Prof. Alice Inocêncio. Instituto Superior de las Ciencias de la Educación. Lubango, República de Angola.

Correo electrónico: alinocencio17@hotmail.com

Recibido septiembre de 2012   Aceptado diciembre de 2012

Introducción

La educación es uno de los pilares del desarrollo social y económico de cualquier país. La historia lo ha demostrado en más de una ocasión. Pero si fue así desde siempre, ahora se convierte en una realidad mayor por la determinación de los avances tecnológicos y la multiplicidad de influencias que la vida moderna hace llegar a cada sociedad, a cada familia y a cada individuo que se educa.

De ahí que no basta con saber que se tienen escuelas y maestros, se hace imprescindible repensar sistemáticamente la práctica educativa y garantizar su mejoramiento continuo, gestionar su calidad y ponerla en función del desarrollo personal y social.

La comprensión del enfrentamiento adecuado de este reto solo es posible si se apoya en una concepción de la educación que lo contenga en su esencia. Ese es el reto de la educación en Angola y en el resto de los países africanos, cuyas sociedades han estado marcadas durante siglos por las continuas guerras, la fragmentación de sus pueblos y culturas originarias, y la pobreza extrema.

Un elemento esencial de la calidad de la educación es hacer al estudiante cada vez más activo y estimular que del proceso educativo se derive un proyecto de vida profesional que lo inserte en lo social y económico, lo ponga a nivel de su tiempo y lo haga útil y próspero.

Es en esta dirección que los procesos de formación vocacional y de orientación profesional, insertados en los centros educativos y de diferentes maneras en el resto de la sociedad, tienen una función determinante. Se hace imprescindible trabajar por su desarrollo en los próximos años.

El objetivo de este artículo es reflexionar sobre la necesidad de implementar la orientación profesional en el contexto del Instituto Superior de Ciencias de la Educación de Lubango, en la República de Angola.

Desarrollo

Los aspectos mencionados anteriormente indican la importancia que tiene la formación de una personalidad integral que facilite el desarrollo del sujeto y su inserción social adecuada. En el plano pedagógico este pensamiento remite a la educación integral como principio educativo general e hilo conductor de los cambios y, sobre todo, como plataforma para la comprensión de la formación vocacional y la orientación profesional como direcciones del proceso educativo.

"Educar es depositar en cada hombre toda la obra humana que le ha antecedido: es hacer a cada hombre resumen del mundo viviente, hasta el día en que vive: es ponerlo a nivel de su tiempo, para que flote sobre él, y no dejarlo debajo de su tiempo, con lo que no podrá salir a flote; es preparar al hombre para la vida".(1) Esta máxima martiana es sin dudas y para suerte de Cuba, Latinoamérica y los países del tercer mundo un referente seguro.

La educación presupone el establecimiento de múltiples relaciones entre las direcciones del  proceso docente-educativo, para impactar todas las facetas del desarrollo humano.

Pino J L define la integralidad de la personalidad como "…una cualidad de la personalidad que expresa el desarrollo armónico de las facultades humanas en lo afectivo, lo intelectual y lo ejecutivo, y garantiza el vínculo del sujeto con la cultura, las contradicciones y anhelos de una época y un país determinado".(2)

Cuando habla del vínculo del sujeto a la cultura, contradicciones y anhelos de una época y un país, este autor remite, entre otros aspectos, al conocimiento (y vínculo afectivo) que debe tener cada sujeto educado de la realidad  social, económica y, por tanto, laboral del contexto de su educación.

La formación profesional y la construcción del proyecto de vida y, específicamente, el proyecto laboral, son componentes a lograr en la personalidad integral.

De ahí que la orientación profesional como proceso pedagógico sea parte de la educación integral y se hace necesario que todos los dirigentes y los docentes comprendan que si no se logra la inserción del estudiante en la sociedad, con un proyecto profesional propio y con un compromiso con la realidad socioeconómica y las aspiraciones de su país, no se cumple con lo que la sociedad espera de la educación. Esto, en naciones como Angola, como se explicó anteriormente, es de extraordinaria importancia.

