Varona

No.54   Enero-Junio, 2012.    ISSN: 1992-82

La prevención de drogas en la formación de profesores

Drug Prevention in the Formation of Teachers

Dr.C. Magali González Lamazares. Profesora Titular. Universidad de Ciencias Pedagógicas ‘‘Enrique José Varona’’. La Habana, Cuba.

Correo electrónico: magaligl@ucpejv.rimed.cu

Dr.C. Berta María de la Cruz Capote. Profesora Titular. Profesora Consultante. Universidad de Ciencias Pedagógicas ‘‘Enrique José Varona’’. La Habana, Cuba.

Recibido septiembre de 2011   Aceptado diciembre de 2011


RESUMEN

Cuba fortalece la función de la escuela en la prevención de drogodependencias, en aras de promover, en las nuevas generaciones, una actitud de rechazo y la elevación de la percepción de riesgo frente a ellas, como compromiso consecuente de su educación; en ello, la función del profesor es esencial. En el trabajo se presenta la estrategia pedagógica asumida en la Universidad de Ciencias Pedagógicas "Enrique José Varona" para la ejecución de  la prevención de las drogodependencias desde el proceso pedagógico, expresada en la relación cultura-educación-sociedad, el enfoque preventivo de las drogodependencias e integrada a la plataforma político-cultural de la universidad. La estrategia pedagógica reúne los aspectos esenciales para su puesta en práctica, a fin de mejorar la ejecución de la prevención de drogodependencias en el proceso pedagógico, con alternativas que pueden ser aplicadas en diferentes perfiles de la formación inicial universitaria por su pertinencia pedagógica.

PALABRAS CLAVE: salud, educación, drogodependencia, prevención, promoción.

ABSTRACT

Cuba strengthens the function of the school in the prevention of drug dependency, in hopes of promoting in new generations an attitude of rejection and an high perception of the risks of it, as a consequent compromise of its educational system, and within it the role of the teacher is essential. This work presents a pedagogical strategy assumed by the University of Pedagogical Science "Enrique José Varona" for the execution of the prevention of drug dependency from the pedagogical process expressed in the relation education-culture-society, while focusing on prevention of drug dependency integrated with the political-cultural platform of the university. The pedagogical strategy joins together the essential aspects for its implementation, in hopes of bettering the execution of the prevention of drug dependency in the pedagogical process with alternatives that can be used in different profiles of the initial university formation for its pedagogical relevance.

KEY WORDS: prevention, drug dependency, promotion, health, education.


Introducción

El fenómeno del abuso de drogas no es un problema aislado de una sociedad concreta, tiene un carácter transnacional que no escapa a la globalización; a la homogeneización de los problemas y a la situación económico-social que interactúa con los valores de los pueblos. Afecta a muchos y se requieren estrategias conjuntas con la participación de todos los agentes preventivos posibles para abordarlo.

En la situación actual, además de los cambios culturales y sociales de esta época, ha influido la posibilidad de las comunicaciones, los intercambios y la progresiva satisfacción del comercio. Otro fenómeno actual es el del tiempo libre y la diversión de los adolescentes y la primera juventud, en la que es frecuente su asociación con el consumo de drogas recreativas.

Cuba, como integrante de la comunidad internacional, también se enfrenta a amenazas y riesgos cada vez mayores en la misma medida en que se ha abierto al comercio, al turismo y al intercambio económico con el exterior, y se propone, como lo hace con las más graves y mortíferas enfermedades, prevenirlo y alejarlo a tiempo.

Se impone la necesidad real de formar a un individuo con un sistema general de conocimientos, habilidades, valores y modos de actuación, tanto de carácter intelectual como práctico, en el que la prevención se constituya en un planteamiento único, realizada por medio de la labor educativa y actuando en cada una de las etapas del desarrollo de los individuos y los grupos.

Un gran interés despiertan los aspectos teóricos relacionados con la prevención de las adicciones; ello preocupa a los investigadores de varias ciencias, en especial de la Pedagogía, la Psicología y la Sociología.

Se advierte, de esta manera, el orden de prioridad que se le confiere a este tema y la orientación hacia la labor mancomunada entre la escuela, la familia y la comunidad.

Es incuestionable que, para lograr este empeño en el desarrollo de la prevención de drogodependencias, se requiere de un profesor que sea guía, orientador y que desarrolle alternativas pedagógicas que le permitan, entre otras, identificar factores de riesgo, lo que implica, además, saber diseñar y ejecutar actividades que promuevan conductas responsables, en sinergismo con la orientación a la familia y el trabajo comunitario.

