Varona

No.54   Enero-Junio, 2012.    ISSN: 1992-82

El dominio del mapa político del mundo y su importancia pedagógica-profesional

Mastering the political map of the world and its pedagogical-professional importance

Dr.C. Oscar Rodríguez Díaz. Profesor Titular. Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”. La Habana, Cuba.

Correo electrónico: oscarrd@ucpejv.rimed.cu

Recibido junio de 2011   Aceptado septiembre de 2011


RESUMEN

El artículo se refiere al dominio del mapa político mundial, que involucra a todas las personas que ejercen tareas públicas, entre ellas los docentes, pues constituye de manera innegable un componente básico y muy visible de la cultura general integral. A tono con ello, el autor expone un grupo de consideraciones que resaltan la importancia del manejo de dicha temática en el ejercicio cotidiano de la docencia en la enseñanza media y la superior, sin distinción de materias o asignaturas. Se resalta el significado especial que tiene el tema para Cuba, dada su masiva vocación internacionalista y la repercusión cultural que se deriva de su dominio para la comprensión de las complejas circunstancias socio-económicas y políticas en que se desenvuelve el mundo actual.

PALABRAS CLAVE: mapa, país, estado, profesional, mundo.

ABSTRACT

This article deals with the mastering of the political map; this involves all people who have public work, among them teachers. This constitutes, undeniably, a basic and visible component of general comprehensive culture. That is why the author exposes a set of considerations that show the importance of this topic in the everyday teaching secondary and high school in all subjects. The importance of this topic to Cuba is specially highlighted because its internationalist history and the cultural importance to understand the complex political and socio-economic circumstances around the world at present.

KEYWORDS: map, political map, mastering, professional, world.


Introducción

La humanidad vive en un mundo que desde el punto de vista socio-político se caracteriza por su dinamismo. Las fronteras cambian con relativa frecuencia y nada hace presagiar que el último cambio ocurrido sea el definitivo.

Para los docentes, particularmente aquellos que se desempeñan en los niveles correspondientes a secundaria básica, preuniversitario y superior, el ejercicio cotidiano de las clases presupone menciones asiduas a la actualidad socio-política del mundo. Es, sin dudas, una muestra del vínculo de la teoría con la realidad circundante que se produce más allá de las fronteras nacionales.

El desconocimiento o conocimiento parcial o fraccionado del mapa político del mundo por parte de los que tienen por oficio enseñar, influye negativamente en la adecuada y sistemática asimilación de nuevos conocimientos del estudiantado a partir de la secundaria básica y hasta la educación superior. Y debe entenderse que la problemática no es meramente geográfica, sino que interesa a los que explican la totalidad de las materias escolares. De ahí que cada vez más ello constituya una prioridad de la preparación profesional cotidiana y sistemática del personal docente.

El objetivo del trabajo es exponer la importancia del dominio del mapa político del mundo para el desarrollo adecuado de la labor pedagógica-profesional de los docentes en la enseñanza media y la superior.

Desarrollo

El mapa político del mundo, establecido por los hombres, ha cambiado y cambia inexorablemente por la propia voluntad –consciente o no– de sus creadores. La historia pasada y reciente así lo demuestran.

Los primeros años de la última década del siglo XX, por ejemplo, asombraron al mundo con hechos tan trascendentales –y para muchos inconcebibles– como la desaparición de la Unión Soviética y del campo socialista. Y con ellos y su secuela de fenómenos, tendencias socio-económicas y contradicciones, la implantación de un mundo unipolar, liderado por la mayor de las potencias que ha conocido la humanidad: Estados Unidos de América.

Entre 1990 y 1992, ocho estados euroasiático-africanos se transformaron y dieron lugar a 28 nuevos Estados, en muchos de los casos en medio de procesos no exentos de conflictos, incluidos los armados. Con posterioridad, similares transformaciones continuaron con un mayor espaciamiento.

Cambios de tal magnitud en el mapa político mundial, solo se apreciaron antes al término de importantes conflagraciones bélicas como las dos guerras mundiales del siglo XX y nunca, como regla, en tiempos de relativa paz internacional.

La enseñanza de la Geografía escolar y en general de las Ciencias Sociales, debió enfrentar esa ola de cambios que con inusitada e inesperada rapidez convirtió en obsoletos los materiales cartográficos y gran parte de los libros de texto y materiales de consulta disponibles.

La simple observación de estadísticas relacionadas con la evolución de los estados integrantes del mapa político del mundo, ofrece una idea sobre la citada magnitud de los cambios ocurridos en una breve etapa de la historia reciente (Tabla 1):

Tabla 1. Estados del mundo.