La educación necesita formar en los estudiantes la sensibilidad ante las demandas profesionales de su época en su nación. Elegir una profesión no es un simple acto individual que se hace en abstracción absoluta de un contexto; es un acto de elección complejo que implica poner en correspondencia las necesidades y las posibilidades de los sujetos con las de la sociedad. Hay carreras que, por su carencia en un momento dado y el lugar y la función que cumplen en el desarrollo social, es necesario declararlas prioridad social y estimular su aceptación y selección por parte de los estudiantes. Después que los sujetos ingresan en los centros de formación profesional es imprescindible atender sus necesidades de ayuda para esclarecer dudas, conflictos de su relación con la profesión y continuar estimulando su motivación.

Los problemas relacionados con ello le interesan a toda la sociedad y deben ser atendidos, ya que solo así se pueden enfrentar. O sea, la solución de estos problemas requiere de la participación de toda la sociedad, pues la implican como tal.

La necesidad de formar y desarrollar docentes en Angola

Una de las carreras de más demanda actual en Angola es la docente. En el país se dan pasos en esa dirección desde la época de la guerra civil, pero no ha podido resolverse el problema, aunque actualmente la situación es mucho mejor.

Ello está demandando, entre otros aspectos, del perfeccionamiento de los procesos de formación vocacional y orientación profesional que se dirigen a estimular el ingreso en las carreras pedagógicas y a estimular la permanencia y el desarrollo en estas. En esta dirección ha trabajado Pino J L y cuya definición se ha seleccionado para el trabajo por su visión integral de esta problemática, al concebir "…la orientación profesional pedagógica como un sistema de influencias educativas dirigidas a estimular la vocación pedagógica en los estudiantes, su ingreso a las carreras de este perfil y su permanencia y desarrollo en ellas".(3) (el subrayado es de la autora).

En la República de Angola, existe la necesidad de elevar el número y la calidad de los docentes y para ello se hace necesario disminuir el éxodo de estos profesionales de los centros educacionales y de la práctica profesional y elevar el ingreso a las universidades pedagógicas.

Es muy importante el análisis de esta situación desde una perspectiva amplia y desde el enfoque dialéctico-materialista, para llegar a una respuesta social e integral a este problema.

En la actualidad, en el contexto angolano y en las condiciones específicas de la ciudad de Lubango/Angola, la situación es cada vez más problemática para los adolescentes que terminan la enseñanza secundaria. El primer factor que afecta es que no se tiene la necesaria conciencia entre los dirigentes educacionales e, incluso, entre muchos docentes. Ello no quiere decir que algunos pedagogos y pensadores sociales angolanos no hayan alertado sobre estos temas.

La formación de profesores con perfiles bien definidos es una de las mayores preocupaciones de la sociedad angolana, según lo que expresan los documentos orientadores de las políticas educativas en este país.

El gobierno de la República de Angola, después de tres décadas de guerra devastadora, que afectó todos los dominios de la esfera social, concretamente en los sectores de la educación y la salud, ha tenido que trabajar en grandes proyectos para la mejoría y reconstrucción del país, con más prioridad para la educación, procurando enfrentar retos que la sociedad le impone, sobre todo a nivel de las políticas educativas. Estas ideas están recogidas en la Constitución del Estado y otros documentos.

Neto A, padre de la nacionalidad angolana, había afirmado con seguridad: "La República Popular de Angola reafirmará el firme propósito de dar un vigoroso combate contra el analfabetismo en todo el país, promover y difundir una educación libre, enraizada en la cultura del pueblo angolano".(4)

En la formación de profesores de la enseñanza media de la República de Angola predomina un enfoque que hace énfasis en la orientación para la elección y el ingreso a las diferentes carreras pedagógicas. Sin embargo, una vez que se ingresa no se da continuidad a la orientación profesional dentro del centro de formación docente, obviando las insuficiencias que en la motivación profesional y en el desarrollo integral de la personalidad presentan los estudiantes. Además, se ha trabajado poco en la educación de la responsabilidad del estudiante y su compromiso con la profesión, factores indispensables para la formación de profesionales más eficientes. Esto determina una gran pérdida de estudiantes después del ingreso y la consecuente afectación social, pues se gradúan muchos menos que los que ingresan. La falta de una respuesta integral y estable socialmente es evidente.

