Varona

No.57   Julio-Diciembre, 2013.    ISSN: 1992-82

La producción audiovisual con fines educativos en estudiantes de la carrera Marxismo-Leninismo e Historia

The audiovisual production with educational ends in students of the Marxism-Leninism career and History

MSc. Yosdey Dávila Valdés. Asistente. Facultad de Ciencias de la Educación Media. Universidad de Artemisa Artemisa, Cuba.

Correo electrónico: yosdey@hab.uci.cu

Dr.C. Argelia Fernández Díaz. Profesora Titular. Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”. La Habana, Cuba.

Correo electrónico: argeliafd@ecpejv.rimed.cu

Recibido abril de 2013   Aceptado julio de 2013


RESUMEN

El nuevo papel de los profesores ante la presencia de los medios audiovisuales en la sociedad, exige de su formación como comunicador, su sensibilidad estética y cultural y el conocimientos del lenguaje de los medios, para hacer, del proceso pedagógico, un acto creativo, entretenido y pueda competir con el mundo de imágenes, en el que se desarrollan sus estudiantes, incluso, en ocasiones, en contraposición con los intereses educativos. El propósito fundamental del trabajo es destacar la importancia que revierte, a partir de las exigencias actuales, la formación de los profesionales de la educación de la carrera de Marxismo-Leninismo e Historia para el empleo de los medios audiovisuales.

PALABRAS CLAVE: medio audiovisual, formación inicial, producción audiovisual con fines educativos.

ABSTRACT

The new paper of the professors before the presence of the audiovisual means in the society, demands from its formation like comunicador, its aesthetic and cultural sensibility and the knowledge of the language of the means, to make, of the pedagogic process, a creative, amusing act and it can compete with the world of images, in which its students are developed, even, in occasions, in opposition with the educational interests. The fundamental purpose of the work is to highlight the importance that reverts, starting from the current demands, the formation of the professionals of the education of the career of Marxism-Leninism and History for the employment of the audiovisual means.

KEYWORDS: Audiovisual equipment, initial training, audiovisual production for educational purposes.


Introducción

Las nuevas condiciones tecnológicas y las demandas sociales a los centros de educación superior en función del desarrollo integral de los pueblos  son algunas de las exigencias para pensar en las potencialidades de los medios audiovisuales, como vías para lograr un aprendizaje activo desde la universidad, particularmente en las universidades que forman profesionales de la educación, por el gran encargo social que poseen, ya que estas prácticas pueden contribuir a la transformación que necesita la escuela cubana actual.

La formación inicial pedagógica tiene la necesidad de propiciar que el futuro pedagogo esté a tono con su tiempo y, de esta forma, poder contribuir coherentemente a la formación de las futuras generaciones como actor y autor de ese proceso. Por ello, la formación para el empleo de los medios audiovisuales debe ser una prioridad de las universidades, que tienen la responsabilidad de formar maestros, a partir de los efectos sociales y culturales de los medios de comunicación, así como por sus implicaciones educativas.

Esta necesidad hace pensar en la formación de los profesionales de la educación en Cuba, para contrarrestar los efectos de estos medios desde la escuela, pero sobre todo para el profesional de Marxismo-Leninismo e Historia. Este debe comunicar enfoques, tendencias y lograr que la clase de las asignaturas del área de ciencias sociales en el nivel medio se convierta en un debate fértil, que permita que los estudiantes lleguen continuamente a conclusiones, que sean espacios predominantemente de diálogo y no de monólogo, y que puedan aspirar a que todos los adolescentes y jóvenes desarrollen sus potencialidades individuales para el esperado crecimiento personal, social y profesional permanente, a favor de los ideales revolucionarios que se aspiran.

La función que desempeñan estos medios en la sociedad cubana requiere una formación en cuanto a sus instrumentos técnicos, sistemas simbólicos y habilidades de manipulación, pues mediante su uso se crean expectativas, actitudes y modos de analizar la cultura circundante. Sus sistemas simbólicos propician el desarrollo de habilidades cognitivas en los sujetos.

