Varona

No.53   Julio-Diciembre, 2011.    ISSN: 1992-82

La superación de cuadros y reservas

The Upgrading of Administrators and Administrators-to-be

Dr.C. Rosalina García Chirino. Profesora Auxiliar. Universidad de Ciencias Pedagógicas “Enrique José Varona”. La Habana. Cuba.

Correo electrónico: rosalinagc@ucpejv.rimed.cu

Dr.C. Lidisbet Cardoso Camejo. Asistente. Universidad de Ciências Pedagógicas “Enrique José Varona”. La Habana. Cuba.

Correo electrónico: lidisbetcc@ucpejv.rimed.cu

Recibido junio de 2011   Aceptado septiembre de 2011


RESUMEN

El presente trabajo tiene como objetivo realizar una breve sistematización de la superación de los cuadros y reservas educacionales, llamando a la reflexión y a la necesidad de la búsqueda de alternativas atemperadas al momento histórico. El análisis se realizó bajo presupuestos de la Educación Avanzada.

PALABRAS CLAVE: superación, desempeño, cuadro, reserva.

ABSTRACT

This work has the objective of systematizing briefly the upgrading of educational administrators and administrators-to-be calling for reflection and the need of finding alternatives responding to the historical moment. This analysis was carried out under the Advanced Education framework.

KEYWORDS: upgrading, performance, administrators, administrators-to-be


Introducción

Se es testigo de la vitalidad del siglo XXI. El hombre es el protagonista principal del desarrollo científico-tecnológico con que se vive ante un futuro incierto y con voluntad, hurga el camino que conduzca al desarrollo (pleno del individuo); sin embargo, en esta etapa histórica que se protagoniza no se ha dado respuesta a los problemas globales que nos afectan. ¿Quiénes serán los líderes del mañana que enfrentarán estos y otros desafíos que están latentes? ¿Estarán preparados para asumir la difícil tarea de dirigir un estado, una entidad o simplemente una institución?

Esta preocupación está presente en el sector educacional cubano, que se está transformando sistemáticamente (y está inmersa una colosal Batalla de ideas).

La superación de los cuadros y las reservas es una vía para la preparación de los líderes, las alternativas que se utilicen para contribuir a su desempeño profesional y humano son punto de partida para minimizar los retos de este mundo globalizado. Defender el espacio de la superación y las alternativas atemperadas al momento histórico que se empleen para esta importante responsabilidad, es imprescindible.

Desarrollo

A través de la historia de la humanidad, en todas las épocas y en todos los sistemas sociales ha existido una lógica preocupación por la preparación de sus dirigentes. En la etapa más primitiva esta situación se presentaba en ciertas tribus en las cuales el hechicero titular no podía retirarse, casi siempre por vejez o enfermedad si antes no dejaba a su sustituto completamente preparado para el cargo.

En las sociedades antiguas, la organización era muy simple y sus dirigentes no requerían de altos niveles de preparación, debido a estas circunstancias el énfasis se ponía en la preparación de los dirigentes de más alto nivel, aunque esto no se cumplía siempre y se daban casos de reyes, emperadores, faraones y papas de muy escasa cultura.

La preparación de los individuos para la dirección en todos los tiempos ha dejado huellas de preocupación, en la educación; el Héroe Nacional, José Martí, avizoraba con una interrogante en que afloraba la relación existente entre el desarrollo de la educación y la formación de dirigentes: “…¿Cómo han de salir de las universidades los gobernantes, si no hay universidades en América donde se enseñe lo rudimentario del arte del gobierno?”(1)

En Cuba, específicamente el panorama en los primeros años de la Revolución en cuanto a la preparación de los cuadros, se refiere que se pudiera evaluar de muy difícil. Fue un cúmulo de etapas vividas a toda prisa.

Cuando se hizo patente que una nueva clase social tomaba el poder se apreciaron las limitaciones que tendría el ejercicio del mando estatal a causa de las condiciones en que se encontraba el Estado, sin cuadros, para llevar adelante tareas impostergables que debían cumplirse en el aparato estatal, en la organización política y en todo frente económico.