De esta manera, se ha demostrado que dos razones sustentan la necesidad de la mejoría de la enseñanza superior: la primera, ligada a la baja tasa de promoción en las instituciones de la enseñanza superior; y la segunda, relativa a la poca pertinencia y el débil desempeño de las instituciones de la enseñanza superior en los diferentes cursos, en función de las exigencias del desarrollo nacional.

De ahí que la Secretaría del Estado angolano para la Enseñanza Superior ha implementado las líneas maestras para la mejoría de la gestión de este subsistema de la enseñanza. En uno de sus puntos se plantea que en el contexto actual de paz se impone un cambio favorable en la calidad de las poblaciones y alcanzar la normalidad del funcionamiento de las instituciones del Estado, el Sistema de la Educación en general y, en particular, de este subsistema.

Es conveniente mejorar la gestión de la enseñanza superior, consolidando los éxitos ya alcanzados hasta ahora y ultrapasar los puntos críticos ya identificados.

Es indispensable trabajar en la promoción de la calidad de la formación de cuadros, preparar profesionales capaces de asegurar una educación integral de la personalidad y una formación de valores que tengan un impacto, tanto en el desarrollo personal como en el científico y tecnológico del país y de la sociedad. Ello se debe hacer considerando las particularidades del entorno angolano e insertando desde allí las mejores experiencias de otros pueblos que sean coherentes con esa realidad.

Entre los estudiantes de los institutos superiores pedagógicos de Angola es frecuente detectar la carencia de una motivación intrínseca hacia la carrera desarrollada. Entran al centro motivados por la necesidad de conquistar o de mantener un status social y, desde ahí, buscan a todo costo un título académico. Esto se pudo constatar en el Instituto Superior de Ciencias de la Educación de Lubango, en la República de Angola.

En encuesta realizada a 150 estudiantes de primer año en ese centro, se encontró que el 43 % de los estudiantes ingresó a partir de motivaciones extrínsecas; o sea, aquellas que no están directamente relacionadas con el contenido de la profesión. Además, se supo que el 42,6 % se proyectó de manera muy inmediata, con expresiones como "graduarme", "terminar la carrera", "tener un título", "terminar esta asignatura", etc. Es evidente que no han desarrollado una expectativa futura con la carrera.

Al analizar las ventajas y desventajas que los estudiantes identifican en la carrera que estudian, se observa una primera línea de sentidos con argumentos, a veces, positivos, negativos y contradictorios. Un número significativo de los estudiantes aprecia la ventaja fundamental de la carrera en su estímulo y facilidades para la superación personal, al incorporar el estudio y la preparación como un elemento consustancial a ella y a lo cual acceden con relativa facilidad. Una segunda línea de sentido en la valoración de las ventajas se expresa en las posibilidades que ofrece para trabajar con niños, jóvenes y adultos e impactar en su desarrollo. La primera línea de sentido incluye la idea de que la carrera puede preparar al sujeto para otras profesiones y una diversidad de puestos laborales, lo cual le da un atractivo especial, tanto para los estudiantes con motivaciones intrínsecas hacia la profesión y planes a largo plazo con ella, como para los estudiantes que la toman como escalón para acceder a otros puestos laborales.

Al valorar la presencia de la autodeterminación en la selección profesional, 72 estudiantes, lo que representa el 48 % del total, refieren que la selección de la carrera que cursan no fue un acto de autodeterminación, sino una respuesta despersonalizada a influencias externas de diferente tipo, donde son significativas las de los padres.