El profesional egresado de esta carrera debe estar preparado para neutralizar los poderosos artificios de que disponen los medios masivos para encubrir sus intereses y disfrazarlos de la opinión pública. El reclamo se orienta hacia una clase de Historia, Educación Cívica o Cultura Política que enseñe una visión de los medios en calidad de espacios de comunicación y configuración de prejuicios, concepciones de política, familia, cultura o sexualidad. Queda, entonces, justificada la necesidad de reivindicar la universidad como escenario de aprendizaje que permita el ejercicio creativo y crítico para la realización audiovisual; de ahí que el objetivo de este trabajo sea: Valorar la importancia de la preparación para la producción de materiales audiovisuales con fines educativos en la formación de los estudiantes de la carrera de Marxismo-Leninismo e Historia.

Desarrollo

El texto de imagen y sonido ha ganado indiscutible presencia en la sociedad cubana y, por tanto, es esencial incluir los medios audiovisuales como materia de aprendizaje en los procesos educativos, tanto formales como informales y, con ello, lograr una interacción deliberada y voluntaria con el mundo audiovisual. La sociedad globalizada y las nuevas transformaciones económicas operadas en Cuba le imponen a las Ciencias Pedagógicas los efectos negativos que genera el texto audiovisual que consumen los niños y los jóvenes cubanos, como poderoso mecanismo de socialización.

La sociedad le exige, a la universidad que forma profesionales de la educación, un egresado que sea capaz de desenvolverse creativamente en un mundo en el que prima la tecnología. Ello contribuye a transformar la realidad escolar y a establecer una relación bilateral entre el proceso pedagógico y el entorno social, en la medida que el primero se enfrenta a los avances tecnológicos de la sociedad y esta, a su vez, le impone requerimientos que permitan alcanzar nuevos avances.

Es necesario incorporar, a la formación inicial pedagógica, nuevas formas de comunicación, nuevos estilos de aprendizaje, nuevas vías de hacer cultura. Estas demandas enriquecerían el modo de actuación profesional de los educandos y los acercaría a las exigencias sociales actuales.

Hoy, paradójicamente, con la presencia y la función que se asigna a los medios audiovisuales en la vida escolar, en los currículos en las universidades que forman profesionales de la educación solo se asoman como un tema de escasas horas teóricas dentro de una unidad, de una asignatura, en uno de los años de estudios en el currículo base. Es vital, pues, reflexionar acerca del cómo encarar el debate en Cuba sobre el nuevo papel del profesional de la educación y su formación inicial, ahora que cuenta, en su aula, con la televisión y el video. Proponer una polémica sobre el nuevo papel del maestro lleva en sí una primera definición que está precisamente determinada por reconocer al profesor como parte esencial y determinante del proceso, y no concebir los medios como sustitutos de este.

Barreto I sentencia que “…los maestros en ejercicio, solo a través de la capacitación y la educación de postgrado, podrán ponerse a la altura de estos tiempos de imagen y sonidos, pero lo que no nos perdonará el futuro es que no asumamos desde la ciencia una transformación curricular para resolver esta contradicción”.(1)

La formación en medios audiovisuales en el proceso de formación inicial pedagógica debe tener ante todo, el propósito de lograr la comprensión consciente de que ninguno de estos medios sustituyen al maestro, sino que permiten realizar aquello que no está a su alcance directo, con imágenes y sonidos que no se pueden lograr en cada aula tradicional, que posibilita la representación de fenómenos mediante la ficción, la demostración de fenómenos naturales; lleva al aula lo pequeño, lo excesivamente grande, lo distante, y representar modelaciones de lo abstracto.

Los autores de esta investigación consideran a la formación para el empleo de los medios audiovisuales como el proceso de apropiación creadora de contenido audiovisual desde lo estético y lo técnico, la intencionalidad, las dinámicas de control y producción, hasta los receptores y el contexto social. Prepara al futuro profesor para introducir, de forma crítica, decisoria y reflexiva, estos medios en un contexto específico de actuación profesional. Reconoce y articula coherentemente la selección, el diseño y la utilización del audiovisual en los procesos formativos. Tiene un enfoque personológico.

La formación del futuro profesional de la educación para el empleo de los medios audiovisuales debe tener en cuenta la diferencia que existe entre una formación para la recepción, para la “lectura” de los medios (como generalmente se ha hecho hasta ahora en las universidades pedagógicas) y la producción creativa o formación de habilidades para la “escritura” de mensajes. Lograr ambas aspiraciones en un proceso íntegro y participativo, precisan un redimensionamiento de la función del futuro profesor.