Al nacionalizarse las empresas cubanas se produjo una gran necesidad de técnicas administrativas; por otro lado, aparece el éxodo de directivos con sus técnicas de dirección y producción hacia otras partes de América o para los mismos Estados Unidos.

Guevara E, en 1962, expresó que “en el momento siguiente a la toma del poder, los cargos burocráticos se designaron a dedo, no hubo mayores problemas, porque todavía no estaba rota la vieja estructura”.(2)

De ese modo, la preparación de los cuadros se convirtió en uno de los problemas más grandes y difíciles de resolver. En todos los sectores se desarrollaron alternativas para superar a sus dirigentes.

El desarrollo histórico del proceso de superación de los directivos educacionales, tras el triunfo de la Revolución, se distinguió en cuatro períodos: primero, 1959-1973; segundo, 1973-1983; tercero, 1983-1991; y cuarto, desde 1991 hasta el 2000; todos ellos se pueden deslindar a partir de los principales objetivos y tareas de la política educacional y los niveles de desarrollo educativo logrados en el país, tanto en lo cuantitativo como en lo cualitativo y en el perfeccionamiento de la política relativa al trabajo con los cuadros.

El período de 1959 a 1973, se correspondió con el inicio de la Revolución Educacional como contenido esencial que dio solución a los grandes problemas del pasado neocolonial y a la reorganización y tecnificación del Ministerio de Educación. En esta etapa se tomaron las medidas inmediatas para eliminar al analfabetismo y garantizar la extensión de los servicios educacionales. Tuvo como rasgo esencial la emergencia y el dominio de formar con cursillos y seminarios y los objetivos se centraron totalmente en el logro de una formación pedagógica elemental y en el dominio del contenido de las disciplinas que se impartirían en el centro.

El segundo período de 1973 a 1983, se asocia con el inicio del primer plan de perfeccionamiento del Sistema Nacional de Educación a partir de 1975. El crecimiento abrupto de las matrículas en el nivel de Educación Media y el surgimiento de las escuelas en el campo y el Destacamento Pedagógico Manuel Ascunce Domenech como fórmulas revolucionarias para dar respuesta a dicho fenómeno, así como en la creación del Ministerio de Educación Superior y el Sistema de Educación de Postgrado en 1976 y el surgimiento de los institutos superiores pedagógicos en 1976.

El tercer período de 1983 a 1991, coincide con el establecimiento jurídico del Sistema de trabajo con los Cuadros del Estado (Decreto Ley–número 82 del 13 de septiembre de 1984) y la concepción de la preparación y la superación de los cuadros, como uno de los subsistemas; tuvo como contexto el planteamiento de la voluntad política y el inicio de las acciones para el logro de la calidad del sistema educativo, con las consecuencias que ello implica en la preparación y superación de los dirigentes educacionales.

Las características principales del proceso de formación y superación de los directivos educacionales durante el segundo y tercer período fueron:

La centralización (en el desarrollo) de las acciones de superación se centraron en los directivos educacionales y directores de centros particularmente, aunque tendía a favorecer la unidad de sus objetivos y sus contenidos, lo que era una necesidad del momento histórico, tuvo una conjugación efectiva con acciones concebidas y ejecutadas a partir de la problemática territorial, y las necesidades a partir de esta, y las necesidades diferenciadas de la superación de los directivos.

El cuarto período de 1991-2000 coincide con el desarrollo del Período Especial y se enmarca en el proceso de perfeccionamiento de la Política de Cuadros, en el que se inscribe la aprobación del Decreto Ley 196 de 1999 y las transformaciones que se desarrollan en la educación cubana desde esta fecha y tiene su centro en la optimización del proceso educativo.