Otra situación expresada en encuestas a estudiantes y profesores en el Instituto Superior de Ciencias de la Educación de Lubango, es que los perfiles de los estudiantes después de su formación, muchas veces no se corresponden con las expectativas del mercado de trabajo y de la sociedad en general. Esto sucede en muchas universidades de Angola.

Como una de las consecuencias más significativas de la existencia de dificultades en los estudiantes y en el trabajo con ellos en las universidades está la diferencia notable entre la matrícula inicial y final, lo que conduce a que, de los estudiantes que ingresan, solo se gradúe la tercera parte. Es muy común la matrícula simultánea en diferentes carreras, lo cual viabiliza el tránsito de unas a otras.

Si bien para la realización de las pruebas de ingreso exigen la participación activa de los profesores y los directivos en la actividad, muchas veces los estudiantes no han recibido ninguna acción previa de formación vocacional u orientación profesional y, después del ingreso, no se hace prácticamente nada en esa dirección.

Lo antes expuesto pone de manifiesto los obstáculos para la estimulación de un verdadero interés profesional. Posterior a la graduación es muy deficitario el sistema de formación postgraduada y ello incide en la motivación, pues limita la autoestima del docente y sus perspectivas personales de desarrollo.

Se hace necesario, además, incrementar en los programas y los currículos, temas relacionados con la orientación profesional, ya que ni siquiera se dan programas adjuntos con esos fines en las escuelas de enseñanza media en Angola.

La situación presentada anteriormente indica también la necesidad de impulsar investigaciones científicas, en esta área que no solo exploren el problema desde el punto de vista pedagógico y en el contexto de los centros educacionales, sino como un reto social y estratégico de la Angola de estos días.

Conclusiones

La orientación profesional, como especialidad de las Ciencias de la Educación, necesita tener de base una concepción filosófica de la sociedad y del ser humano. En este caso, esos fundamentos están en la concepción dialéctico-materialista de la realidad y en el humanismo de José Martí y Agostino Neto.

La orientación profesional, como proceso pedagógico, es parte de la educación integral y se hace necesario que todos los dirigentes y los docentes comprendan que si no se logra la inserción del estudiante en la sociedad, con un proyecto profesional propio, no se cumple con lo que la sociedad espera de la educación.

A la integralidad le es inherente la inserción social del sujeto y su identificación con un trabajo valioso para los demás donde se realiza, compromete su subjetividad y desarrolla sus potencialidades creativas.

Resulta necesario lograr que cada individuo que seleccione una profesión determinada conserve el interés por permanecer y desarrollarse en ella y que aporte a la sociedad, de forma sistemática, lo mejor de la experiencia que adquiere durante su desempeño.

Referencias

(1)MARTÍ J. Obras completas. T. 8. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1975. p. 281.

(2)PINO J L. Fundamentos martianos de la educación de la  integralidad en el ser humano. Rev Varona, 2011, ene-jun, No. 52: 68-74. p.68.

(3)PINO J L, ET AL. Orientación profesional pedagógica: su inserción en el proceso docente-educativo del centro escolar. IX Seminario Nacional para Educadores. Formato digital. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 2009. p.2.

(4)NETO A. Textos políticos escogidos. Luanda, Angola: Autor; 1975. p.41.

Bibliografía

CASTRO F. Acto de graduación del primer curso emergente de formación de maestros primarios. Granma. Edición única. 2001 marzo 16; p.4.

FREIRE P. Pedagogía del oprimido. México: Editorial Siglo XXI; 1999.

GONZÁLEZ F. Comunicación, personalidad y desarrollo. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1995.

GONZÁLEZ D. Teoría de la motivación y práctica profesional. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 2001.

PINO J L. La orientación profesional en los inicios de la formación superior pedagógica: una perspectiva desde el enfoque problematizador. [Tesis en opción al Grado Científico de Doctor en Ciencias Pedagógicas]. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico "Enrique José Varona"; 1998.

PINO J L, ET AL. Motivación profesional para la formación pedagógica en planes emergentes. La Habana, Cuba: Editorial Academia; 2005.