La práctica de Cuba en la producción de materiales audiovisuales con fines educativos adolece de integración y sistematización teórica; se conduce empíricamente a partir de la experiencia aislada de los educadores y directivos que han sido convocados para su sustento. Esta problemática se evidencia cuando, en los materiales audiovisuales educativos que se producen, a pesar de existir un adecuado tratamiento del contenido tratado, generalmente se pierde la concreción de un mensaje audiovisual eficiente para el proceso de enseñanza-aprendizaje y persiste la falta de un lenguaje audiovisual para expresarlo.

Otra contradicción que hoy persiste es la relación entre la televisión y los educadores, pues a los educadores les interesa, sobre todo, los valores pedagógicos, mientras que a los productores, centrados en el medio de la comunicación, les preocupa captar y entretener a la audiencia.(2)

Cabero J insiste en que una de las funciones más significativas que tendrán que desempeñar los profesores en estos nuevos entornos de formación se refiere al diseño de medios,(3) ya que en ellos el profesor se convierte no solo en un consumidor de medios, sino en un diseñador y productor de recursos adaptados a las necesidades de sus estudiantes. Desde la óptica de este pedagogo, no se considera que el profesor deba ser un especialista en técnica audiovisual; sino un profesional de la educación que pueda diseñar mensajes audiovisuales e incorporarlos como aliados de su proceso pedagógico, y alerta que si no introduce en sus clases los medios audiovisuales, puede marginar con su no utilización, evidentemente sin querer hacerlo, a un grupo de estudiantes por no ofrecerle un cúmulo de TICs con las que puede interaccionar.

En definitiva, consiste en contemplar al medio de acuerdo con el planteamiento comunicativo formulado por Cloutier, como self-media(4); es decir, como un medio que facilita la transición de ser solo receptores de información a emisores de mensajes. Los medios técnicos de comunicación, cuando se abaratan, pasan de ser mass- medio a self- medio, esto es cuando el usuario de cierta información maneja y controla medios, siendo capaz de emitir un mensaje de dicho medio. Aquí, el usuario se vuelve emisor y receptor.

Cuando se habla de producción audiovisual, la primera idea que aparece es la de mensajes mediados con elevada calidad técnica, que se realizan generalmente por profesionales ajenos al contexto educativo inmediato (teleprofesores, guionistas, directores de TV, entre otros), frente a los cuales el profesor y los estudiantes son solo receptores consumidores de estos, y donde las funciones que desempeña el medio son las de motivación y transmisión de información.

A pesar que el Estado cubano ha realizado un gran esfuerzo para que cada escuela posea una videoteca que contenga filmes, videoclases y otros materiales, “…no siempre el profesor dispone de los programas en video, que satisfagan todos los requerimientos de la asignatura o disciplina con la que trabaja y es cuando surge el motivo para proponer la realización de aquel que se corresponda con las necesidades del proceso pedagógico que él dirige.(5) Es entonces, cuando la producción audiovisual realizada por los profesores que parte del diagnóstico de su grupo y tiene en cuenta sus principales necesidades, lo que permite lograr una mayor contextualización del mensaje que expresa. Pero si la formación de profesores no responde a esta demanda entonces el docente estará intelectualmente mutilado para enfrentar esta aspiración.

Mediante una producción audiovisual, el profesor puede reflejar, de forma activa, un nuevo conocimiento que sintetiza la experiencia histórico-social de la humanidad. Pero es necesario destacar que, por este mismo motivo, estas producciones están siempre mediatizadas por el sujeto que los elabora y en ellas estarán presentes sus puntos de vista, criterios y concepciones de esa realidad reflejada, elemento que permite el desarrollo de la creatividad de este profesor.

Los medios exigen distintas habilidades en los profesores para la codificación y la decodificación de los mensajes. Consiguientemente, se puede sugerir que el tipo de estructuración simbólica utilizada por el medio tenderá a desarrollar, en los sujetos, unos procesos y habilidades cognitivas sobre otras.