Las autoras revelan que en el período de las transformaciones educacionales (2001-hasta la fecha), la superación de cuadros y reservas se enfatiza, y se fortalece el trabajo que se realiza con la Reserva Especial Pedagógica, ya existen instituciones dirigidas por miembros de la Reserva Especial Pedagógica. La preparación y la superación de cuadros y reservas también han permitido que estos alcancen el título académico de máster y estén dirigiendo en la base.

A pesar de los esfuerzos realizados existen ineficiencias en el desempeño de los cuadros que atentan contra el éxito del cumplimiento de sus funciones:

No se logra siempre el proceso de selección y de preparación del cuadro con una concepción integral.

La preparación que se diseña y se ejecuta a los cuadros y reservas con frecuencia aborda temas generales, sin tener en cuenta el enfoque personológico que debe primar.

Si bien se realiza un diagnóstico para caracterizar a (los profesionales que integran) los cuadros y reservas, este no siempre arroja todas las necesidades, los problemas educativos y las potencialidades de los sujetos.

Se presentan imprecisiones de los objetivos y las metas propuestas, según la estrategia de la escuela, para lograr la transformación del centro.

En los planes individuales de la reserva no siempre aparece explícita la orientación hacia el cumplimiento de los componentes de dirección.

Dentro del horario de trabajo y los planes individuales de los cuadros y reservas no siempre se contempla la planificación del tiempo de autopreparación, relacionada con la política de cuadros.

En la Estrategia Nacional de preparación y superación de cuadros del gobierno del estado y sus reservas en el 2004, se llamó a garantizar la preparación político-ideológica (Estrategia Maestra) de los cuadros y sus reservas de todos los sectores del país.

Por otro lado, aparecen los componentes de dirección:

A continuación se destaca cuál es la esencia de cada uno de los componentes para comprender qué le aportan ellos a los cuadros y sus reservas y sobre esa base proyectar su preparación.

Componente preparación y superación en dirección.

Es necesario preparar a los cuadros y las reservas en el dominio y el empleo de la teoría, los métodos técnicos, herramientas que la ciencia de la dirección ha desarrollado en los últimos tiempos, mediante un proceso de evaluación crítica y partiendo de la identificación de las necesidades de cada equipo de dirección y sus cuadros y reservas para que obtengan habilidades y las lleven a la práctica, adaptándola de manera creadora a sus condiciones, se tiene en cuenta el precepto martiano “Injértese en nuestras repúblicas el mundo, pero el tronco ha de ser de nuestras repúblicas”.(3)

Componente preparación y superación para la defensa.

Debido a la inmensa red del poder militar, económico e ideológico que poseen los Estados Unidos de Norteamérica, la cual es utilizada con métodos y concepciones fascistas, mediante sus anuncios constantes y la ejecución de ataques, lo cual constituye una amenaza seria para nuestra pequeña isla; la defensa, por lo tanto, requiere máxima importancia para preservar la soberanía e independencia nacional, la integridad del país, el carácter socialista y social establecido en La Constitución de la República, así como para proteger a la población y a la economía; es decir, mantener la vida de la Nación. Saber defenderse en la guerra como en la paz, es la principal premisa.

Componente preparación y superación económica.

La preparación económica constituye una necesidad vital para todos los cuadros y reservas, los que deben dominar los procesos económicos de su entidad, contribuyendo a la formación de una cultura económica en todos los trabajadores, así como mantenerse actualizados sobre la situación económica internacional en que se desenvuelve la economía cubana.

El control interno, el manejo del presupuesto, el sistema de auditoría, la disciplina económica financiera y todos aquellos aspectos que contribuyen a la lucha contra el descontrol, las ilegalidades, el delito y la corrupción son aspectos que deben reforzar a la preparación de estos recursos humanos.

En el desarrollo de este componente es válido destacar que no se trata “del control por el control”. El control es indispensable, útil y provechoso mientras sea beneficioso económicamente; sin embargo, muchos dirigentes se quejan del exceso de controles que le frenan su gestión operativa, pero si esto sucede así, es que constituyen mecanismos burocráticos que complican sin razón una determinada actividad.

Componente preparación y superación técnica y profesional.

