Lic. Yordanka Castro Ramos. Asistente. Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”. La Habana, Cuba.

Correo electrónico: yordankacr@ucpejv.rimed.cu

Recibido junio de 2011   Aceptado septiembre de 2011

Introducción

Las Ciencias Naturales demandan de las Ciencias Pedagógicas desarrollar, en las nuevas generaciones, la motivación para el aprendizaje de los resultados científicos de esta y en correspondencia con el dominio de las habilidades específicas para adentrarse en la búsqueda independiente de las leyes, procesos y fenómenos que explican la naturaleza en su vínculo con la realidad.

Con el fin de alcanzar este propósito, se perfecciona continuamente el currículo escolar de los diferentes niveles educacionales, tanto en la concepción de lo que deben aprender los estudiantes, como las vías mediante las cuales se eleva la calidad de dicho aprendizaje. Aun, con los logros en esta esfera de la actividad científica queda mucho por hacer, fundamentalmente, en el desarrollo de los programas y materiales didácticos de las asignaturas necesarios para la formación de la personalidad de los estudiantes.

Por tal motivo se concibe el carácter integrador de las diferentes asignaturas de las ciencias naturales, con lo cual se da continuidad al sistema de conocimientos y habilidades que los estudiantes debieron desarrollar en el nivel de la Educación Primaria. No obstante, el esfuerzo realizado, en este sentido, por el Ministerio de Educación (MINED) y el personal especializado, aún no se logra la sistematización de estos contenidos, vistos no solo desde la repetición y el reforzamiento de las acciones, sino también desde el perfeccionamiento de ellas.

No son pocos los pedagogos, psicólogos e investigadores, que han dedicado su tiempo a estudiar la formación y el desarrollo de habilidades. Entre ellos se pueden mencionar a Rubinstein J L, en 1972; Petrovsky A V, en 1978; Danilov M A, en 1981; Brito H, en 1987; Bermúdez R y Rodríguez M, en 1996; Álvarez R M, en 1997, y otros. En sus estudios han precisado la definición de estos conceptos, sus componentes funcionales, sus características esenciales, sus etapas, su clasificación, así como los principios metodológicos y didácticos en el proceso de formación de habilidades.

En la bibliografía especializada en didáctica de las Ciencias Naturales autores como, Rojas C, en 1983; Hernández J L, en 1983; Cruz B, en 1986; Rionda H D, en 1996; Recio P P, en 2005, entre otros, han aportado importantes elementos sobre la formación de habilidades prácticas. Sin embargo, aún es insuficiente el tratamiento a la formación de estas habilidades en el aprendizaje de dichas asignaturas en la secundaria básica.

Dada la importancia de esta temática, en este artículo, se valoran algunas consideraciones sobre el proceso de formación de habilidades prácticas desde una mirada integradora de las asignaturas que componen el área de las ciencias naturales.

Desarrollo

El desarrollo histórico alcanzado en la enseñanza de las Ciencias Naturales, en nuestros días, recobra nueva fuerza, pues se hace necesario transformar con efectividad el proceso de enseñanza de esta asignatura, en especial, para así lograr una concepción científico-materialista del mundo en los estudiantes. Sin duda alguna, le corresponde a los docentes buscar los puntos en los que se entrelazan diferentes aspectos de la realidad, se manifieste una marcada intención de asociar las relaciones interdisciplinarias en lo referente, no solo a los conocimientos, sino también al sistema de habilidades que permitan una mejor forma de aprender, lo que exige una mayor creatividad, singularidad y eficacia en el camino de la integración.

En la literatura psicológica y pedagógica de los últimos tiempos aparecen distintas definiciones del concepto habilidad, que se corresponden con la concepción teórica que asumen sus autores. En este trabajo se toma la definición ofrecida por Brito H cuando plantea que “…es aquella formación psicológica ejecutora particular constituida por el sistema de operaciones dominadas que garantizan su ejecución (de la acción) del sujeto bajo control consciente…”,(1) luego precisa que “…desde esa perspectiva concebimos la habilidad como nivel de dominio de la acción en función del grado de sistematización alcanzado por el sistema de operaciones correspondientes”.(2) Esta definición es valiosa, a consideración de la autora de este artículo, pues además de las características, concibe el dominio de la acción a partir de que se logre la sistematización de las operaciones que la constituyen, lo que sirve de orientación para diseñar el proceso de formación y el desarrollo de cualquier habilidad.