Los profesores deben concretar líneas de trabajo social que estén en correspondencia con los objetivos permanentes de prevención. Un objetivo esencial en su formación es prepararlos para que puedan desarrollar, con sus estudiantes, una práctica pedagógica coherente y sistemática que promueva en ellos una actitud de rechazo frente a las drogas.

De ahí el imperativo de que la prevención de las drogodependencias se integre a la estrategia de formación inicial y permanente de las universidades de ciencias pedagógicas, instituciones a las que corresponde garantizar la eficiente preparación del personal docente para satisfacer las exigencias de la sociedad y de la escuela cubana.

El objetivo del trabajo es exponer la estrategia pedagógica utilizada en la Universidad de Ciencias Pedagógicas ‘‘Enrique José Varona’’, para la ejecución de la prevención de las drogodependencias desde el proceso pedagógico.

Desarrollo

La prevención de drogodependencias, como actividad pedagógica, supone tener en cuenta su condicionamiento e implicaciones para la sociedad, en lo que representa como fenómeno social, como parte de la cultura, y ha de potenciarse en todos los espacios del proceso pedagógico. Esto ofrece un punto de partida para explorar estas relaciones en el marco cultural.

A decir de Castro F, ‘‘será necesario buscar el máximo de calidad y buscar formas nuevas para que el desarrollo de la conciencia, la cultura general integral, la relación escuela-familia y la atención diferenciada de cada alumno queden garantizados (…) hoy buscamos un sistema educacional que se corresponda cada vez más con las necesidades morales y sociales de los ciudadanos en el modelo de sociedad que el pueblo de Cuba se ha propuesto crear’’.(1)

La cultura en Cuba es una meta explícita en la política educacional y en el modelo de hombre que se aspira a formar para dar continuidad a la Revolución y al Socialismo.

Desde esta perspectiva se erige una relación dialéctica y dinámica entre cultura-educación y sociedad. La actuación preventiva que se propone es considerada, por las autoras, plataforma política cultural en la formación del profesor, se integra a la cultura general integral de la profesión, como componente ideológico, político y cultural del desarrollo integral.

La estrategia pedagógica tiene en cuenta el enfoque sociopolítico de las acciones, orientadas a incentivar procesos culturales e interpersonales que favorezcan el compromiso con la realidad circundante; en función de su mejoramiento, permite la entrada al proceso pedagógico de las informaciones provenientes de la sociedad, la cultura y la ciencia, atiende las diferencias individuales de los estudiantes con el afianzamiento de las posiciones críticas frente a los consumos y sus consecuencias, recurriendo para ello a un diagnóstico continuo, que determina la orientación y la concepción integral del trabajo pedagógico. Se caracteriza por ser integradora, flexible, sistemática, prospectiva y transformadora.

La estrategia tiene, además de los fundamentos  expresados, los componentes siguientes: objetivo general, direcciones de trabajo, etapas y acciones por etapas (Fig.1).

Fig. 1. Estrategia pedagógica para la prevención de drogodependencias en la formación de profesores.

Estos componentes están relacionados dialécticamente.

Tiene como objetivo general: contribuir a la prevención de drogodependencias en la formación de profesores, y se estructura a partir de dos direcciones interactuantes: la político-ideológica y la teórico-metodológica, encaminadas a integrar estos aspectos y a orientar la práctica pedagógica. Estas direcciones constituyen lineamientos generales que responden a objetivos específicos, que facilitan el tránsito del estado actual al cumplimiento del objetivo general de la estrategia.

La dirección político-ideológica constituye premisa en el desarrollo de las acciones de carácter teórico- metodológico y responde a la pregunta ¿qué? y ¿para qué? y tiene el objetivo específico de preparar a los directivos, profesores, instructores educativos y estudiantes, en la visión política y cultural de las drogas y su prevención, en correspondencia con la necesidad de lograr el reconocimiento consciente de los implicados, al asumir la ejecución de la estrategia, de forma coherente e intencionada.

La dirección teórico-metodológica responde a la interrogante ¿Cómo es? ¿Cómo aplicarlo? y tiene el objetivo específico de preparar teórica y metodológicamente a los directivos, los profesores y los estudiantes, para que puedan introducir, en la práctica pedagógica, las acciones diseñadas.