En el milenio caracterizado por grandes transformaciones de conocimientos científico-teóricos, la preparación técnico profesional adquiere una relevancia de primer orden.

La búsqueda de la idoneidad como condición profesional que realza, mantiene y desarrolla en el ejercicio de las funciones asignadas, mediante un proceso de capacitación continua, esta idoneidad debe ser el punto de consagración de la superación profesional.

Con lo referido anteriormente se demuestra que están establecidos los componentes para preparar a los directivos.

¿Qué sucede en muchas ocasiones con la superación de las reservas?

Durante la celebración de los congresos del Partido celebrados en Cuba ha quedado explícita la importancia de poseer una visión clara de quiénes pueden liderar a cada grupo de personas, o quiénes son capaces de sustituir a un cuadro explicando lo necesario de observar a esos hombres con cualidades que los distinguen de los demás, para encaminar a la sociedad por los caminos del desarrollo.

Existen cuadros que se resisten a la superación de sus reservas, restringiendo el tiempo para esta importante tarea y su delegación, cuando solamente lo responsabilizan con otras menos importantes, “El dirigente a cualquier nivel, que no ha sabido escoger o proponer y formar o ayudar a formar a su sustituto, o es un jefe con deficiencias –a veces se trata de un vanidoso que no quiere tener a alguien a su lado que le haga sombra, a esos también los conocemos– porque ha sido incapaz de detectar los verdaderos valores de quiénes lo rodean, no ha sido capaz de educar a sus subordinados para que erradiquen sus deficiencias o errores.

“No es secreto para nosotros, que hay algunos jefes a los que no les agrada tener segundos capaces…”.(4)

En el camino que atraviesa el sistema educativo cubano es importante conocer cada problema y; en este sentido, el problema de la dirección es un factor primordial; cada día ingresan más jóvenes a los claustros educacionales que se incorporan a las filas de los educadores con muchos deseos de hacer, no se niega que les falta experiencia en dirección, pero quién dijo que la experiencia es sinónimo de éxito. En ocasiones, los cuadros con experiencias demuestran dogmatismo, inmovilismo, se ponen de espaldas a la vida, y muchos hasta llegan a pensar que no pueden ser sometidos a críticas por los directivos más jóvenes.

El cuadro debe dar alas a la creatividad de su reserva joven, dejarla hacer sin temor a ser superado, una de las vías para alcanzar esa cualidad la alcanzará superándose para formarse como líder.

En el momento de estructurar y organizar la superación de la reservas, hay que considerar al trabajador directivo no como un estudiante cualquiera, sino como una personalidad creadora, que si ha recibido un máximo de información relacionada con los métodos prácticos actuales, también podrá ser capaz de encontrar una solución afectiva ante una solución determinada a la que se enfrentan en la práctica de dirección.

El jefe es el máximo responsable de la preparación y la superación de su colectivo, responde por ella como una de sus principales obligaciones en el desarrollo de la política de cuadros de su institución. El principal formador de cuadros es el jefe de cada nivel, su acción diaria, su ejemplo, sus métodos y estilos de dirección serán la mejor escuela para su equipo de trabajo. De acuerdo con su imaginación y creatividad en el proceso de dirección alcanzará mejores resultados. “Hay que ir conciliando inteligentemente la experiencia de los cuadros más maduros y avezados, con los bríos, el ímpetu, el entusiasmo, las energías, la combatividad y la frescura de los jóvenes valores”.(5)

Aspectos que consideran las autoras se deben tener en cuenta para la superación de los cuadros y las reservas:

-Conocer el diagnóstico de los participantes.

-Seleccionar profesores competentes.

-Utilizar diferentes alternativas, teniendo en cuenta los diferentes subsistemas.

-Utilizar el Programa audiovisual y el “Programa Libertad”.

-Atender el aspecto personológico.

-Propiciar un clima psicológico adecuado, que favorezca el acto creativo.

-Desarrollar las habilidades investigativas.