ÁREAS GEOGRÁFICAS

1990

1995

2000

2005

2010

2012

-Las Américas

América Anglosajona

A. Latina y el Caribe

35

2

33

35

2

33

35

2

33

35

2

33

35

2

33

35

2

33

-África

52

53

53

53

53

54

-Eurasia

Europa

Asia

73

33

40

90

43

47

90

43

47

91

43

48

92

44

48

92

44

48

-Australia y Oceanía

13

14

14

14

14

14

TOTALES

173

192

192

193

194

195

(Datos para el 1ro. de enero de cada año)

Fuente: Rodríguez O. El mapa político mundial contemporáneo. Material inédito. La Habana, Cuba: Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”; 2012.

En la tabla 1 aparece la relación numérica de estados y no de países, lo que no pocas veces se presta a confusión por muchos docentes. El término país es mucho más abarcador que estado, e incluye además de estos últimos, aquellos territorios natural o políticamente delimitados y habitados por comunidades estables con estrechos vínculos históricos, culturales y lingüísticos entre sus miembros, con evidente orgullo y sentimientos de pertenencia, que mantienen un estatuto de dependencia política de otra nación (como es el caso, digamos, de Puerto Rico, al que Estados Unidos impuso desde 1953 la condición de Estado Libre Asociado sujeto a poder supremo del Congreso de Washington D.C. y que en la práctica carece jurídicamente de estatidad y soberanía). Resulta importante en tal sentido, asumir la máxima de que todos los estados del mundo son países, pero no todos los países son estados.

En consecuencia, a los datos recogidos en la tabla presentada deben agregarse los correspondientes a poco más de 40 territorios dependientes, en su mayoría pequeños en tamaño, poco poblados e insulares, que elevan la cifra de países del mundo a unos 240 (no se expresa una cifra exacta, pues en relación con varios de ellos existen discrepancias entre los especialistas al incluirlos en las listas, como ocurre con los denominados departamentos Franceses de Ultramar).

La experiencia docente del autor, durante más de 34 años, impartiendo Geografía en la Educación Superior en dos universidades cubanas y otras dos extranjeras, así como en calidad de conferencista en diversas instituciones universitarias del país, le ratifican la percepción de que para muchos profesores de la enseñanza media y la superior, el tema del mapa político del mundo, por su propia riqueza y dinámica, resulta complejo y difícil de introducir con rigor y sistematicidad en el ejercicio cotidiano de la docencia.

Sin embargo, no existen dudas acerca de su carácter imprescindible en el plano curricular. Es imposible concebir a personas medianamente cultas sin conocimientos elementales del mundo político que le rodea, en momentos en que la globalización como un fenómeno objetivo, que responde al funcionamiento de leyes económicas y como proceso incontrolable e inevitable, se intensifica cada vez más. Tampoco es entendible que ello ocurra en un país como Cuba de clara y masiva vocación internacionalista, por lo que se impone reforzar por diversas vías las acciones encaminadas a que en el proceso de enseñanza-aprendizaje la vinculación del contenido con la realidad, que se desarrolla más allá de los recintos docentes, pase también por las demarcaciones que allende los mares, conforman el gran conjunto de países de la Tierra.

Activar tales acciones debe tomar en cuenta la aplicación de los principales postulados del Marxismo-Leninismo como ciencia social verdadera, única capaz de brindar métodos e instrumentos que permiten comprender la dinámica del mundo. En particular, el Materialismo Histórico pertrecha de los conocimientos necesarios para entender las leyes más generales del desarrollo de la sociedad humana.

A continuación se presentan, someramente, dos casos que ilustran el tratamiento general que a juicio del autor debe dominar un docente de la enseñanza media y la superior, en tal sentido: el primero, referido al continente africano; el segundo, a dos antiguas naciones euroasiáticas que desaparecieron en el lamentable fragor de acontecimientos socio-políticos desarrollados en la última década del pasado siglo.

Caso 1. África en las dos últimas décadas

Obsérvese que el mapa político del continente puede ser enfocado desde varias aristas:

-Nuevos Estados

A inicios de la última década del siglo XX se produjeron dos cambios en el mapa político de África: el primero ocurrió el 21 de marzo de 1990, cuando se consumó la independencia de Namibia, luego de arduas negociaciones de una comisión cuatripartita en la que Cuba tuvo activa participación, después de la derrota sudafricana (la Sudáfrica del apartheid), en los campos angolanos de Cuito Cuanavale; el segundo, sucedió el 24 de mayo de 1993 cuando Eritrea se desgajó de Etiopía y se convirtió en nación independiente. Posteriormente, el 9 de julio de 2011 se produjo la proclamación de la República de Sudán del Sur, luego de los resultados de un referéndum efectuado en el anterior mes de enero, donde más del 98 % de los habitantes votaron a favor de la independencia y de la consiguiente escisión de Sudán.