Según el pedagogo canadiense Marton P, la organización de mensajes coloca todos los problemas en la conformación que debe hacerse de forma metódica, sistemática y sistémica; según algunas etapas y operaciones bien precisas, a fin de obtener una forma interesante y eficaz que es el proceso de la visualización pedagógica. Esta organización de mensajes centra también el problema en la selección correcta de signos disponibles.(6) Así, los principales signos disponibles son aquellos concernientes al audio (imágenes sonoras, ruidos, música); el visual (imágenes visuales: fijas o animadas) y el lingüístico (palabras habladas o escritas) Esto nos lleva a un verdadero sistema de signos, a partir de los cuales son organizados y construidos los mensajes.

Sobre la forma de presentación de los mensajes, insiste Morales C, al señalar que los aspectos representacionales de los medios se encuentran imbuidos en la manera de presentar los contenidos de los mensajes. Por otro lado, estas representaciones necesariamente deben contar con cierto paralelismo con las representaciones internas de los receptores, las cuales, al menos, se encuentran enmarcadas en dos formas: las imágenes o figuras, y las proposiciones o enunciados.(7)

A partir de las consideraciones anteriormente señaladas, se puede llegar a la conclusión que, ante el futuro profesor, se presentan dos problemáticas generales: ¿qué debo presentar en el material? y ¿cómo debo presentarlo?

Es entonces, cuando el estudiante en formación debe esbozar el material a partir de la construcción de significados, después de una preparación previa que le permite comunicar desde su individualidad, lo que necesita en su clase y el audiovisual se convierte en un valioso aliado en el proceso de enseñanza-aprendizaje, que entiende y atiende las potencialidades individuales y debe seguir un orden de complejidad ascendente que transita del discurso informativo al discurso comprensivo y, de ahí, al discurso crítico.

Se trata de buscar vías que contribuyan a hacer más efectivo el proceso de dirección de la actividad docente y lograr posiciones cada vez más activas y conscientes, en el proceso de asimilación del conocimiento de las asignaturas del área de las ciencias sociales, donde el estudiante reflexione crítica y creativamente sobre cuestiones históricas, político-ideológicas diversas en diferentes contextos, que confronten puntos de vista diversos, valoren diferentes perspectivas de un mismo problema, desarrollen su actividad decisoria con fuentes diversas sobre la base de la necesaria relación entre lo cognitivo y lo afectivo, lo probatorio y lo emocional.(8) Por ello, es que la producción audiovisual con fines educativos en la formación inicial pedagógica no solo debe verse como las habilidades necesarias para dirigir en un futuro un proceso pedagógico eficiente, sino además como herramienta empleada en su propio proceso de formación.

El pedagogo ibérico Martínez F señala que la posibilidad de realización de materiales audiovisuales por los estudiantes en el proceso de enseñanza-aprendizaje posee un alto valor educativo y dirige su función, no en la calidad técnica del producto alcanzado, "…sino en el proceso seguido para su producción, la experiencia acumulada y el valor del trabajo personal”.(9)

Si se analiza más a fondo la vía de las producciones que puedan ser realizadas por los estudiantes, la principal ventaja radica en las posibilidades que ofrece para contextualizar el medio y los mensajes por él transmitidos, de manera que el producto que se obtenga responda a las necesidades de los implicados en su diseño y producción, y tenga pleno sentido y significado para estos.

En consecuencia, con este tipo de producciones se persigue que los estudiantes que se forman como profesores, a partir de su apoyo en las posibilidades técnicas del medio y de acuerdo con las necesidades que el grupo se plantee, analicen y codifiquen su realidad circundante, de forma que se diseñen y produzcan materiales que faciliten una forma específica de uso, en función de sus necesidades y contexto de utilización.

Los medios audiovisuales promueven la admiración y sumisión del público consumidor. Generalmente no fomentan una actitud crítica, sino más bien pasiva. Poco a poco, en las mentes de los receptores se va internalizando la idea de que “lo que dice la televisión es siempre cierto”. En consecuencia, la universidad y, sobre todo, los profesionales de la carrera Marxismo-Leninismo e Historia, se enfrentan a la compleja tarea de desmitificar los medios, por la avalancha subversiva que consume la sociedad. La producción audiovisual, vista de este modo, se convierte en una herramienta ideal para ayudar a ver y entender las estrategias “ocultas” de los medios de comunicación. Experimentar en primera persona sus procesos de producción de contenidos, facilita el conocimiento de cómo proyectan recreaciones y representaciones para que parezcan verosímiles y creíbles.