Las acciones de cada dirección se concretan en cada una de las etapas y estas, a su vez, concretan sus objetivos en cada dirección.

Primera etapa. Etapa de diagnóstico y planificación. Esta etapa tiene como objetivo identificar el estado actual y las potencialidades de los directivos, los profesores, los instructores educativos y los estudiantes para la prevención de drogodependencias, y coordinar y movilizar las influencias educativas de la comunidad educativa para la prevención de drogodependencias.

Segunda etapa. Etapa de ejecución. En esta etapa se implican a los directivos, los profesores, los instructores educativos y los estudiantes en las influencias instructivas y educativas de la prevención de drogodependencias.

Tercera etapa. Etapa de control parcial. Esta etapa tiene el objetivo de dar seguimiento sistemático, como parte del sistema de control interno establecido, a las acciones que se ejecutan en todos los componentes y los escenarios en que se desarrolla el proceso pedagógico.

Cuarta etapa. Etapa de evaluación de los resultados finales. Esta etapa tiene el objetivo de valorar la contribución de la estrategia pedagógica a la prevención de drogodependencias en la formación de profesores.

Algunos de los resultados más significativos obtenidos con la aplicación práctica de la estrategia, en los directivos, los profesores, instructores educativos y estudiantes, son:

Directivos

-Los directivos reconocieron tener dominio de los documentos que norman la prevención de drogodependencias en el sistema educacional, obteniendo resultados entre las categorías de alto (33,3%) y medio (26,6%); sin embargo, el 13,3 obtiene la categoría de bajo.

-Un aspecto de interés lo constituyó que el 33,3% (nivel medio) de los directivos pudieron ampliar el diagnóstico de sus estudiantes al conocer cómo piensan y actúan en relación con las drogas.

-Las actividades metodológicas demostrativas y la utilización de los medios de comunicación obtuvieron valores similares, entre las categorías de alto y medio (20% y el 40%); estos resultados se correspondieron con la utilización intencionada de estos recursos por parte de los profesores en las actividades.

-El 40% de los directivos alcanzó la categoría de muy alto, en lo referido a utilizar los medios de comunicación social para establecer una relación vivencial con la sociedad y desarrollar la valoración crítica de los participantes frente a las drogas.

-El 40% de los directivos obtuvo la categoría de muy alto y el 26,6% la categoría de alto, en la integralidad de las actividades realizadas en todos los componentes curriculares, niveles organizativos de la carrera y la extensión universitaria; sin embargo, aún se mantuvieron en las categorías de bajo y muy bajo el 13,6% y el 6,6%, respectivamente.

-El 26,6% alcanzó las categorías alto y medio, en lo referido a tener en cuenta que las actividades respondieran a las necesidades diagnosticadas. Tener en cuenta el diagnóstico de los implicados resultó esencial al planificar las acciones preventivas, sobre todo porque contar con este marco de referencia, permite mayor precisión de los resultados que se esperan. No obstante, en ello hay que continuar trabajando, pues el 6,6% alcanzó las categorías de bajo y muy bajo, para ambos indicadores.

-La incorporación de las actividades al sistema de control de la facultad fue evaluado en las categorías de alto y muy alto por el 46,6% y el 33,3% de los directivos, ello es importante para la toma de decisiones oportunas, teniendo en cuenta la responsabilidad del directivo, en la orientación y la conducción de la labor preventiva; sin embargo, se mantuvieron en el nivel bajo y muy bajo el 13,6% y el 6,6%.

-Los resultados anteriores fueron similares a los obtenidos en lo referido a la evaluación de las actividades, el 46,6% fue evaluado en la categoría de muy alto y el 33,3% en la categoría de alto; sin embargo, se mantuvo el 13,6%  en la categoría de bajo y el 6,6% de muy bajo.

-El 53,3% obtuvo la categoría de medio y el 13,3% la categoría de alto en lo referido a la relación que se establece entre las actividades de preparación política y las metodológicas; no obstante, es necesario continuar mejorando esta relación, pues existen directivos que alcanzaron las categorías de bajo y muy bajo.

Profesores

En cuanto al conocimiento y la aplicación de los documentos que norman la prevención de drogodependencia en el sistema educacional, es significativo que el 42,8% de los profesores alcanzó la categoría de medio y el 14,2% la categoría de alto.