-Cambio de régimen

Debe resaltarse un hecho trascendental ocurrido el 10 de mayo de 1994, cuando ascendió al poder en Sudáfrica el presidente Nelson Mandela, marcando así el fin del apartheid y la instauración de un gobierno multiétnico a tono con la composición racial del país.

-Cambio de topónimo

El Estado oficialmente denominado Zaire desde 1965 hasta mayo de 1997, retomó en ese último año, tras la derrota del régimen de Mobutu Sese Seko, el nombre de República Democrática del Congo, con el cual se había proclamado independiente el antiguo Congo Leopoldville, en 1960.

-Tipos de estados

En África predominan los regímenes republicanos (de los 54 estados, 51 son repúblicas), aunque existen tres reinos: Lesotho, Swazilandia y Marruecos.

-Foco de tensión

Entre los focos de tensión africanos permanece el relativo al Sahara Occidental, territorio proclamado desde mediados de los años ‘80 del siglo XX como República Árabe Saharauí Democrática (RASD) por los dirigentes del Frente POLISARIO, brazo armado de un pueblo empeñado en expulsar al ocupante marroquí y acceder así, a la definitiva independencia. La RASD es reconocida por la Unión Africana y por más de un centenar de los actuales estados que matizan el panorama político mundial.

-Territorios dependientes

En África perduran varios diminutos enclaves dependientes: las islas francesas de Mayotte y Reunión (ambas con estatuto oficial de Departamentos de Ultramar), los enclaves españoles de Ceuta y Melilla en la costa mediterránea de Marruecos, así como los grupos insulares bajo jurisdicción británica de Santa Elena (en el Océano Atlántico, dependencia incluida en la relación vigente del Comité de Descolonización de la ONU).

 Caso 2. Dos estados desintegrados

Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). Luego de la convulsa etapa de los años 80 del pasado siglo, el gobierno central de la URSS reconoció en agosto de 1991 la independencia de las llamadas Repúblicas Pribálticas: Estonia, Letonia y Lituania, como colofón a una tensa etapa de disturbios sociales ocurridos en ellas contra el poder soviético. De esa manera, fueron las primeras en separarse de la Unión desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. En diciembre de ese mismo año y a raíz de la constitución de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) en Minsk, capital de Belarús (que en principio incluyó a las importantes repúblicas soviéticas de Rusia, Ucrania y Belarús), la URSS dejó de existir, apareciendo en ese momento 12 nuevas repúblicas soberanas (Rusia, Ucrania, Belarús, Moldova, Georgia, Armenia, Azerbaiyán, Kazajstán, Kirguistán, Uzbekistán, Tayikistán y Turkmenistán), que con las tres antes mencionadas, elevaron el resultado desintegrador de un Estado a 15 nuevas entidades independientes.

Yugoslavia. La antigua República Socialista Federativa de Yugoslavia se desmembró en cinco repúblicas, entre 1991 y 1992, en un proceso rápido y costoso en vidas humanas y daños materiales de todo tipo. El país, que había nacido al término de la Primera Guerra Mundial, tras el hundimiento del Imperio Otomano, se había proclamado como Reino de Yugoslavia en 1929, aglutinando una variada gama de pueblos, culturas, lenguas y religiones, así como notables diferencias en cuanto al desarrollo de las distintas regiones. En 1941, fue ocupada por los nazis. Las fuerzas patrióticas se organizaron contra el invasor y se fundó la Liga de los Comunistas, encabezada por el líder de origen croata Josip Broz (conocido como Tito). Al término de la Segunda Guerra Mundial la nación conservó las fronteras anteriores y se convirtió en una federación que se rigió por diferentes constituciones, hasta la última aprobada en 1987.