Una definición útil sobre la formación de habilidades, a los efectos de esta investigación, es la que ofrece López M cuando dice que “…se habla de formación de la habilidad a la etapa que comprende la adquisición consciente de los modos de actuar, cuando bajo la dirección del maestro o profesor el alumno recibe la orientación adecuada sobre la forma de proceder”.(3) Por cuanto, en esta definición se destaca la necesidad de que el profesor conciba cómo los estudiantes deben proceder; por supuesto, que se trata de la solución de las diversas tareas de aprendizaje, como condición fundamental para lograr el carácter consciente de este, lo cual es válido cuando se desea contribuir a la formación de habilidades prácticas.Se considera necesario destacar que se hace énfasis especial en la etapa de formación de habilidades porque los programas docentes demandan que los profesores presten mayor atención a la organización de este proceso y a las condiciones específicas que se creen para prevenir que se hagan estables, acciones incorrectamente instauradas, como hábitos que posteriormente interfieren el desarrollo de las habilidades.

El proceso de formación de las habilidades, es bien complejo, para empezar se deberá conocer cuáles son las que compete desarrollar en los estudiantes y representarlas en las acciones de los objetivos a cumplir por estos, así adquiere importancia el análisis de la tipología de las habilidades.

Es necesario declarar que, independientemente de la clasificación de habilidades que se asuma, queda esclarecido que estas no se manifiestan de forma aisladas, sino que se encuentran en estrecha relación, pues un determinado tipo de acción siempre presupone el aporte de otras más generales.

Otro aspecto de interés, es el relacionado con la coincidencia que existe entre muchos autores en clasificar las habilidades generales y específicas, según sean parte o no del contenido de la actividad que se realiza. Esta manera de determinar el tipo de habilidad facilita la ubicación de las habilidades prácticas, que se requieren formar en el proceso de enseñanza-aprendizaje como específicas. Sin embargo, en la literatura se evidencia la insuficiente conceptualización de habilidades prácticas. De los pocos encontrados se encuentra y comparte el de Soberat Y cuando las define como “…habilidades que se manifiestan en el plano externo; es decir, que las acciones que el alumno realiza de forma manual o por medio de instrumentos, pueden ser observadas por el maestro durante el proceso de ejecución”.(4) Más adelante plantea que estas se forman y desarrollan en asignaturas con enfoque experimental, que tienen un carácter práctico y que sirven de instrumento para la asimilación de conocimientos.

Es considerado por muchos autores que desde lo metodológico, la formación de habilidades transita por diversas etapas estrechamente relacionadas entre sí. Una gran mayoría: Rojas C,(5) Cruz B,(6) Recio P P,(7) coincide en plantear cinco fases o etapas de formación de habilidades, pero con cierta flexibilidad en su aplicación, según su complejidad: motivación para el desarrollo de la acción, explicación y demostración por el profesor de los componentes funcionales de la acción, ejercitación por los estudiantes de las acciones y operaciones bajo el control del profesor, ejercitación de forma independiente por los estudiantes de forma verbal externa e interiorización y la aplicación del sistema de operaciones para la acción.

El cumplimiento flexible y creativo de estas etapas exige del profesor el conocimiento de la didáctica general y la particular. Un dominio conveniente de la didáctica de las ciencias particulares será siempre una condición para dirigir el proceso de enseñanza-aprendizaje hacia la formación de habilidades, por cuanto estas últimas operan con conocimientos específicos. Por ello, resulta necesario concebir con cuáles contenidos es posible que se ejecuten una o varias acciones.

Desde hace algún tiempo, en la literatura pedagógica aparecen trabajos relacionados con la formación de habilidades generales (programas de estudio, cuadernos de trabajo, entre otros) mediante el proceso de enseñanza-aprendizaje de diferentes asignaturas, por citar un ejemplo, el desarrollo de la habilidad valorar en las ciencias naturales y en las humanísticas. Otros trabajos se han concentrado en el estudio de una o varias habilidades, a partir del sistema de conocimientos de una asignatura.

La formación de las habilidades precisa de un entrenamiento. Solo mediante la reproducción y la aplicación de los modos de actuación de manera consecuente se logra la formación de las habilidades. A todo ello se une el aspecto educativo, que revela el lugar de estas instrumentaciones psíquicas en la interpretación científica del mundo, a partir de la valoración y la aplicación de lo conocido a nuevas situaciones.

En la formación de habilidades prácticas en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las Ciencias Naturales en la secundaria básica se han de cumplir una serie de requisitos metodológicos y didácticos que tienen su base científica en los fundamentos del currículo de este nivel educacional.