En cada fase de producción, se afronta una toma de decisiones clave para la construcción del mensaje. Por tanto, esta dinámica creativa sirve para diseccionar un tema y sacarle el máximo partido: acotarlo, documentarse a fondo sobre él, plantear un punto de vista. Asumir la autoría implica perfilar un discurso propio sobre ese asunto, lo que siempre ayuda a entenderlo mucho más. Además, toda creación se dirige a un público específico. La finalidad del acto comunicativo es captar su interés, conseguir que comprenda e interprete, y edificar un espacio de interacción con él. Para que sea posible, es preciso que, desde la autoría, se analice en profundidad el tema y se reflexione sobre cómo enfocar la producción audiovisual.

Numerosos investigadores en el contexto internacional abogan por proyectos como este; por ejemplo, Cabero J plantea: “Téngase en cuenta que estas producciones no deben entenderse como hechos indiscriminados, sino como hechos planificados: diseño, búsqueda y localización de información, guionización (...); en resumen, un volumen de actividades que deben repartirse y asumirse por el grupo clase.(10)

Sin embargo, para que estas producciones puedan desarrollarse como actividades de aprendizaje y contribuyan al desarrollo de un pensamiento creativo, es necesario que los futuros profesionales de la educación tengan un grado de formación en guionización y realización que, sin ser especialistas, les permita utilizarlos e introducirlos en su actividad docente. El currículo propio, como espacio de profundización y complementación en su carácter abierto y flexible, puede ser empleado para propiciar escenarios de formación y desarrollo de las habilidades necesarias que deben tener los estudiantes en formación inicial pedagógica de la carrera Marxismo-Leninismo e Historia.

Romero M plantea, al referirse a la clase de Historia aplicable al resto de las asignaturas del área de ciencias sociales, que “…es útil que el alumno adopte posiciones, asuma criterios, tome decisiones, que localice, procese, organice, comunique información histórica, presente datos, pruebas, que infiera (…) desarrolle la imaginación en (…) dramatizaciones (…). Se trata de que el alumno se percate de la naturaleza interna, de la lógica de los acontecimientos que estudia…”.(11) En este sentido, la producción audiovisual puede convertirse en una de las vías para lograr ese encargo, donde la producción creativa o formación de habilidades para la “escritura” de mensajes audiovisuales articulada con el resto de herramientas con las que cuenta el docente, puedan privilegiar el entorno de formación.

Al transportar esta dinámica de producción audiovisual al marco de la educación universitaria pedagógica, se concede valor a la cultura, que ya tienen incorporados a los estudiantes. Los aprendizajes realmente significativos se forman de la activación-regulación de los conocimientos previos y se expresan mediante las experiencias de vida de cada uno. Con ello, se lleva a cabo una forma de aprender basada en crear, proyectar y compartir discursos mucho más vivenciales y, como valiosos.

Cada vez más, están presentes en la vida cotidiana dispositivos que pueden entrar al espacio universitario en función de medios de enseñanza-aprendizaje. Los estudiantes de las aulas universitarias cubanas poseen cámaras fotográficas digitales y de video, grabadoras teléfonos celulares; todos estos medios poseen la ventaja que pueden captar la información de la realidad y brindar la inmediatez, a partir de poder observar los mensajes registrados. El registro audiovisual puede, incluso, emplearse como autoconfrontación por parte del estudiante de las actividades, ejecuciones o habilidades realizadas.

Por ello, el profesor en la universidad debe propiciar nuevas vías de expresión en sus estudiantes donde, sin desterrar la forma tradicional de exponer sus productos investigativos en seminarios y clases prácticas, pueda tener un espacio la producción audiovisual, donde los estudiantes muestren sus productos de aprendizaje de diversas formas, simulación del comportamiento de un fenómeno, presentación en pantalla de diversos objetos para su discriminación, dramatización grabada con incorporación de música y textos, descripción de fenómenos y su representación en gráficos, para el análisis por el estudiante, presentación de acontecimientos para que el estudiante los explique y comente, entre otras variantes, experiencias que enriquecen el modo de actuación profesional pedagógico.