La crisis yugoslava, que desembocó, finalmente, en la desintegración del Estado federal, tuvo sus motivaciones esenciales en la exacerbación del nacionalismo, entre las dos etnias fundamentales: serbios y croatas. Además, respondió a factores de deterioro económico e institucional y a notables diferencias de desarrollo socio-económico entre las repúblicas federadas. La crisis se agudizó a partir de la oficialización del multipartidismo en 1989, que incentivó un fuerte nacionalismo con su secuela de contradicciones, conflictos, discordias y muertes.Luego de cruentas guerras civiles, que alcanzaron momentos culminantes entre 1991 y 1992, y cuya intensidad varió de una a otra de las regiones del país, el Estado Federal constituido como tal, al término de la Segunda Guerra Mundial quedó dividido en cinco repúblicas independientes: Eslovenia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, Macedonia y Yugoslavia (esta última, como federación, pasó a denominarse oficialmente República de Serbia y Montenegro en febrero de 2003 y definitivamente en junio de 2006 y tras un plebiscito en Montenegro, votado por la mayoría a favor de la independencia, las últimas dos entidades que permanecían unidas en el antiguo escenario yugoslavo se separaron para dar lugar a las repúblicas soberanas de Serbia y de Montenegro). Por último, el 17 de febrero de 2008 el Congreso de la República Autónoma de Kosovo, territorio del sur de Serbia de mayoría albanesa bajo ocupación de los Cascos Azules de la ONU, proclamó de manera unilateral y a espaldas de Serbia, pero con el apoyo de numerosos gobiernos de occidente liderados por Estados Unidos, la independencia, una decisión que no cuenta hasta el momento con reconocimiento oficial internacional.

Los casos citados, a manera de ejemplos, son susceptibles de enriquecerse y profundizarse en dependencia del nivel educacional, de los intereses de la clase y del alcance de la asignatura que se imparta. Incluyen conocimientos básicos que al estar al alcance de la mano en la prensa diaria (plana, radial, televisiva) no se conciben excluidos del tratamiento de la materia escolar. Su tratamiento presupone –y ya esto tiene que ver con mayor exclusividad para asignaturas como Geografía e Historia– el empleo de mapas, que en las actuales circunstancias sigue siendo difícil ante su carencia en la mayoría de las escuelas del nivel medio, por lo que se impone la creatividad de los docentes para buscar soluciones, que permitan que la dimensión del conocimiento espacial no quede relegada a un segundo plano.

Conclusiones

El mapa político del mundo, caracterizado a lo largo de la historia por un notable dinamismo determinado, por la influencia de numerosos factores que responden a las leyes objetivas del desarrollo de la sociedad, es un tema de necesario dominio general por parte de los docentes de la enseñanza media y la superior.

La necesidad de vincular el ejercicio cotidiano de la docencia con las realidades cambiantes del mapa político del mundo, se reforzó en las últimas dos décadas, caracterizadas por profundos e inesperados cambios, motivados esencialmente, por la desintegración de la Unión Soviética y la desaparición del campo socialista en Europa oriental.

El dominio básico del mapa político del mundo es parte de la cultura general integral de todo individuo, máxime en un país como Cuba, de clara y masiva vocación internacionalista.

 

Bibliografía

BORGES T. Un grano de maíz. La Habana, Cuba: Oficina de Publicaciones del Consejo de Estado; 1992.

COMISIÓN NACIONAL DE NOMBRES GEOGRÁFICOS. Mapa toponímico del mundo. La Habana, Cuba: Ediciones GEO; 2000.

COMISIÓN NACIONAL DE NOMBRES GEOGRÁFICOS. Boletín informativo No. 1. La Habana, 1999.

CUBA NO NEGOCIA NI VENDE SU REVOLUCIÓN, que ha costado la sangre y el sacrificio de muchos de sus hijos (conversación de Fidel Castro con Federico Mayor). Granma, año 35, La Habana, 22 de junio, 2000.

GORBACHOV M. La Perestroika y la nueva mentalidad para nuestro país y para el mundo entero. La Habana, Cuba: Editora Política; 1988.

GUADARRAMA P, ET AL. Lecciones de Filosofía Marxista-Leninista (1 y 2). La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1992.

HART A. Materialismo histórico y vida espiritual. Cuba Socialista, No. 3. La Habana, 1996.

KONSTANTINOV F, ET AL. Fundamentos de Filosofía Marxista-leninista. T. 2. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1976

MALMIERCA I. Cronología del Caribe. La Habana, Cuba: Editorial SI-MAR S.A.; 2000.

PARTIDO COMUNISTA DE CUBA. Plataforma Programática. Tesis y Resoluciones. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1978.

PRENSA LATINA. El Comité de descolonización, su origen y funciones. Granma, año 35, La Habana, 24 de mayo, 2000.

RODRÍGUEZ C R. En la controversia universal. Juventud Rebelde, La Habana, 23 de mayo, 1993.

RODRÍGUEZ O. El mapa político mundial contemporáneo. Material inédito. La Habana, Cuba: Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”; 2012.

SMITH D. The States of de World. Penguin Grouphy Myriad. London: Edition Limited; 1999.