La labor instructiva tiene en cuenta los objetivos formativos del Modelo de escuela Secundaria Básica orientados a que los estudiantes alcancen una cultura general integral, para lo cual se necesita una concepción del proceso de enseñanza-aprendizaje que potencie la asimilación de los resultados de la ciencia y la técnica en beneficio del desarrollo social.

En los diferentes objetivos formativos se contempla, de modo implícito, la necesidad de que los estudiantes se apropien del sistema teórico metodológico de las Ciencias Naturales, en correspondencia con el nivel, por lo que se precisa que los estudiantes puedan “demostrar una cultura laboral y tecnológica,(…) apreciar (…), la belleza de la naturaleza y de los paisajes cubanos para que puedan interpretar, sentir, disfrutar, expresar y crear…”.(8)

Estos objetivos sirven de orientación a la dirección del proceso de enseñanza-aprendizaje, a partir del diseño de tareas docentes que ponderen modos de aprender y los instrumentos psicológicos que respondan a la capacidad de los estudiantes de controlar y transformar el medio y a sí mismos. Exige que dominen el sistema de conocimientos, hábitos y habilidades generales para procesar y crear nuevos conocimientos, relacionados con las Ciencias Naturales.

Entre los objetivos formativos de esta asignatura que revelan una relación estrecha con el proceso de formación de habilidades prácticas, se encuentran:

-“Demostrar la relación existente entre las ciencias naturales y el desarrollo tecnológico y social en función de una concepción científica del mundo basada en las posiciones del materialismo dialéctico, para alcanzar una cultura científica como parte de su cultura general integral, mediante el cumplimiento del sistema de actividades de la asignatura.

-“Conocer y resolver problemas de la vida práctica relacionados con la vida económica, política y social del país, sobre la base de las dimensiones de los cuerpos en el universo, el movimiento mecánico, las propiedades y aplicaciones de las sustancias puras, las mezclas, las disoluciones, los cuerpos y la energía, así como las características de los animales su diversidad, clasificación y relaciones asociadas a su protección”.(9)

De su análisis se pueden determinar las ideas siguientes:

-El propósito de las asignaturas de Ciencias Naturales, es contribuir a que los alumnos descubran por sí mismos todo lo que ocurre a su alrededor; por ello, las clases deben tener un carácter activo y práctico, dirigirse a la observación y la descripción de la naturaleza; sus procesos, fenómenos y en la experimentación como procedimiento metodológico para cumplimentar los programas de las Ciencias Naturales. Esta intencionalidad descubre el carácter cultural del estudio de las ciencias naturales, por lo que su dominio constituye también herramienta para la transformación creativa de la naturaleza de la sociedad y del hombre.

-La concepción de la enseñanza de las Ciencias Naturales centra la atención en la formación y el desarrollo de habilidades de carácter práctico.

-Se conciben vínculos interdisciplinarios, no solo por el sistema conceptual, sino también por el sistema de acciones que han de ser sistematizadas para contribuir a de la formación y el desarrollo de capacidades.

No se puede estudiar el proceso de formación de habilidades prácticas en la secundaria básica sin analizar los conocimientos y las habilidades que le preceden en el nivel primario. En las asignaturas que conforman esta área del saber, se estudian los fenómenos naturales interrelacionados; tal como el niño lo observa en la realidad, sean de carácter físico, químico, biológico o geográfico, lo que confirma la unidad y la diversidad de la naturaleza, así como la acción del hombre en ella y en la sociedad.

Las Ciencias Naturales en la educación primaria tienen un enfoque integrador, no constituye la simple suma de varias asignaturas. Se parte del estudio de las nociones sobre la naturaleza, en el primer ciclo, mediante la asignatura El mundo en que vivimos, donde se estudian los fenómenos naturales interrelacionados; tal como los niños los observan en la realidad; sean tanto, de carácter físico, químico, biológico o geográfico, permitiéndoles confirmar la unidad y la diversidad de la naturaleza, así como la acción antrópica en ella y sobre la economía.

El programa de esta asignatura en quinto grado tiene un enfoque eminentemente práctico y experimental, basado en la observación directa de su entorno, siempre que sea posible; y cuando no, en la observación indirecta de láminas, diapositivas y otros. Estimula a los estudiantes en la búsqueda de imágenes que le permitan ilustrar lo explicado, en la creación de colecciones de rocas, plantas, animales, etcétera.

