Varona

No.59  Julio-Diciembre, 2014.    ISSN: 1992-82

Editorial


La educación es como un árbol: se siembra una semilla y se abre en muchas ramas. Sea la gratitud del pueblo que se educa árbol protector, en las tempestades y las lluvias, de los hombres que hoy les hacen tanto bien. Hombres recogerá quien siembre escuelas.(1)

José Martí

El Héroe Nacional José Martí expresó que "...cuando se tienen los ojos fijos en lo alto, ni zarzas ni guijarros distraen al viajador en su camino"(2); tal pareciera que, al cabo de 50 años de la fundación de la Universidad en Ciencias Pedagógicas "Enrique José Varona", su comunidad universitaria se ha caracterizado por tener los ojos fijos en lo alto, fijos en función de que la formación del profesional de la educación se corresponda con la política trazada por la Revolución Cubana y de su lucha por una sociedad más justa y equitativa, bajo los principios del culto a la libertad plena del hombre, a la igualdad, a la solidaridad y a los adelantos de la ciencia y la tecnología.

El trabajo meritorio del claustro de profesores ha permitido llegar a este feliz aniversario con la satisfacción del deber cumplido, habiendo dado un total de 65 975 egresados como educadoras de círculos infantiles, maestros y profesores para los diferentes niveles de educación, y para otras universidades de ciencias pedagógicas del país y del mundo.

Es tiempo de regocijo porque, junto con las actividades por el 50 Aniversario, la Universidad recibió la evaluación externa por la Junta de Acreditación Nacional y resultó "Universidad Certificada", al tiempo que fueron evaluados en la misma etapa la Carrera de Logopedia de la Facultad de Educación Infantil, recibiendo la evaluación de "Excelente", así como el Programa de formación doctoral, con calificación de "Certificado". Todo ello ha sido fruto de la trayectoria de trabajo de la Institución, de su magnífico claustro, de competencia profesional y científica, del esfuerzo de todos sus trabajadores y de los resultados alcanzados en los últimos cinco años, de constante laboriosidad, de consagración sin límites y mucha ciencia y ternura puestas en función de formar a un mejor profesional de la educación para la Capital. Por ello, y con el mismo compromiso, responsabilidad y calidad, seguiremos formando maestros  para el futuro de la Patria y de la Revolución, y siguiendo la frase que encabeza este editorial: seguros de esas semillas, recogeremos muchos frutos, porque "Hombres recogerá, quien siembre escuelas".

 


(1)MARTÍ J. Obras completas. T. 7. La Habana, Cuba: Editorial Nacional de Cuba; 1963. p.157.

(2)MARTÍ J. Obras completas. T. 7. La Habana, Cuba: Editorial Nacional de Cuba; 1963. pp.267-268.