Existen tres alternativas para diseñar materiales audiovisuales en el proceso de enseñanza-aprendizaje, las que se denominan: imitativa, adaptativa e invención creadora:

Imitativa: emplea modelos y criterios establecidos; los símbolos que se usan para comunicar parten de un referente y se trata de realizar, lo más parecido posible, al original.

Adaptativa: se diseñan nuevas formas de emplear recursos ya existentes, adecuándolas a la realidad concreta donde se han de utilizar; parten de una nueva contextualización y se reorganizan a partir de una idea diferente a la original. Se aplican los procedimientos de producción a nuevas situaciones.

Creativa: se diseñan producciones originales con recursos novedosos, no existen modelos anteriores a la producción, el guión es inédito, el material ofrece diferentes puntos de vista. Predomina la actividad productiva de significados. Tiene en cuenta el uso de elementos poco comunes, rompe estereotipos. La producción presenta ideas con criterio propio, no se circunscribe a los elementos y la bibliografía dada, se plantean ideas propias con alternativas de solución y de nuevos enfoques que requieren una reflexión por su interés u objetividad.

La preparación para la producción de materiales audiovisuales con fines educativos en la formación inicial pedagógica es definida por los autores de esta investigación como el proceso que forma parte de la preparación para el empleo de los medios audiovisuales en la formación inicial pedagógica. Sus objetivos parten de las necesidades de los sujetos del contexto pedagógico universitario. Se caracteriza por la interacción de los sujetos participantes, con el propósito de lograr una formación mediática didáctica. Es un proceso altamente creativo y comunicativo de estructuración de mensajes, en el que se articulan, de manera ordenada y sistematizada componentes didácticos, técnicos instrumentales, lingüísticos y semióticos, con el fin de obtener un producto audiovisual educativo.

Los materiales audiovisuales producidos por los estudiantes en su formación inicial pedagógica se deben caracterizar por:

-Responder a objetivos claros y definidos en los currículos escolares (tanto universitario como del nivel medio).

-Favorecer un aprendizaje sistemático y de alta significatividad.

-Se dirige a un receptor específico, preseleccionado y conocido.

-El mensaje busca el logro de un objetivo instructivo-educativo pre-establecido y con carácter desarrollador.

-Tiene una responsabilidad y función específicas y pre-establecidas dentro de un proyecto educativo.

-Sus objetivos y contenidos determinan el género, la propuesta narrativa y la duración del producto audiovisual.

-Considera la imagen y el sonido, su concepción, su composición y su desarrollo, también como contenidos.

-No es un material autosuficiente; requiere compartir funciones y responsabilidades con materiales complementarios (impresos, en línea, software, entre otros), para lograr la intencionalidad preconcebida.

-Debe cumplir exigencias didácticas y del lenguaje audiovisual, transmitir informaciones de tipo cognoscitivo, despertar sensaciones, provocar emociones y permitir la acumulación de experiencias.

-Es objeto permanente de evaluación por los profesores y estudiantes, a diferencia de los resultados de investigaciones de otros programas (raiting), con que operan la televisión y el video comercial.

La preparación para la producción audiovisual con fines educativos desde la formación inicial pedagógica, puede cumplir funciones específicas, como introducir en el aula fenómenos y objetos que, por sus características espacio-temporales, sería muy difícil introducirlos de otra manera; además, se debe tener en cuenta el trabajo por la identidad que debe realizar el profesor que imparte las asignaturas del área de ciencias sociales, egresado de la carrera Marxismo-Leninismo e Historia. La producción audiovisual individualizada contiene símbolos que pueden lograr un mayor acercamiento al estudiante que los audiovisuales educativos estandarizados que se producen para todo el país, sin olvidar su verdadera significación práctica en el aprendizaje de nuevos instrumentos y lenguajes de comunicación.

La preparación para la producción audiovisual puede tener múltiples ventajas:

-Desarrollo de procesos psicológicos que subyacen a la conducta responsable: autoimagen, autoconcepto, autoestima y asertividad.

-Simplificación de las barreras espacio-temporales entre el profesor y el estudiante; por tanto, servir de ampliación a los escenarios analógicos y virtuales de formación.