-Vincular la actividad docente educativa con la vida y la práctica social.

-Seleccionar un horario para la preparación, que no interfiera en la vida familiar.

-Reconocer y estimular a los profesores y participantes destacados.

Las alternativas de preparación y superación que se proponen para los cuadros y reservas, son formas conceptualizadas por la educación y procedimientos establecidos por el Ministerio de Educación (MINED): autopreparación, talleres, seminarios, intercambios de experiencias, eventos científicos, ayudas metodológicas, etcétera.

Aspectos que se deben tener en cuenta en la propuesta para la evaluación de los cuadros y las reservas en la superación:

-La puntualidad y asistencia.

-La disciplina.

-La participación de los implicados.

-El uso de la nueva tecnología.

-El dominio del contenido.

-El vínculo del contenido con el pensamiento martiano, guevariano, de Fidel, los cinco héroes prisioneros en el imperio, otras personalidades.

-El vínculo del contenido con los componentes de dirección y la estrategia Maestra.

-Los conocimientos sobre los documentos rectores de la política de cuadros.

-El uso del “Programa Libertad”.

-El uso de la Lengua materna.

-La creatividad.

Debe quedar claro que la evaluación principal de los resultados de la preparación y la superación de los cuadros y sus reservas será por el impacto de esta con los resultados de su trabajo en su desempeño como cuadro.

En el desarrollo de la calificación de los cuadros, como proceso interrumpido, de acuerdo con la dinámica del desarrollo económico social del cuadro o reserva, el propio sujeto sentirá la necesidad de asimilar nuevos conocimientos, debe convertirse en un interés propio, por la vía de la autosuperación, que lógicamente exige disciplina, perseverancia y fuerza de voluntad, destacándose en la conciencia de estos recursos humanos que no toda superación debe venirle desde “fuera” por las exigencias del Partido y el Estado. Cada dirigente se concientizará de su futuro como directivo, adquiriendo una adecuada cultura, conocimientos profesionales amplios y, ante todo, prevaleciendo en su modo de actuación la unidad dialéctica entre teoría y práctica.

Cada cuadro es responsable de su preparación y su superación, es su deber estudiar, desarrollarse, aumentar sus conocimientos y habilidades para alcanzar la excelencia, aprovechar todas las oportunidades para mantenerse actualizado. Todo cuadro debe ser autodidacta, fomentando su disciplina en el estudio y los hábitos de adecuado aprovechamiento del tiempo, e inculcar en los demás y especialmente en su reserva, ansias de estudiar.

Se debe contribuir a mantener y ampliar la preparación cultural, técnica y especializada de los cuadros, que hayan alcanzado la enseñanza media superior y en correspondencia con las exigencias del desarrollo socioeconómico y de lo que ello influye para su mejor desempeño.

Nadie debe dudar  de la urgencia de preparar a cuadros y reservas, la solución no es “cerrar las instituciones” y enviar a todos a estudiar. Se hace necesario ser objetivos y analizar cómo se pueden solucionar las carencias educativas en el menor tiempo posible y desde la propia institución. Hay que tener en cuenta que la complejidad de una dirección participativa de los centros educativos es evidente. Las transformaciones educacionales exigen una alta calificación profesional de cuadros y reservas y difícilmente pueden salir adelante si los colectivos laborales que deben conducirse no creen en ellas o no están mínimamente preparados para cumplir su misión.

Los cuadros y reservas poseen una alta responsabilidad ante la sociedad de igual manera, deben recibir la enseñanza para que en el decurso de su dirección tomen decisiones correctas, siempre alejándose de la corrupción y concientizándose con la necesidad de una dirección científica.

La educación debe preparar no para que se brinde reglas sino resultados, la creatividad no dará paso a la improvisación en la superación de los recursos humanos y la maestría pedagógica de los conductores facilitará la dirección participativa y el desarrollo institucional.