Se mencionan las habilidades prácticas que se deben adquirir, como: manejo de instrumentos, medición de distancias, orientación en el mapa y en el terreno, los cuales se desarrollarán con el contenido de cada unidad del programa, favoreciendo la asimilación de otros nuevos conocimientos de formas más rápidas y efectivas.

Para este logro en el programa se contemplan numerosos experimentos que aparecen incluidos como prácticas o como demostraciones en las teleclase a observar por maestros y alumnos, y se enuncian ciertos aspectos que el maestro no debe perder de vista al preparar un experimento. En sexto grado se aprecia gran cantidad y variedad de actividades prácticas, entre las que se destacan, la observación, la experimentación, la herborización y recolecta.

Las orientaciones que se dan al maestro mediante los programas, deja claramente expresadas las actividades independientes del alumno en las prácticas que deben realizar. También se plantea la necesidad de diseñar tareas que sean efectuadas en contacto directo con la naturaleza, con el fin de evitar que el uso de medios de enseñanza desplace el lugar que debe ocupar el conocimiento vivencial.

En estos grados se comienzan a formar las habilidades prácticas y deben alcanzar cierto nivel de desarrollo en el transcurso del ciclo y en los niveles educacionales subsiguientes. A modo de ejemplo, puede verse la tarea docente, relacionada con la realización de experimentos sencillos, la cual se apoya en la ejecución de acciones como: montar preparaciones microscópicas, manipular instrumentos ópticos de aumento (lupa y microscopio) y otros.

Se encuentran declaradas en los documentos normativos, así como en el libro La enseñanza de las Ciencias Naturales en la escuela primaria, que se utiliza en la carrera de Licenciatura en Educación Primaria las siguientes las habilidades prácticas: realizar experimentos sencillos, manipular instrumentos: ópticos de aumento (lupa y microscopio, el termómetro y el pluviómetro), montar preparaciones microscópicas, recolectar objetos naturales, determinar distancias, orientarse en el terreno, confección de tablas de datos. Esta tarea se complejiza en la secundaria básica con la manipulación de útiles de laboratorios, aunque en dependencia de las condiciones materiales actuales de la escuela son frecuentemente sustituidos por otros más empleados en la vida cotidiana y se complementa con una acción nueva, el montaje de aparatos.

En el nivel de Secundaria Básica, hasta el curso 2006-2007, se organizaban los programas de las diferentes asignaturas del plan de estudio correspondientes al área de las Ciencias Naturales, y de cualquier otra, teniendo en cuenta la necesidad de que los estudiantes logren la integración del sistema conceptual y procedimental, que propicia la solidez del contenido y el carácter consciente del aprendizaje.

En la actualidad, en que esta área del saber responde a un programa más integrado, se trata de garantizar la interconexión intermateria; en primer lugar, con el nivel precedente y; en segundo, la consistencia interna entre los tres.

Como quiera que las habilidades sean parte orgánica del contenido de estudio resulta evidente que su desarrollo deberá constituir un proceso complejo que tiene lugar como consecuencia, la influencia combinada de las diferentes asignaturas de esta área del conocimiento, en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Este criterio obliga a realizar el análisis detallado de la contribución que puede realizar una asignatura a la formación y el desarrollo de las habilidades prácticas en los estudiantes, lo cual se expresa en la misma relación dialéctica existente entre lo particular y lo general. Es decir, las asignaturas que conforman el área de las ciencias naturales (Biología, Física, Química y Geografía), contribuyen a formar un grupo de habilidades específicas de las ciencias naturales, vista hoy como asignatura en secundaria básica (séptimo grado), que sirven de base para el desarrollo de otras de carácter general.

Si tenemos en cuenta la asignatura de Ciencias Naturales y sus antecedentes en el currículo, es posible establecer una relación de las habilidades prácticas que revelen cierto orden de prioridad en cuanto a la función que le corresponde a esta asignatura en su formación y su desarrollo. Por tal motivo, se consideró necesario agrupar las habilidades prácticas en: específicas y comunes.

Se puede llamar habilidades prácticas específicas a aquellas cuya formación y desarrollo está totalmente condicionado por el estudio de las diferentes asignaturas, en todos los niveles donde se imparten; es decir, solo se forman con el estudio de esas asignaturas.