-Contribución a la formación de la opinión y la emisión de juicios personales.

-Flexibilización de la enseñanza, tanto en lo que respecta al tiempo, al espacio, a las herramientas de comunicación, como a los códigos con los cuales los alumnos desean interaccionar.

-Contribución a la creación de escenarios, tanto para el aprendizaje cooperativo como para el autoaprendizaje.

-Contribución al uso de herramientas de comunicación sincrónica y asincrónica.

-Adaptación de los medios a las necesidades, características, estilos de aprendizaje e inteligencia múltiples de los estudiantes.

-Presentación de escenarios multimedia-multicódigos e hipertextual/hipermedia, que propician la utilización de escenarios convergentes de tecnologías y que los lectores se conviertan en lectoautores, y por tanto, que en su utilización sean procesadores activos y constructores del conocimiento.

-Rompimiento de los clásicos escenarios formativos, limitados solo a los patrones verbalistas e impresos.

Conclusiones

La búsqueda de alternativas didácticas innovadoras que aprovechen las potencialidades de los medios audiovisuales, es una tarea impostergable de las ciencias pedagógicas contemporáneas. En el contexto de esta problemática, que el estudiante de Marxismo-Leninismo e Historia aproveche desde la formación inicial los materiales audiovisuales, es una vía que propicia el balance necesario entre lo tecnológico y lo pedagógico en los procesos de educación audiovisual y constituye un reto de especial significación formativa y social.

Es necesario educar en una cultura de y para los medios audiovisuales, lo que debe constituir parte integrante de la formación inicial y de la formación continua del profesional de la educación, así como de los otros actores implicados en la utilización de los audiovisuales en cualquier contexto escolar.

Referencias

(1)BARRETO I, ET AL. Educación y tecnologías de la información y las comunicaciones: una mirada desde la formación del docente .Curso 19 Pedagogía 2011. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 2011. p 11.

(2)BARRETO I. Modelo pedagógico para la producción de la televisión escolar. [Tesis en opción al Grado Científico de Doctor en Ciencias Pedagógicas]. La Haban, Cuba: Ministerio de Educación; 2006.

(3)CABERO J. Formación del profesorado en TIC. El gran caballo de batalla. Comunicación y Pedagogía. Tecnologías y Recursos didácticos. España: Universidad de Sevilla; 2010.

(4)CLOUTIER J. L'ere d'emerec (ou la comunication audioscrptovisuelle a l'jeure des selfmedia). Montreal, Les Presses del'Université de Montréal; 1975.

(5)BARRETO I, HERNÁNDEZ P A, HERNÁNDEZ E F. Al habla con los medios. Caracas, Venezuela: Universidad Bolivariana de Venezuela; 2005. p.97.

(6)MARTON P. La concepción pedagógica de sistemas de aprendizaje multimedia interactivos: fundamentos, metodología y problemática. Universidad de Québec; s-a.

(7)MORALES C. Inteligencia, medios y aprendizaje. (1999). Disponible en: www.ilce.edu.mx/dice/artículos.l.htm (Consultado septiembre 21, 2012).

(8)ROMERO M. Didáctica desarrolladora de la Historia. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 2010.

(9)MARTÍNEZ F. Proyecto docente y de investigación de Tecnología Educativa. Documento inédito. Universidad de Murcia; 1987. p.84.

(10)CABERO J. ¿Producción o producciones audiovisuales en el terreno educativo? El Siglo que viene. (11), 1991. p. 3.

(11)ROMERO M. Didáctica desarrolladora de la Historia. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 2010. p. 34.

Bibliografía

CABERO J. Retomando un medio. En: CMIDE SAV: medios de comunicación, recursos y materiales para la mejora educativa. España: Universidad de Sevilla; 1994.

HERNÁNDEZ E F, BARRETO I, HERNÁNDEZ P A, PADRÓN A R, RODRÍGUEZ P E, HERNÁNDEZ M A. Hacia una educación audiovisual. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 2004.

MODELO DEL PROFESIONAL de la carrera de Marxismo Leninismo e Historia. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 2009.

TORRANCE E P. La enseñanza produce efectos específicos. En: Betancourt J. Teorías y prácticas sobre creatividad y calidad. La Habana, Cuba: Editorial Academia; 1992.