El Maestro con su pensamiento optimista expresó que “Es hermoso asomarse a un colgadizo, y ver vivir al mundo: verlo nacer, crecer, cambiar, mejorar…”.(6)

Así de hermoso es asomarse a las puertas de las instituciones educativas y ver a sus cuadros y reservas en sus tribunas, no de erudición, sino de compromiso, verlos hacerse cuadros dirigentes del país, con profesores competentes, ejemplo de alumnado, verlos crecer como cuadros, transformarse, mejorar profesional y humanamente.

Conclusiones

Revolucionar la preparación de cuadros y reservas, en el momento histórico que vive Cuba hoy, es indiscutible, exige un caudal de esfuerzos y sacrificios que con el ingenio, la dedicación y la responsabilidad de todos se puede lograr.

El jefe es el máximo responsable de la preparación y superación de su colectivo, responde por ella como una de sus principales obligaciones en el desarrollo de la política de cuadros de su institución. Es el principal formador de cuadros de cada nivel, su acción diaria, su ejemplo, sus métodos y estilos de dirección serán la mejor escuela para su equipo de trabajo. De acuerdo con su imaginación y creatividad en el proceso de dirección alcanzará mejores resultados.

No se necesita ser un país opulento para mantener sus recursos humanos preparados, se necesita voluntad, inteligencia, unidad, perseverancia; es importante no dejar a un lado la infraestructura productiva y de servicios del territorio en general y en particular de las instituciones docentes.

La convicción y la conciencia revolucionaria hacen que los cuadros y reservas encuentren a diario soluciones audaces para asegurar la educación, la salud, la productividad, venciendo limitaciones materiales producidas por el bloqueo; vale la pena combatir a los ineficaces, pero romper esquemas y dar reforzamiento positivo, el apoyo objetivo, la solución inmediata y la estimulación necesaria que requieren cuadros y reservas capaces y eficientes para seguir desempeñando su cometido.


Referencias

1MARTÍ J. Nuestra América. Obras completas. T. 6. Segunda edición. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1975. p.17.

2GUEVARA E. El cuadro columna vertebral de la revolución. Selección de documentos políticos, jurídicos y de consulta sobre la política y trabajo, con los cuadros. La Habana, Cuba: Editora política; 1996.

3MARTÍ J. Nuestra América. Publicado en el periódico el Partido Liberal. En: Obras Completas. T. 6. La Habana, Cuba: Editorial de Ciencias Sociales; 1975.

4CASTRO R. Clausura de la Asamblea de Balance del PCC. Provincia Santiago de Cuba, 1985. Selección de documentos políticos, jurídicos y de consulta sobre la política y trabajo, con los cuadros. La Habana, Cuba: Editora Política; 1986. p.167.

5CROMBET J. Clausura de la Asamblea de Balance del PCC. Provincia Granma, 1985. Selección de documentos jurídicos y de consulta sobre la política y trabajo, con los cuadros. La Habana, Cuba: Editora Política; 1986. p.173.

6MARTÍ J. Carta a María Mantilla. Cuaderno Martiano II. La Habana, Cuba: Editorial Pueblo y Educación; 1985. p.104.

Bibliografía

ALONSO S. Conferencia hacia la dirección estratégica y la administración por objetivos en el Ministerio de Educación. III reunión regional con jefes de departamentos de Dirección Científica Educacional y de las Unidades de Cuadros de las direcciones provinciales de educación y de los institutos superiores pedagógicos que se desarrolló en Pinar del Río, Sancti Espíritus, Santiago de Cuba y La Habana. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 1996.

AÑORGA J, ET AL. La evaluación formativa de la Educación Avanzada. Material impreso. La Habana, Cuba: Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona”; 1996.

GARCÍA R. Otra mirada a la superación de cuadros, dirigentes y funcionarios en el Municipio de Educación de La Lisa. Material impreso. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 2006.

GARCÍA R. Alternativas para la superación de cuadros y reservas. Material impreso. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 2007.

GARCÍA R. Compendio de alternativas para la superación de cuadros y reservas. La Habana, Cuba: Ministerio de Educación; 2008.