El segundo grupo de habilidades prácticas comunes son aquellas que además de desarrollarse bajo la influencia del estudio de diferentes asignaturas, son comunes para las ciencias naturales de forma general. Como ya existe esta asignatura, que pretende integrar las específicas, al analizar los programas y documentos normativos vigentes se pueden considerar como habilidades prácticas comunes de las Ciencias Naturales: manipulación de útiles e instrumentos de medición y observación, montaje de aparatos, colección de objetos naturales, confección de modelos de objetos, fenómenos y/o procesos, determinación de magnitudes, y elaboración de tablas y gráficos.

El reconocimiento de estos dos grupos, anteriormente descritos, tiene un valor notable, sobre todo, en el proceso mismo de elaboración de cualquier actividad de carácter práctico, orientada al trabajo con estas habilidades en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las Ciencias Naturales de la secundaria básica actual.

De modo general, se puede plantear que se precisa que los estudiantes asimilen el sistema de conocimientos en íntima conexión con las habilidades que propician un mejor aprendizaje y motivación por el estudio de las asignaturas de ciencias naturales. Se precisa que los profesores, partiendo de un adecuado diagnóstico del aprendizaje de los estudiantes, diseñen las mejores actividades prácticas que favorezcan la formación de dichas habilidades.

Conclusiones

El proceso de formación de las habilidades prácticas, en la secundaria básica se apoya en el aporte del proceso de enseñanza de las asignaturas de las ciencias naturales en función del perfeccionamiento de la personalidad de los educandos.

El análisis del programa y los documentos normativos vigentes en las asignaturas de ciencias naturales en secundaria básica permiten determinar como habilidades prácticas comunes la manipulación de útiles e instrumentos de medición y observación, montaje de aparatos, recolectar objetos naturales, confección de modelos de objetos, fenómenos y/o procesos, determinación de magnitudes, y elaboración de tablas y gráficos.

Referencias

(1)BRITO H. Capacidades, habilidades y hábitos. Una alternativa teórica, metodológica y práctica. Primer Coloquio sobre la inteligencia. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona”; 1989-1990. pp.3-4.

(2)BRITO H. Capacidades, habilidades y hábitos. Una alternativa teórica, metodológica y práctica. Primer Coloquio sobre la inteligencia. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona”; 1989-1990. pp.3-4.

(3)LÓPEZ M. Sabes enseñar a describir, definir, argumentar. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1990. p.3.

(4)SOBERAT Y. La formación de conceptos y el desarrollo de habilidades en la enseñanza de las Ciencias Naturales. En: Lau Apó, F, et. al. La enseñanza de las Ciencias Naturales en la escuela primaria. (25-59). La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 2004. pp. 28.

(5)ROJAS C. Algunas consideraciones sobre el problema del desarrollo de habilidades experimentales en los estudiantes de la Licenciatura en Educación, especialidad Química. Rev Varona, No 20, (61-73). La Habana, Cuba, 1983.

(6)CRUZ B M. Tratamiento metodológico de las habilidades para los trabajos de laboratorio de Botánica en quinto grado. [Tesis en opción al Grado Científico de Doctor en Ciencias Pedagógicas]. La Habana, Cuba: Instituto Central de Ciencias Pedagógicas; 1986.

(7)RECIO P P. La formación de habilidades en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Material mimeografiado. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona”; 2005. p.2.

(8)MINISTERIO DE EDUCACIÓN (MINED). Modelo Secundaria Básica. La Habana, Cuba: Autor; 2007. p. 4.

(9)MINISTERIO DE EDUCACIÓN (MINED). Programas y dosificaciones de Educación Cívica, Ciencias Naturales y asignaturas priorizadas. Provisional, Secundaria Básica. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 2008. p. 17.

Bibliografía

CASTRO Y. Alternativa didáctica: una vía para la formación de habilidades prácticas en las Ciencias Naturales de octavo grado. [Tesis en opción al Título Académico de Máster en Ciencias Naturales]. La Habana, Cuba: Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”; 2010.

MONTES DE OCA N. 2004. [En línea]. La formación y desarrollo de habilidades en el proceso docente-educativo. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico “Félix Varela”. Disponible en: hatt://www.monografías.com. (Consultado, marzo 16 2007).

QUINTERO M. Las actividades prácticas y el desarrollo de habilidades y hábitos en los programas de la especialidad. En: Seminario Nacional a Dirigentes, Metodólogos e Inspectores de las direcciones provinciales y municipales de Educación. Febrero. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 1984.

ROJAS C. Algunas consideraciones sobre el problema del desarrollo de habilidades experimentales en los estudiantes de la Licenciatura en Educación, especialidad Química. (61-73). Rev Varona, No 20, 1988.