Mejorar el diagnóstico integral de los estudiantes y tenerlo en cuenta al planificar las actividades preventivas de drogodependencias, alcanzó la categoría de alto en el 35,7% de los profesores. Esto resultó esencial en el despliegue de acciones diferenciadas con los estudiantes; no obstante, en ello hay que continuar trabajando, ya que el 14,2%, aún está en la categoría de bajo.

El 64,2% de los profesores se ubicó en la categoría medio en relación con la unificación de criterios de actuación en el colectivo de año, respecto a la prevención de drogodependencias.

Este resultado también se asocia con los obtenidos en cuanto a mejorar su posición como facilitadores en la aplicación del procedimiento metodológico en los talleres de reflexión y debate, en los que el 50% se ubicó en la categoría de alto, mientras la incorporación sistemática del uso de los medios de comunicación social, también obtuvo resultados favorables, ya que el 42,8% se ubicó en la categoría de muy alto y el 28,5% en la categoría de alto.

En lo referido a sistematizar el control parcial y la evaluación de las actividades de drogodependencias, el 50% se ubicó en la categoría medio y el 28,5% en la categoría de alto.

Instructores educativos

Es significativo que más del 90% tuvo una alta valoración del proceso de orientación y planificación que se ha hecho para desarrollar la prevención de drogodependencias.

El 100% se refirió a la contribución del programa que se les desarrolló, como parte de su preparación; señalaron que les permitió identificar el papel que les corresponde en la prevención de drogodependencias en la residencia estudiantil y se refirieron a que este programa cumplió su preparación junto con los talleres de reflexión y debate.

Evaluaron de excelente las actividades realizadas y como elemento a superar sugirieron contar con más tiempo para la ejercitación de actividades y la continuidad de su capacitación con la inclusión de nuevas temáticas.

Estudiantes

-El 59,5% de los estudiantes alcanzó la categoría medio en el conocimiento de los documentos que norman la prevención de drogodependencias. El 64,4% elevó su modo de actuación vinculado con la función social que realizan en la práctica preprofesional, a la categoría medio; sin embargo, el 22,9% se encuentra aún en la categoría de bajo y el 4,3% en muy bajo.

-Es significativo que el 64,4% se ubicó en la categoría de medio en relación con la información sobre las drogas, causas y consecuencias con un enfoque integral.

-El 75,9% de los estudiantes alcanzó la categoría de medio en lo referido a la participación activa en la reflexión y el debate.

La aplicación práctica de la estrategia pedagógica evidenció ascensos graduales en:

-El nivel de información de directivos, profesores, instructores educativos y estudiantes, en relación con las drogodependencias y su prevención, y en particular, en el dominio de los documentos rectores que rigen la actividad en el sistema educacional.

-La amplitud de escenarios de influencias educativas en el proceso pedagógico para la prevención de drogodependencias, en los que se destaca la residencia estudiantil.

-Se favoreció la relación político-pedagógica integrada a la preparación de la prevención de drogodependencias en el proceso pedagógico.

-Se incorporó a la reflexión y el debate, la crítica y el modo de actuación profesional, a la prevención de drogodependencias en la que, además, se priorizó el lugar de los estudiantes en la participación reflexiva acerca de los elementos teóricos sobre las drogas y sus consecuencias, desde la realidad social.

Conclusiones

La estrategia pedagógica propuesta, fundamentada en la relación cultura-educación-sociedad y en la unidad dialéctica de la dirección político-ideológica y la teórico-metodológica, contribuye a la preparación de directivos, profesores, instructores educativos y estudiantes, para la ejecución de la prevención de drogodependencias, desde el proceso pedagógico.

La constatación de la estrategia pedagógica propuesta se realizó con la aplicación de diferentes métodos de investigación, que posibilitaron comprobar el mejoramiento en la preparación para la ejecución de la prevención de drogodependencias y evidencian que la propuesta es pertinente y factible.

 

Referencias

(1)CASTRO F. Discurso pronunciado en el acto de inauguración de la Escuela Experimental ‘‘José Martí’’. La Habana, Cuba. Septiembre, 2002.

 

Bibliografía

CALAFAT A. Cultura de la diversión y consumo de drogas en España. Cádiz, España: Editorial Pirámide; 1999. p. 649.

PASCUAL P J. Trabajo preventivo relacionado con el uso indebido de drogas. La Habana, Cuba: Editorial Molinos Trade, S.A; 2005. p.16.