PCC; 1977. p.19.

(15)CASTRO F. Lealtad a los principios. La Habana, Cuba: Editora Política; 1989. pp.35-36.

(16)CASTRO F. Ediciones COR, No. 1, 1990. La Habana, Cuba: Editora Política; 1991. pp.7, 53-54, 71-71.

(17)CASTRO F. Carta dirigida a los educadores. Periódico Granma, La Habana, 21 de diciembre de 1994. p.6.

(18)20 años después de la creación del Destacamento Pedagógico “Manuel Ascunce Domenech”. La Habana, Cuba: Editado en la Imprenta de la Dirección Política de las FAR; 1997. p.14.

(19)CHACÓN N. Martí y Fidel en el código de ética profesional del educador cubano. 2008. Disponible en: URL http//www.jose marti.cu (Consultado octubre 22, 2013).

(20)GOBIELLA E E. Intervención de la ministra de Educación en los preparativos del curso escolar 2014-2015. Periódico Granma, La Habana, 21 de agosto de 2014, p.1.

(21)GOBIELLA E E. Intervención de la ministra de Educación en los preparativos del curso escolar 2014-2015. Periódico Granma, La Habana, 21 de agosto de 2014, p.1.

(22)GOBIELLA E E. Intervención de la ministra de Educación en los preparativos del curso escolar 2014-2015. Periódico Granma, La Habana, 21 de agosto de 2014, p.1.

Bibliografía

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